ROSARIO PÉREZ
@CharoABCToros
Diario ABC de Madrid
Fotos: EFE
Y ahí estaba el pitón derecho, cubierto de sangre, en una
imagen aterradora. Estaba claro que era sangre humana. ¿En qué tramo fue? De
primera no lo supimos los que veíamos el encierro en la pequeña pantalla,
aunque luego ya se adivinaría en la repetición. Sí vimos desde el principio al
cárdeno que tomó la ventaja y abrió la manada, además de contemplar de cerca
algún manso. Eso lo bordan en la retransmisión: tan bonitos con sus lunares
achocolatados… El tendido twittero se incendió de críticas: no era para menos.
¿Los toros? Hombre, pues sabemos que se corren seis (este 11
de julio, cinco) y, si como ocurre con la mayoría de mañanas de esta edición
sanferminera en la que van bastante hermanados, tenemos la suerte de apreciar a
todos, dentro de un orden…
Pero lo de hoy, en el debut de la ganadería de José Escolar,
ha sido impresentable. Siendo generosos, nos quedamos sin ver la mitad de la
carrera. ¿Puede ser peor la realización? Una fiesta popular y universal,seguida
en todo el mundo, ¿y andamos así? El de hoy, además, ha sido el de mayor
audiencia, con 1.800.000 espectadores. Boquiabiertos nos hemos quedado todos al
perdernos gran parte de un encierro tan emocionante como peligroso.
Suponemos que con la crisis hay menor presupuesto para
cámaras, etcétera. Eso sí, cuentan con una tirolina desde la que se ven
balconcillos y toros como puntos negros, al estilo de una famosa crónica de
Cañabate.
Pitos para la realización. Y pitos también para la
entrevistadora a pie de calle o balcón, que lo mismo se mete en una churrería,
que habla con los amigos de una despedida de solteros o se come un canapé
Michelin. Vale, en la variedad está el gusto. Todo muy bonito hasta ahí. Pero
este sábado se ha lucido: en su micrófono, de protagonista, tenía a Iván
Fandiño, un torero que ha hecho dos paseíllos seguidos en San Fermín (jueves y
viernes, oiga, recientito), que cortó una oreja anteayer y que ayer sufrió una
soberana voltereta con el último toro. Pues a la citada entrevistadora, cuyo
nombre no recuerdo, no se le ocurre ni hacer una pregunta por su paso por la
feria ni por cómo se encontraba tras la cogida. ¡Nada! ¿Un torero? ¿Eso qué es?
Ninguneo absoluto de Televisión Española a los que se juegan las femorales en
el ruedo. Al próximo día, salvo pacto previo -que es lo que hay que hacer con
un ente público que da dé lado a la Fiesta, cultura española y universal, y lo suple
con dos migajas (El Juli se televisó gratuitamente en una encerrona que fue un
exitazo para todos)-, que hable Rita la Cantaora. Y menos desmonterados y más
acción, que aquí la culpa es de todos.
Sin corrida no hay encierro. Lo dijo en la primera jornada
en corto y por derecho Elena Sánchez, la única que en la retransmisiones hace
un quite y da valor a la Fiesta: “No olvidemos que estos toros no estarían aquí
si por la tarde no hubiese corrida”.
Nota: Al parecer no se descarta retransmitir alguna corrida
más este año, y dos debe parecerles multitud… ¡Qué grande sería que una corrida
de San Fermín se hubiese visto por el canal de todos los españoles!
No hay comentarios:
Publicar un comentario