El
empresario de plaza de toros de La Chata analiza los puntos fuertes del ciclo
más intenso del mes de septiembre que se sostiene y prestigia sobre la seriedad
de su toro y la presencia de todas las figuras "a pesar de las
adversidades".
MARÍA
VALLEJO
Diario EL
MUNDO de Madrid
El ritmo frenético de la vida de los toreros en la
recta final -y no por ello menos álgida- de la temporada, siempre entre las
astas de los toros y las largas horas de carretera, encuentra en Albacete la
parada obligada por excelencia del mes de septiembre. Lo que ocurre en el coso
de la calle Feria durante sus diez días de tauromaquia ininterrumpida es ya una
realidad consolidada donde el toro impone, el público exige y el triunfo vale.
"La feria de Albacete ha cogido mucho peso y los toreros saben que lo que
ocurre en ella tiene repercusión en el devenir de la temporada", dice Luis
Manuel Lozano, empresario al frente del timón de la plaza de toros de La Chata.
Esa importancia no es otra que la que da el rey de
la Fiesta. El jugarse los muslos ante "un toro íntegro y con trapío".
Cuestión "innegociable" para Luis Manuel Lozano, porque "a ello
se debe, en gran parte, la salud de la feria. Eso es lo que quiere la afición
de Albacete, porque forma parte de la personalidad de esta plaza y es lo que
hace que el abonado renueve año tras año", afirma.
La ecuación sin embargo no se despeja con tanta
facilidad. Al toro toro -que dirían antaño en el tendido de los sastres- hay
que sumarle otra constante en la alquimia empresarial de los Lozano: la
presencia de las figuras, en esta ocasión por partida doble -El Juli, a la
cabeza y desde un principio, Perera, Talavante y Roca Rey-, y la apuesta por
los nuevos valores, traducida en los dobletes de Rubén Pinar -máximo triunfador
de la pasada feria- y Ginés Marín y la presencia de José Garrido, Álvaro
Lorenzo y Juan del Álamo. "Desde que entramos en Albacete, hemos querido
mantener esa mezcla de figuras y jóvenes y anunciar a los toreros que destacan
durante la temporada. La feria se anuncia en julio, cuando ya han pasado los primeros
puertos de montaña, y eso nos permite contar con los toreros que han cosechado
triunfos relevantes", dice el empresario.
Y otra constante: contar con la plana mayor del
toreo. Aunque este año, el del centenario, reunir al póquer de ases, con
Morante aburrido y Manzanares operado de urgencia, se ha convertido en una
ardua tarea. "En los carteles iniciales contábamos con ambos pero, a pesar
de todas las adversidades que hemos tenido, creo que las sustituciones [Roca
Rey, Perera y Talavante] han estado a la altura y hemos confeccionado una gran
feria. La prueba está en que tanto la venta de abonos como de entradas sueltas
va a buen ritmo", señala Luis Manuel Lozano, contento de que el número de
abonados haya igualado al de la pasada temporada.
Y quizá sea precisamente la de este sábado una de
las que, en medio de la cascada de sustituciones desencadenada en el último
mes, más haya llamado la atención del aficionado: Miguel Ángel Perera y
Alejandro Talavante por Manzanares en una corrida que pasa a ser de ocho toros
(de Garcigrande) -completan el cuarteto El Fandi y Roca Rey-. "Aunque es
la realidad, la lectura no es que hayamos contratado a dos toreros para
sustituir a Manzanares. En la ciudad hay mucho interés por celebrar los 100
años de la inauguración de la plaza y, al no poder dar el cartel inicial, hemos
querido hacer una variación total y conmemorarlo con una corrida de ocho toros,
igual que se hizo ya en el quince aniversario del coso", cuenta el
empresario que, como buen timonel, y más cuando el navío surca las bravas e
inciertas aguas del toreo, sigue sorteando obstáculos para sacar el centenario
a flote ahora que el nombre de El Fandi, que causó baja este miércoles en
Valladolid, se tambalea en el cartel: "Aunque no puede asegurármelo, su apoderado
me ha dicho que la intención del torero es estar el domingo en Albacete. Quiero
ser optimista, pero si nos confirman que no, estando ya los toros en Albacete y
habiendo anunciado que se lidiarán ocho, pondremos a otro torero en su
lugar", afirma.
