El
rejoneador de la Puebla del Río corta dos orejas y pierde otras dos por el
rejón de muerte y sale a hombros junto al local Óscar Borjas en el cierre de la
feria de Burgos Hermoso de Mendoza cortó una oreja del peor lote de una corrida
de Luis Terrón.
IÑIGO CRESPO
Diario ELMUNDO de Madrid
Las dos faenas que firmó Diego Ventura ayer fueron
de un poder formidable. Una exhibición en toda regla frente a los dos toros que
más tuvieron que torear de una dispersa corrida de Luis Terrón. Dos faenas que
tuvieron el secreto del mando y de la exposición. Le cortó dos orejas al quinto
y perdió por los hierros de muerte las dos del segundo.
De los dos ejemplares que sorteó Ventura, el primero
tuvo escaso fuelle de inicio hasta que en el último tramo y por su falta de
raza empezó a protestar por arriba. Había cambiado el sevillano con un rejón de
castigo, cuando sacó a 'Sueño' para ligar un segundo tercio de severo ajuste e
impecable técnica. Sobre la yegua 'Milagro' soportó las tarascadas del burel a
base de cites frontales, valor para dar los pechos y la pureza clásica que da
la despaciosidad y el gobierno. Resultó imposible meter la mano con el rejón
final.
En dos tiempos pero de manera fulminante tumbó al
quinto, un toro que pidió entereza y corazón. Exigente el de Terrón porque se
guardó dentro todo. Reservón, agarrado al piso, esperando siempre el instante
preciso para atacar con fiereza. Ahí estuvo Diego Ventura para darle réplica en
una obra de riesgo, valentía y mérito. Sobre el bayo 'Maño' citó de frente,
pisó los terrenos al toro con determinación, logrando batidas dobles a pitón
contrario. Un duelo entre el instinto del toro y la capacidad del hombre. Faena
de fondo y forma. Con el toro mentido en cintura, llegó la guinda sobre un
caballo muy seguro y muy brillante: 'Remate'. De capa perla, el animal se
conjugó con 'Ventura' para sellar un carrusel de cortas al violín, un par a dos
manos tambien con las cortas y finiquitar a su oponente. Cayeron con
merecimiendo los dos trofeos.
La corrida de Luis Terrón tuvo muy variado acento.
El lote exigente fue para Ventura y el bueno para el burgalés Óscar Borjas que
dejó patente su sello de ser un torero distinto a todos. Ahí esta su camino y
por ahí debe profundizar. Ayer logró el botín de salir a hombros del Coliseum
tras dos actuaciones pletóricas de entrega. Ni un pero. Un rejoneo sencillo
pero un agarrado a un corazón de acero. Sobre 'Giralda' clavó una farpa al
violín muy vistosa, un par a dos manos muy personal y entusiasmó con alardes de
monta. Espectáculo a caballo de Borjas. Elevadas, cambiados de ritmo,
posicionales, la elegancia del paso español. Su camino. Una rosa sobre 'Carmen'
y aunque no hubo refrendo con el rejón de muerte paseó un trofeo del tercero. Y
otro sumó del sexto, frente al que volvió a firmar pasajes de una sinceridad
brutal. Arropado por el público, el de Cárcedo tiró de caballos muy vistosos y
cargados de recursos como 'Cativo', 'Ilusión', 'Giralda' o 'Carmen'. Puerta
Grande.
Hermoso de Mendoza anduvo correcto con su primero,
un toro que acusó un feo rejón de castigo. Y tiró de fondo de armario para
cortar una oreja del cuarto, un toro manejable que acabó parado. El navarro
tuvo que llegar muy encima sobre 'Dalí' con el fin de llegar al público.
Concluyó sobre 'Pirata' clavando cortas y finiquitando de rejonazo y
descabello.
FICHA DEL FESTEJO
Nuevo Coliseo de Burgos. Miércoles, 1 de
julio. Última de feria. Casi lleno.
Toros para rejones de Luis Terrón, de buena presencia y variado juego. Exigentes 2º y 5º,
buenos 3º y 6º.
Pablo
Hermoso de Mendoza, pinchazo
(silencio). En el cuarto, rejonazo y descabello (oreja).
Diego
Ventura, dos pinchazos, rejonazo
(ovación). En el quinto, rejonazo en dos tiempos (dos orejas).
Óscar
Borjas, dos pinchazos y rejonazo
(oreja). En el sexto, pinchazo, rejonazo y descabello (oreja).
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