En su estreno como matador de
toros Manolo saldría en hombros, al igual que lo hizo Jesús Enrique en festival.
Manolo Vanegas, dando sus primeros pasos triunfales como matador de toros. Foto: EFE |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
La temporada taurina española entra en los días de mayor efervescencia,
a poco que se da curso a las tradicionales citas taurinas del calendario, que
son muchas. Es el verano en tierras del toro bravo que tiene sus días de mayor
incidencia mediado el mes de agosto y gran parte de septiembre.
Los toreros tachirenses Manolo Vanegas y Jesús Enrique
Colombo han estado activos este fin de semana, el primero de los mencionados
estrenando el grado de matador de toros alcanzado en junio pasado en Vic-Fezensac.
En esta ocasión Vanegas ha despachado en la localidad
francesa de Orthez, con el desparpajo y solvencia que atesora, una dura y correosa
corrida del hierro del Cura de Valverde, de la que compartió al final de la
misma la triunfal salida en hombros tras el corte de las dos orejas del que
cerró festejo, junto al espada extremeño de Llerena, Tomás Campos, quien cortaría
oreja en cada uno de sus astados y una cercenaría el gaditano Octavio Chacón,
quien completó cartel.
Bagaje y oficio el dejado en la retina de los aficionados
presentes, según testimonio de las crónicas, lo que le abre el camino a seguir
en la dura lucha que implica abrirse campo en el escalafón mayor.
Éxito así mismo el cosechado en festival de postín en la
localidad toledana de Nombela por Colombo, ante reses del hierro de Lorenzo
Espioja, cortando tres orejas y un rabo, actuando al lado del matador de toros
madrileño Fernando Robleño, quien así mismo cortaría cuatro orejas y un rabo.
Actuación esta de Jesús Enrique que serviría de prologo para
el importante compromiso de este lunes 24 en Santander, en el marco de la
novillada de la Feria de Santiago, despachando utreros de la divisa de Zacarías
Moreno, junto con los ibéricos Daniel Menes y Pablo Mora.
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