Mientras los pilares de todas las ferias parecen
haberse desmoronado como un castillo de naipes (Morante y Manzanares), Julián
López 'El Juli' sigue llevando sobre la espalda, ya trajana, el peso inclemente
del circuito. "El Juli tiene un gran compromiso con Albacete. Es una plaza
que le gusta mucho y nunca ha rehuido venir dos tardes, aunque para él, con el
toro que sale y a finales de temporada, podría ser más cómodo venir sólo una.
Es uno de los toreros que más gente convoca y que venga dos tardes da categoría
a la feria", dice Luis Manuel Lozano, que como apoderado valora la
sobrecarga que supone para el diestro la ausencia de sus compañeros:
"Quienes tiran de los abonos y vertebran las temporadas son las figuras.
Ahora que se han caído dos puntales fuertes, Julián está tirando del carro. En
la mayoría de las corridas que está toreando estaba anunciado con Manzanares,
con Morante o con los dos. Tenemos que ir gestionando sustituciones y, por
petición expresa de Julián, estamos dando cabida a toreros como Garrido o
Román, que va a torear con nosotros en Valladolid, para potenciar nuevos
valores", cuenta el apoderado de El Juli.
Y aunque cierto es que El Juli no rehúsa de los
grandes escenarios ni de batirse el cobre con la nueva hornada, en torno a la
figura del madrileño revolotea algún que otro rumor de retirada. "Todo lo
contario, el próximo año va a cumplir 20 años de alternativa, en los ha logrado
mantenerse en figura de forma consecutiva, y quiere celebrarlo con una
temporada fuerte e intensa. Después, ya decidirá", desmiente su apoderado,
quien -junto a Manuel Caballero, Manuel Amador y su hermano Pablo- cumple ya su
séptimo año a bordo de la cabina de mando de La Chata.
El último, según el pliego, a no ser que la
cuádriga de empresarios solicite al Ayuntamiento una prórroga de dos años más.
De momento, "sólo tenemos ojos para la feria. Una vez que termine, y
veamos el resultado, decidiremos si prorrogamos o no", apunta fugazmente
el empresario, que, ya en capilla, cruza los dedos para que salga bien un ciclo
cardinal en la historia de la plaza de toros de Albacete. Marcado por los 100
años de su inauguración. Y "por la sombra de Dámaso González, que estará
presente en todo momento", concluye Luis Manuel Lozano.
CARTELES DEL CENTENARIO DE ALBACETE
Viernes
8 de septiembre. Toros de La Quinta para Rubén Pinar, Palacios y Miguel
Tendero.
Sábado 9.
Toros de Garcigrande para El Fandi, Miguel Ángel Perera, Alejandro Talavante y
Roca Rey.
Domingo
10. Toros de Ángel Sánchez para Sergio Galán, Diego Ventura y Leonardo
Hernández.
Lunes 11.
Novillos del Cortijillo para Mario Sotos, Toñete y David Martínez, que debuta.
Martes
12. Toros de Torrestrella para Rubén Pinar, López Simón y José Garrido.
Miércoles
13. Novillos de Fernando Peña para Diego Carretero, Jesús Enrique
Colombo y Marcos.
Jueves
14. Toros de Santiago Domecq para Antonio Ferrera, Miguel Ángel Perera
y Ginés Marín.
Viernes
15. Dos toros para rejones de Guiomar de Moura para Diego Ventura y
cuatro del Vellosino para El Juli y Roca Rey.
Sábado
16. Toros de Alcurrucén para Juan del Álamo, Álvaro Lorenzo y Ginés
Marín.
Domingo
17. Toros de Daniel Ruiz para El Juli, Alejandro Talavante y Cayetano.
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