Erick
Cortez seguramente sigue soñando con cuajar el toro y la faena perfecta. Porque
25 años no son nada para el que ama lo que hace.
 Paco Ojeda con testimonio de César Rincón le confiere la alternativa ante un Juan Pedro a Erick Cortéz |
Víctor Ramírez
“Vitico”
El matador de toros Erick Cortez cumple el próximo
martes 19 de septiembre 25 años de alternativa, tras una destacada campaña como
novillero. Aventajado y precoz como torero, Erick Cortez vistió por primera vez
de luces en Maracay el 3 de noviembre de 1.985, y se presentó con picadores en
el Nuevo Circo de Caracas el 3 de agosto de 1.986, alternando con José Linares “El
Yoni” y Leonardo Coronado, siendo su primer novillo “Danzón”, número 74, con
396 kilos de Rancho Grande.
Es recordada la novillada en la que compartió
puerta grande en el Nuevo Circo de Caracas con Leonardo Benítez, Alonso Díaz y
el ganadero Fabito Grisolía hijo el 18 de junio de 1989. Pero las ilusiones del
moreno espada le llevaron a Europa para redondear su formación como torero.
Se presentó en Ampuero (Santander) el 6 de
septiembre de 1.987 en novillada sin picadores alternando con Antonio Caba y
Vicente Bejarano, con novillos de El Sierro y Antonio Pérez Angoso. Se presentó
con picadores en Europa en la plaza francesa de Frejus el 15 de julio de 1.990,
estoqueando novillos de Bernardino Jiménez, alternando con Bernard Marsella y
Jesulín de Ubrique, cortándole las dos orejas a su primer novillo.
En España fue en la plaza de Vinaroz (Castellón)
donde debutó con picadores, lidiando astados de Bernardino Jiménez alternando
con Rafael González “Chiquilín” y Antonio Borrero “Chamaco”. En tan señalada
tarde cortó tres orejas. Madrid le vería debutar en Las Ventas el día 3 de mayo
de 1.992, para dar cuenta de astados de Palomo Linares, alternando con Luis
José Amador y Luis Delgado. El novillo de la presentación fue “Conejito”, herrado con el número 33,
negro con 451 kilos. Vistió de gris perla y oro con remates negros y saludó en
el tercio una ovación tras estoquear a su primero.
Erick Cortez se presentó en la Maestranza de
Sevilla el día 31 de mayo de 1.992, para despachar un encierro de Zalduendo,
alternando con Manolo Sánchez y Manuel Amador, vestido de gris perla y oro.
Ovacionado con su primero, escuchó palmas tras aviso en su segundo.
La campaña como novillero de Cortez fue muy
importante, compartió carteles con los espadas punteros del momento, en
novilladas donde se disfrutaba de gran toreo. Los compañeros habituales del
venezolano eran toreros como Jesulín de Ubrique, Finito de Córdoba, Chamaco,
Romerito, Manolo Sánchez, Oscar Higares, Ángel de la Rosa, Manuel Díaz “El
Cordobés”, por solo nombrar algunos.
Entre 1.990 y 1.992 toreó 65 novilladas, que se
dice fácil, pero estas cifras encierran un enorme mérito, tratándose de un
torero americano.
La alternativa fue todo un lujo. Ataviado de
blanco y oro, hizo el paseíllo en Nimes para recibir la borla de matador de
toros teniendo como padrino a Paco Ojeda, y como testigo César Rincón. Ese 19
de septiembre de 1.992 se lidiaron toros de Jandilla. El de la alternativa fue
“Amargado”, número 93, con 530 kilos. Saludó una gran ovación con este toro y
escuchó palmas en el segundo. Así comenzaba una larga trayectoria, que llega a
25 años en la que como toda carrera ha habido grandes triunfos, tardes
difíciles y sustos, normales en este hermoso oficio.
Recordado es el triunfo de Vinaroz cuando ante César
Rincón y Enrique Ponce en 1.993 cortó tres orejas. Erick Cortez ha toreado
mucho en Venezuela, siendo uno de los diestros nacionales que más corridas ha
sumado en suelo patrio, triunfando en las principales plazas como San
Cristóbal, Mérida, Maracay, Maracaibo, Valencia y en muchos cosos de provincia.
Es el que ha estoqueado el toro más pesado lidiado
en Mérida, el recordado “Eco del Viento”
de La Cruz de Hierro en la Feria del Sol de 1999. Muchos detalles engrandecen
la biografía de un buen torero, inquieto y defensor de la fiesta, empresario y
sobre todo aficionado, catador del buen toreo y un excelente profesional.
Erick Cortez seguramente sigue soñando con cuajar
el toro y la faena perfecta. Porque 25 años no son nada para el que ama lo que
hace.
No hay comentarios:
Publicar un comentario