Tras realizarle un TAC y
descartar lesiones de gravedad a parte de la sufrida en el pómulo izquierdo Los
médicos han decidido que el peruano permanezca al menos un día entero en la UCI
y aseguran que debe estar un tiempo en reposo, del que todavía está por
determinar su duración.
RODRIGO CARRASCO
El diestro peruano fue zarandeado violentamente el dia de ayer en Palencia
por el tercer toro de Charro de Llen, día de su reaparición. El parte
médico de la Plaza de toros de Los Campos Góticos firmado por el doctor Rafael
Sánchez reza lo siguiente: «Cogida, presentando conmoción cerebral y
traumatismo craneoencefálico. Pasa a la enfermería, donde es monitorizado,
objetivándose constantes vitales, dentro de la normalidad. Glasgow 13 [NDR la
Escala Glasgow evalúa el nivel de consciencia; el nivel 13 hace referencia a un
traumatismo craneoencefálico moderado]. Reflejos normales, exploración
neurológica: desorientación temporo-espacial y visión borrosa. Explorar:
contusión erosiva en región cervical. Se traslada al Hospital Río Carrión en
ambulancia monitorizada para completar estudio». Actualmente se
encuentra bajo observación en la UCI.
Su apoderado, José Antonio Campuzano, ha confirmado que en
el hospital se ha continuado con su estudio; «Se le ha realizado un TAC que ha
descartado lesiones de mayor gravedad, aunque se ha detectado una fractura en
el pómulo izquierdo, pero que no requerirá cirugía». Además el
apoderado ha reconocido que ha temido consecuencias peores; «Instantes
después del percance, tras comprobar el estado inconsciente de Roca Rey he
sentido gran preocupación, especialmente porque venía de sufrir en Málaga un
episodio similar. Pero 4 minutos después he podido tranquilizarme al ver que
poco a poco recuperaba la consciencia, aunque se encontraba muy aturdido, ha
sido ya en el traslado al hospital cuando ha comenzado a ser consciente de la
situación y a volver a recordar detalles de esa misma tarde».
Dado que ha sufrido dos fuertes conmociones muy cercanas en
el tiempo, en Málaga y Palencia, los médicos han decidido que el torero
permanezca en observación y que guarde reposo; «Los médicos nos han dicho que
debe estar al menos 24 horas en la UCI y que luego esté unos días en descanso
absoluto. La duración de este periodo de recuperación todavía está por determinar,
es muy pronto, ahora lo importante es ver su evolución».
Plaza de toros de Los Campos Góticos de Palencia. Tercera de
la Feria de San Antolín. Se lidiaron toros de Charro de Llen, deslucidos. Dos
tercios de plaza.
El Juli, silencio, silencio en el que mató por Roca Rey y
silencio.
López Simón, ovación, oreja y silencio en el que mató por
Roca Rey.
Roca Rey, que reaparecía, herido en el único que lidió.
EL VERANO PELIGROSO
El atracón de festejos, sin apenas parar en todo el verano,
donde ha expuesto al máximo en cada plaza que ha pisado, le ha vuelto a pasar
factura a Roca Rey, herido en La Malagueta a mediados de agosto y que en su
reaparición ha vuelto a verse en manos de las asistencias. Cuarenta y tres
muletazos dio El Juli al primero de la tarde, todos de uno en uno porque el
toro salía de la pañosa mirando a los tendidos. Aunque parezca increíble, la
música rompió a sonar y el matador, con buen criterio, la mandó callar. Tras
matar muy mal, los tendidos enmudecieron.
El Juli tuvo que rematar al toro que cogió a Roca Rey y lo
hizo con prontitud. En el segundo de su lote protagonizó una faena variada ante
un toro de corto recorrido que le obligó a meterse entre los pitones antes de
utilizar el estoque con poca fortuna. Muchos muletazos y más enganchones tuvo
López Simón en su primero, con el que no terminó de acoplarse ante un astado
que iba y venía con sosería y al que su matador dio pases sueltos. En el
quinto, que mató en sustitución de Roca Rey, realizó una faena rutinaria y
funcionarial, con muchos pases y poco limpios. Mató con prontitud y un público
generoso le concedió la oreja. En el sexto, último de la tarde, volvió a
obsequiar al público con una faena aburrida y tediosa ante un toro de anodinas
embestidas.
Roca Rey, que reaparecía tras la cogida hace dos semanas en
Málaga comenzó la faena con unos muletazos ajustadísimos en el centro del ruedo
y continuó después con una despaciosa serie con la derecha. Al iniciar otra
serie, el toro le prendió y en la arena pasó unos angustioso segundos a merced
del animal, al que remató El Juli después de unos pases de aliño. / EFE
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