El
riojano cuaja una faena de nota al cuarto y el presidente le niega la puerta
grande desencadenado una bronca monumental y dos vueltas al ruedo del torero.
ÍÑIGO
CRESPO
Logroño
Impronta de Diego Urdiales en La Ribera. El
riojano cautivó en su plaza de Logroño cuajando una faena de gran trazo y
firmeza al natural. Emociones de Urdiales que emocionó con una labor intensa
frente al cuarto, el mejor ejemplar de una incómoda y deslucida corrida de El
Pilar que planteó más dificultades que las que evidenció.
Diego Urdiales instrumentó muletazos sueltos
buenos al primer toro de la tarde, un animal de franca y rítmica embestida.
Labor suave y elegante que tuvo sus mejores pasajes por el lado derecho.
Se rebrincó el cuarto que tuvo buen criterio en su
embestida y quiso deslizarse pero no acabó de acompasar su embestida por estar
al límite de la fortaleza. Toro noble al que Urdiales cuajó una faena estimable
que tuvo muletazos sueltos de mucho sabor. Faltó continuidad por las
condiciones del animal. Mediada la faena el toro prendió al de Arnedo sin
consecuencias pero el trance sirvió para que Urdiales desempolvara lo mejor de
su tauromaquia y cuajase dos soberbias tandas de naturales de planta encajada y
mentón hundido. Profundidad del riojano que sacó a escena su ímpetu y su fondo.
Mérito e intensidad. Gran estocada. Oreja con fuerte petición de la segunda y
dos vueltas al ruedo.
Miguel Ángel Perera superó en actitud, firmeza y temple al
segundo, que fue un toro sin clase y muy justo de fuerza. El extremeño anduvo
muy metido y sólido, logrando una faena de mucha solvencia. El segundo del lote
del extremeño fue un toro áspero y duro que no humilló y que soltaba la cara
con agresividad. Esfuerzo de Perera que estuvo con una determinación a prueba
de bombas. Qué difícil estar tan fácil con un toro tan complicado. Importante
Perera en labor para aficionados.
No rompió la faena de Cayetano frente al
endeble tercero, ejemplar deslucido que no tuvo recorrido. Labor plana y sin
brillo. Cumplió sin tener mayores opciones, si acaso, más seguridad con la
espada. No ayudó el sexto, que tuvo movilidad y frente al que Cayetano puso
disposición, exprimiendo a su oponente con oficio y buen hacer. Faena de
recursos.
EL PILAR | Urdiales, Perera y Cayetano
Toros de El Pilar, bien presentados, hondos, variados de hechuras;
complicados salvo el 4º, que fue bueno y encastado.
Diego
Urdiales, de rioja y oro.
Pinchazo y estocada corta (silencio). En el cuarto, gran estocada (oreja con
fuerte petición de la segunda).
Miguel
Ángel Perera, de grana y oro.
Pinchazo y estocada casi entera (silencio). En el quinto, estocada casi entera
y un descabello (ovación).
Cayetano, de azul pavo y oro. Tres pinchazos y
estocada (silencio). En el sexto, estocada (silencio).
Plaza de toros de La Ribera. Jueves, 21 de
septiembre de 2017. Cuarta de feria. Tres cuartos de entrada.
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