Para
la importación de toros de lidia
Toros de procedencia española esperan lidiar en Valencia y San Cristóbal tras el registro de su trámite ante autoridades del INSAI. Foto: Mauricio Berho |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
En el mar burocrático que caracteriza las
gestiones gubernamentales en este país, nuevamente la fiesta brava, no ajena a
estas circunstancias, se coloca en regla. Se trata en este caso en la oficialización
por parte de las autoridades de Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral
(INSAI) del aval como Importadores de Toros de Lidia a las Empresas Taurinas
Fabio Grisolía C.A. y AGROCASTA C.A. representadas la primera por el Ingeniero Nelson
Grisolía y Abogado Alex Pereira, y la segunda, el matador de toros Erick
Cortés.
En este sentido, ambas empresas han recibido
el visto bueno para la traída de sangre brava fuera de nuestras fronteras, aún
cuando esto no es novedad, solo con el hecho de regularizarse, y más si cabe,
tras el cerrado régimen cambiario monetario que vive el país desde hace varios
años.
El panorama se abre tras la reciente
importación de toros de lidia españoles a la Feria de San Sebastián en San Cristóbal,
por parte de los emeritenses Grisolía y Pereira, trayendo consigo
un importante interés no visto del todo recompensado a nivel de la cabaña brava
nacional, tras el supuesto “sacrificio”
a la que fueron sometidos los tres ejemplares del hierro español de Torrestrella que quedaron tras su
lidia, por parte de estas mismas autoridades sanitarias, tras no haber cumplido
estrictamente su cuarentena en el país. Refresco de bravura ibérica que
sospechosamente se trunca en aras de mejorar la limitada oferta ganadera de
toro bravo nacional.
Es por ello que siguiendo el tramite en regla,
en cumplimiento a lo establecido en los artículos 66 y 61 del decreto 6129 con
rango, valor y fuerza de la ley de Salud Agrícola Integral de fecha 3 de junio
de 2008, el que ambas empresas hayan reunido requisitos para tal acreditación,
lo que les abre la posibilidad de además de ello el acceso al SICAD II para el
pago de dichas importaciones, como ya se hizo en la pasada feria
sancristobalense, y se espera repetir el próximo año.
Precisamente sobre este tema se ha consultado
la opinión de Alex Pereira, artífice de toda la tramitación a la
importación española que se hizo este año en la FISS, donde en señala primero,
la satisfacción de regularizar el trámite de traída de reses de lidia al país, a
sabiendas de las oportunidades que tendría para el aficionado, sin dejar a un
lado así mismo sentar las bases para una futura consolidación de nuestra cabaña
brava en el país, tras poder los ganaderos nacionales refrescar sangre, siempre
y cuando se cumplan las normativas sanitarias exigidas.
Por otro lado, la oportunidad de apreciar otro
tipo de toro al ya acostumbrado a los conocidos hierros nacionales y
colombianos que ha lidiado en los últimos años en el país, alternativa que bien
se podría de nuevo colocar de manifiesto, tras el anuncio de la posible
importación de toros bravos españoles en el marco de la Feria de Valencia, en
noviembre, y en San Cristóbal en enero próximo, donde estudian la posibilidad
–tras próxima visita al campo bravo español- de presentar encierros de
procedencia Juan Pedro Domecq,
Alcurrucén, Núñez del Cuvillo, Jandilla, Torrestrella o incluso, Victorino Martin.
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