CIUDAD DE MÉXICO,
CDMX. Domingo 29 de enero (Especial).- Se dio la décima segunda corrida de
la Temporada Grande Internacional 2016-2017 en la Monumental Plaza México, en
la que resultó triunfador el espada galo Sebastián Castella al cortarle las
orejas a su segundo ejemplar y por ello al final salir en hombros por la Puerta
Grande de “El Encierro”, en tanto que el limeño Roca Rey se hizo de una oreja
de su primero por un estocadón y el queretano Octavio García “El Payo” se fue
de vacío por fallar con la espada. Y el rejoneador Jorge Hernández Gárate abrió
el festejo con una buena actuación.
Así pues, ante una muy buena entrada de fresca y algo de
viento, se lidiaron siete toros de Los Encinos, uno de ellos de regalo, bien
presentados, siendo muy bueno el cuarto que mereció el arrastre lento,
destacando también el primero y el segundo. Y uno de El Vergel para rejones, de
buen juego.
Abrió el festejo el rejoneador potosino Jorge Hernández
Gárate, con un ejemplar de El Vergel, para comenzar montando a “Bucéfalo” y
tras doblarse con el toro, además de templar a la grupa, dejó un rejón de
castigo de buena exposición. Luego, encima de “Rafaelito” toreó de costado y al
estribo de forma vistosa para colocar tres banderillas largas, siendo una de
ellas al violín. Cambió de cabalgadura y sobre “Valladolid” puso otro palo
largo con eficacia y buen planteamiento de la suerte, aparte de torear con un
sombrero de charro. Finalmente con “Quinto Pecado” clavó tres banderillas
cortas en un palmo de terreno y mató de estocada que no bastó para echar pie a
tierra y concluir su buena actuación al segundo golpe de descabello para ser
aplaudido.
A pie, el diestro francés Sebastián Castella en su primer
toro ejecutó lances a la verónica de mano baja y con clase, además de quitar de
la misma forma con mucha suavidad. Con la muleta empezó con ayudados por alto,
un ayudado por bajo, otro de trinchera y el desdén para seguir en la
construcción, a un toro nada fácil, de una faena de mucho valor y torerismo por
los dos perfiles. Sus derechazos fueron valientes y de mucho arrojo, con algún
susto, pero lo mejor de su trasteo ha sido por naturales de impecable trazo,
plenos de calidad y arte. Hizo el toreo en redondo y sin enmendar el terreno
para matar de estocada trasera y caída, además de descabello para ser
ovacionado en el tercio.
En su segundo, el buen “Arbolero”, se mostró voluntarioso en
el inicio capotero y de manera inusual realizó un quite por chicuelinas tras el
cambio de tercio. Su quehacer de muleta, Castella lo inició con pases vaciando
por alto y rematando con un cambio de mano por delante, continuando con lucidas
series derechistas cadenciosas hasta ligar con cambio de mano por la espalda
dos naturales brillantes, dando paso así a su personal toreo natural, lleno clase
y plasticidad. Vinieron más tandas por ambos pitones yendo la faena a más,
sobresaliendo su toreo en un palmo de terreno y con ligazón, además de
sobreponerse al soplar del viento. Puso en práctica su valiente toreo circular
para abrochar todo con ceñidas manoletinas. Se tiró a matar y dejó una estocada
entera y algo trasera para obtener dos apéndices y al noble burel dársele el
arrastre lento.
Al primer ejemplar que le tocó en suerte, el espada
queretano Octavio García “El Payo” le jugó bien los brazos en suaves lances a
la verónica. Con la sarga luego de comenzar con lances para medir la embestida
del “socio” dio una serie empeñosa por el lado derecho pero cuando se pasó el
engaño a la otra mano ligó señoriales series de naturales, recreándose en cada muletazo
y gustándose de verdad. Intentó de nuevo con la diestra y aunque logró hacer el
toreo bueno, decidió continuar por el pitón siniestro en más tandas de mucha
largueza y temple, haciendo todo con evidente empaque y mucha personalidad.
Terminó de pinchazo y estocada honda para hacerse ovacionar en el tercio.
En su segundo le puso buena disposición a su obrar con el
capote. Su labor de muleta la comenzó con pases de estudio pero a la vez
artísticos caminando de las tablas a los medios para seguir en un trasteo de
evidente empeño por los dos pitones, sobre todo por el derecho a un ejemplar
que no se prestaba para el lucimiento por completo. Lo intentó de verdad “El
Payo” pero sin el resultado que él hubiera deseado. Finiquitó de pinchazo y
espadazo entero para ser silenciada su actuación.
El matador peruano Andrés Roca Rey en el primer astado de su
lote, llamado “Caporal”, veroniqueó con empeño a pies juntos a pesar del
molesto viento, sobresaliendo su quite por chicuelinas y tafalleras. Con la
franela, a un astado falto de trasmisión y soso, ha estado más que
voluntarioso, evidenciando pundonor y ganas de agradar con las dos manos. Optó
por abreviar y matar de certera estocada para por ello obtener una merecida
oreja ante algunas absurdas protestas.
En el que fue su segundo comenzó su labor de capote con un
lance soltando una punta cerrado en tablas para luego ligar verónicas y
chicuelinas, además de que de manera desordenada el limeño quitó por gaoneras y
una caleserina tras haberse cambiado el tercio. Con la muleta, a un ejemplar de
poca fuerza no le tuvo mucho que hacer Roca Rey a pesar de su loable
disposición. Abrevió, pasó apuros para matar y tuvo silencio.
Y en el que regaló, primero en lo que va de la temporada, de
la misma dehesa titular de Los Encinos, nada hizo con el capote y su labor de
muleta la empezó con dos cambiados por la espalda pero el astado que le
embestía descompuesto y con aspereza, a lo que el torero le aplicó su poderío
muleteril con las dos manos, “robándole” prácticamente series importantes y
exponiendo de verdad, principalmente por el pitón derecho. Acabó de manera
desatinada con los estoques y fue despedido entre aplausos tras un aviso.
FICHA DEL FESTEJO
Siete toros de Los Encinos,
uno de ellos de regalo, bien presentados, siendo muy bueno el cuarto que
mereció el arrastre lento, destacando también el primero y el segundo. Y uno de
El Vergel para rejones, de buen
juego.
Jorge Hernández Gárate: Palmas.
Sebastián Castella: Al tercio y dos orejas, con salida en
hombros por la Puerta Grande de “El Encierro”.
Octavio García “El Payo”: Al tercio y silencio.
Andrés Roca Rey: Una oreja, silencio y palmas tras un aviso
en el de regalo.
INCIDENCIAS: Tanto Castella
como Roca Rey, en el cuarto y sexto
toros, respectivamente, realizaron quites una vez cambiado el tercio. Es decir,
que su labor final con el capote ya la hicieron en el segundo tercio.
Décimasegunda corrida de la Temporada Grande Internacional 2016-2017.
Monumental Plaza México. Entrada: Muy buena en tarde fresca y algo de viento.
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