Este jueves harán el paseíllo en
Madrid toreros procedentes de seis de los ocho países donde se mantiene viva la
llama de la tauromaquia para reivindicar su carácter internacional. Bautista,
Bolivar, Del Álamo, Galdós, Luis David y Colombo lidiarán respectivamente un
toro de El Pilar.
GONZALO I. BIENVENIDA
@GonIzdoBienve
MARÍA VALLEJO
@m_vallejo_
Diario EL MUNDO de
Madrid
Plaza 1 ha promocionado la presente Feria de San Isidro como
el Mundial del Toreo. En ocho países está viva la llama de la tauromaquia. Seis
naciones están representadas en la corrida de este jueves con sus matadores
(cada uno matará un toro de El Pilar). La intensidad del toreo no cesa en sus países:
España, Francia, Colombia, Perú, México y Venezuela. La internacionalidad de la
tauromaquia es una realidad incontestable.
Como lo es la cifra de cinco millones de espectadores que
acudieron a las plazas de toros españolas en 2017, según datos del Ministerio
de Cultura. A la que se suman los 20 millones de asistentes a los festejos
populares para consolidar la tauromaquia como un fenómeno cultural de masas con
apabullante calado en la sociedad española.
Y en las arcas del Estado: el impacto económico anual del
toreo en España ronda los 3.600 millones de euros, según el último informe de
ANOET. 73 de los cuales proceden de la explosión taurómaca que vive la
Monumental de las Ventas por el mes de mayo. Donde este jueves hará el paseíllo
Juan del Álamo, como embajador de España en la corrida de las seis naciones.
Su inventor, Simón Casas, coló el nombre de Francia en el epicentro
mundial del toreo. De la creación del primer sindicato de toreros franceses,
con Nimeño I y el productor como únicos afiliados, al alzamiento del coliseo
romano de Nimes como uno de los grandes foros del circuito. Desde la década de
los 80, Casas ha buscado dotar los carteles del milenario anfiteatro con el
cariz de acontecimiento.
Bajo esa etiqueta sacó a Camino y a 'El Litri' del retiro
para dar la alternativa a sus respectivos hijos (1987), anunció a José Tomás
como único espada en la histórica de 2012 y convirtió el coliseo en uno de los
escenarios soñados por los líderes del escalafón novilleril para recibir el
doctorado: El Juli, Roca Rey, Álvaro Lorenzo, Ginés Marín, Luis David y Andy
Younes (entre otros).
Último matador en tomar la alternativa de un país que vive
una revolucionaria explosión de toreo. 49 ganaderías, 51 plazas de toros y
siete grandes ferias apuntalan la creciente importancia de la tauromaquia en
Francia. Representada este jueves por Juan Bautista.
En Colombia la fiesta vive un momento crucial. Está siendo
duramente vapuleada por los políticos y en los últimos años se ha visto
prácticamente reducida a cuatro grandes ferias como son Bogotá, Cali, Medellín
y Manizales. La que mayor salud tiene es esta última en la que el ambiente es
inigualable. Luis Bolívar representa esta tarde a Colombia. También hay otros
toreros interesantes como Ritter, anunciado el próximo lunes en Madrid, Juan de
Castilla o Luis Miguel Castrillón. Todos ellos bajo la sombra del gran ídolo de
la afición universal: César Rincón. Pese a haber descendido el número de
festejos en las provincias y pueblos de Colombia, la tauromaquia continúa viva
gracias al esfuerzo de los ganaderos, de los empresarios -como Felipe Negret,
que encabezó la defensa de la fiesta en la capital- y el de la afición que
responde siempre de forma rotunda.
El fenómeno Roca Rey ha logrado reactivar la afición del
Perú. La fuerza de la incipiente figura del toreo ha sido como un desfibrilador
para el sector taurino de su país. De forma paralela también ha surgido Joaquín
Galdós, que torea esta tarde ondeando la bandera de Perú. Un país en el que hay
más plazas de toros que estadios de fútbol. Una tierra donde el toreo es parte
fundamental de su cultura ya que en todas las celebraciones el toro es el
protagonista. Se celebran más de 700 festejos taurinos.
Luis David Adame defenderá el pabellón de México. Un país en
el que la actividad taurina está repartida durante todo el año con cerca de
1500 festejos taurinos contando con los populares. La península de Yucatán
concentra gran parte de la corridas celebradas, precisamente Aguascalientes
-ciudad de origen de los Adame- y sus alrededores es el núcleo donde más
festejos se dan. En México hay unas 350 ganaderías dedicadas al toro de lidia y
supone un activo económico muy importante para el país. El seguimiento de los
toros está al alza gracias a la nueva generación de toreros emergentes de
nacionalidad mexicana y, también, a la incondicional presencia de figuras del
toreo españolas en los carteles de las principales ferias.
La bandera de Venezuela lucirá este miércoles en el capote
de paseo de Jesús Enrique Colombo. Y en las banderillas explosivas del joven.
Como grito de un país que siente el toreo por encima de la represión del
régimen bolivariano. Que respira tauromaquia a pesar de las plazas de toros
desaparecidas y la cabaña brava ahogada por la censura chavista. Venezuela
encuentra en Mérida su principal baluarte taurino. En Colombo, su gran
esperanza. El novel matador de toros rompió este miércoles la sequía de 19 años
sin que un venezolano confirmase el doctorado en Las Ventas (Leonardo Benítez
había sido el último en 1986).
24 horas después de su confirmación, Colombo y su bandera
vuelven a la Monumental para seguir gritando el nombre de Venezuela. Y quemar
su último cartucho de San Isidro ante los toros de El Pilar.
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