Revocado proceder antitaurino de la Defensoría del Pueblo

En fase de “sustanciación” dicha medida

Precisamente está el precedente en 1996 de la Comunidad de Madrid haber solicitado un estudio de impacto a los menores de edad con relación a la fiesta brava ante especialista de tres universidades, ofreciendo como resultado ninguna influencia negativa su presencia. Foto: Golfredo Rojas 

RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ

@rubenvillafraz

Un importante pulso a favor de la fiesta brava en Mérida, que bien puede servir para el resto de ciudades y poblados taurinos del país ha tenido lugar el pasado viernes. Se trata de la revocación del proceder antitaurino que había enfilado la Defensoría del Pueblo contra la fiesta brava, en este caso específicamente con la prohibición de la entrada y actuación en festejos taurinos de menores de edad, tal y como se puso de manifiesto en la pasada Feria de la Virgen de Regla, en la ciudad de Tovar.

En tal sentido, el Tribunal de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de Mérida, bajo petición expresa de asesores jurídicos de la Escuela Taurina “Humberto Álvarez”,  Consejo Municipal de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, Comisión Taurina del Municipio Libertador y Asociación Taurina de Mérida, se ha pronunciado en rechazar el proceder y medidas arbitrarias, inconstitucionales e ilegales que vino y ha venido ejerciendo la Defensoría del Pueblo en Mérida, por mandato directo de la encargada a nivel nacional de este ente gubernamental, Dra. María Gabriela Ramírez.

Dicho tribunal toma esta decisión basándose en el precedente de haberse ya pronunciado en sentencia dictada en enero de 2010 sobre estas medidas, en la cual NO SE IMPEDÍA el ingreso de menores a los festejos taurinos, muchos menos actuar en ellos, siempre y cuando lo hagan bajo la supervisión de sus padres o representantes legales.

El curso de esta delicada situación hace que la causa interpuesta por los entes emeritense señalados anteriormente, se reponga y encuentre en fase de “sustanciación”, en razón de haberse violado el procedimiento de notificación –como ha quedado en evidencia que la Defensoría haya comunicado ante las autoridades taurinas incluso hasta tres días antes de los festejos feriales medidas prohibitivas contra los menores-, lo que lleve en lenguaje jurídico dicha causa a la “indefensión” de dichas medidas.

Todo ello permitirá que los entes protaurinos en la ciudad merideña promuevan y desde ya estudien pruebas contundentes basadas en estudios psicológicos y pedagógicos, sobre el hecho de garantizar la entrada de menores a los festejos taurinos, tal y como había venido siendo normalmente hasta que el ataque directo de la Defensoría se ensañara sobre la fiesta brava en Venezuela como bandera.