Colombo corta la única oreja de
la tarde, tras poner sobre la mesa sus atributos ante el peor lote de un buen
encierro de Fernando Peña.
IÑIGO CRESPO
@Crespo_Inigo
Diario EL MUNDO de
Madrid
Frente a una buena novillada de Fernando Peña brilló el
venezolano José Enrique Colombo que demostró por tercera ocasión esta temporada
en Las Ventas su actitud y aptitud. Su dimensión de novillero capaz y
preparado. Cortó una oreja del sexto tras una labor talentosa.
Exhibió José Enrique Colombo su capacidad frente al tercero
que de los tres primeros ejemplares fue el de menos fuelle. El venezolano
superó a su oponente en raza, en entrega, en dominio de la situacion y en
facilidad absoluta para extraer todas las embestidas del novillo. Firmeza,
seguridad, temple. Muy sobrado Colombo en este capítulo.
Con el sexto que tuvo buena conducta aunque anduvo al límite
de la fuerza, Colombo puso en valor su asiento y su técnica para templar y
sostener la embestida del animal y para dejar patente su inteligencia a la hora
de imponerse a los animales. Los cites, la puesta en escena, el buen manejo de
la mano izquierda. La forma misma de marcar los tempos de su labor. Estocada.
Fue buena la novillada de Fernando Peña. Buena de hechuras y
de nobleza. Tambien de movilidad y clase aunque no resultó completa. Fue un
encierro con fijeza y buenas embestidas que derrocho virtudes durante toda su
lidia. Brillaron la encastada condición de los dos primeros, la clase del
cuarto.
Daniel Crespo toreo bien de capote a su buen primero, con
lances lucidos a la verónica. Animoso y con gusto su buen manejo del percal
antes de cuajar una faena de más pretensiones y concepto que redondez frente a
un novillo que tuvo calidad y entrega. El gaditano se encontró en quinto lugar
con un novillo de noble aunque rebrincada embestida con el que estuvo esforzado
pero sin brillo. Labor aseada de Daniel Crespo que puso criterio pero sin
argumento con un utrero que tampoco lo tuvo.
Por delante se presentó el malagueño Santana Claros que pasó
de puntillas. Poco oficio y poco corazón para sostener sus buenas intenciones.
Poca consistencia del de Fuengirola. Tampoco anduvo fino frente al noble cuarto
que resultó ser un animal con calidad. No se animó el malagueño que logró como
mayor mérito una primera tanda en redondo antes de diluir su actuación en la
desconfiada y el desacople. Con la espada volvió a mostrarse desatinado. Pobre
imagen.
FERNANDO PEÑA | Santana Claros, Daniel Crespo y Jesús Enrique
Colombo
Novillos de Fernando Peña.
Bien presentados, variados de hechuras y tipos. Nobles de buen juego. Encierro
manejable. Buenos 1º, 2º y 4º.
Santana Claros, de verde botella y oro. Estocada
(silencio). En el cuarto, dos pinchazos y media estocada (silencio tras aviso).
Daniel Crespo, de verde hoja y oro. Estocada y tres
descabellos (silencio). En el quinto, dos pinchazos, media estocada y
descabello (silencio).
Jesús Enrique Colombo, de azul pavo y oro. Estocada (ovación). En
el sexto, estocada (oreja).
Al finalizar el paseíllo se guardó un minuto de silencio en memoria del
matador de toros Víctor Barrio,
mortalmente herido hace hoy un año en la Plaza de Toros de Teruel.
Monumental de las Ventas. Domingo, 9 de julio de 2017. Un cuarto de
entrada.
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