Plazas de toros a la espera de convocatoria
de licitación.
Se espera celeridad en los próximos días para dar claridad a los destinos de nuestras principales citas taurinas de Tovar y Mérida. Foto: Aníbal García Soteldo |
RUBÉN DARÍO
VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Conocidos los resultados que han deparado las tres
ferias andinas más importantes que conforman el calendario taurino nacional,
como son la septembrina de Tovar, la sancristobalence de San Sebastián y la
carnavalesca del Sol, es bueno señalar que de ellas, las que corresponden a las
merideñas en específico salen este año a licitación, si los términos legales así
lo deciden y se cumplen.
El caso de la tradicional cita tovareña viene dado
por el vencimiento del contrato de arrendamiento que la edición pasada tuvo a
la solvente Toricantano C.A. los últimos cuatro años como regente de los
festejos taurinos en el marco de las festividades de la Virgen de Regla. Cuatro
temporadas donde se ha hecho un trabajo cónsono y ajustado a lo que demanda y
ha demandado la afición de la Sultana del Mocotíes, convirtiendo al ruedo del
Coliseo El Llano en referencia del lio del toro venezolano, más como lo fue en
septiembre pasado donde muchos apostaron al descalabro.
Se espera que el recién designado burgomaestre tovareño
Luis “Chevrolito” Márquez en los próximos días convoque a una licitación limpia
y transparente que por lo menos mantenga la categoría y transcendencia de dicho
serial, pues es bien sabido que la feria se mantiene con eso, con la seriedad en
el toro principalmente y toreros que vengan a estas citas con la ambición del
triunfo como premisa. Los días pasan, y a poco ya estamos con las fechas
encima, más en los tiempos que corren, donde se debe abrir abono con el tiempo
prudencial para el aficionado.
Por su parte lo de la Feria del Sol falta el definitivo
pronunciamiento oficial de la Procuraduría General del Estado Mérida ante el galimatías
que supone el supuesto otro año de gracia en el contrato que se ha “fabricado e
inventado” la polémica empresa taurina Ramguertauro C.A. los últimos días de
feria, apadrinados por personeros de oficio de COREMER, a sabiendas y
conscientes de lo ilegal del mismo, tras lo firmado y acordado en febrero del
2014 cuando en aquella ocasión se daba el año de gracia que este año cumplió la
mencionada empresa, tras el fallido intento de dar la edición ese año, convulsa
por las protestas generales que se vivieron ese año.
Precisamente en la persona del Dr. Jesús Morón
Moreno, designado por el Gobernador Ramón Guevara, estaría dilucidar esta rara,
singular y oscura situación con la complicidad de muchos que se dicen llamar
taurinos de “hueso colorao” para que inmediatamente con ello se convoque al
proceso de licitación el cual COREMER estaría destinada abrir para definir
empresa taurina para el “Carnaval Taurino de América” por el periodo 2019-2022,
como debería ser.
Se da la circunstancia que tanto la arena de la
Plaza de Toros Monumental de Mérida como el Coliseo El Llano de Tovar están
bajo la responsabilidad y mantenimiento de COREMER, cuya figura jurídica en su mayoría
tiene responsabilidad la Gobernación del Estado Mérida.
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