Se trata de un interesante
estudio que aclara muchas dudas
ADIEL ARMANDO BOLIO
Especial para VUELTA
AL RUEDO
a) Alimentos
balanceados. En promedio los rejoneadores disponen de 16 caballos
distribuidos en todas las etapas de desarrollo, ello implica que se incurra en
un costo de mantenimiento para los 16 equinos, del orden de $98, 000 mensuales,
de los cuales el 80 por ciento se destina a la alimentación, por lo tanto el
costo de alimentación mensual por equino es de $4 ,900. Se estima que existen
29 rejoneadores en activo, por lo que hay 464 equinos al rejoneo, en su mayoría
de la raza lusitano. Dada la cifra de equinos, mensualmente los rejoneadores
invierten $2, 273, 600 por concepto de alimentos balanceados para sus equinos,
lo que significa un gasto anual de $27, 283, 200 en alimentos balanceados.
b) Fármacos.
Los rejoneadores gastan en fármacos para el cuidado de la salud de los equinos,
un promedio de $1, 225 anuales por cada caballo. Dado que existen 464 equinos
dedicados al rejoneo, la derrama por concepto de fármacos de parte de los
rejoneadores es de $568, 400 anuales.
c) Espadas.
Los rejoneadores, al igual que los toreros, utilizan espadas, las cuales tienen
un costo promedio de $20, 000. Los rejoneadores requieren en promedio de tres
espadas por año, por lo que erogan anualmente $1, 740, 000 en espadas.
d) Ganadería.
Para entrenar a sus caballos, los rejoneadores adquieren toros y vacas de
desecho a las ganaderías de toro bravo. En promedio, los rejoneadores adquieren
dos animales mensuales a un costo de $6, 000 cada uno. Por lo anterior, un solo
rejoneador gasta al año $144, 000 por este concepto, lo que significa una
derrama anual total de $4, 176, 000 en este rubro.
e) Indumentaria.
Los rejoneadores requieren de un traje por año, el cual tiene un precio
promedio de $40, 000. En total los rejoneadores invierten $1, 160, 000 anual en
indumentaria, de la cual la mitad es de importación.
f) Servicio
veterinario. Dado que los equinos forman parte del equipo de trabajo de
los rejoneadores, se requiere de servicios veterinarios para el mantenimiento
de la salud de estos animales. Este servicio se divide en veterinario para
espectáculo y veterinario en rancho. Con respecto al primero, el costo promedio
estimado del servicio es de $3, 000 por espectáculo; por lo que considerando
que los rejoneadores se presentan 40 veces al año, el gasto por este tipo de
servicio veterinario asciende a $3, 480, 000.
g) Talabartería.
Este rubro es importante para los rejoneadores, ya que requieren de monturas,
mismas que tienen un costo promedio de $100, 000. En promedio, cada rejoneador
adquiere una montura anualmente, lo que significa una derrama por ese concepto
del orden de $2, 900, 000 anuales. Además, los rejoneadores requieren de una
espuerta, que es el baúl donde guardan las muletas y capotes. En promedio cada
rejoneador adquiere una espuerta cada dos años a un precio de $8, 000, por lo
que en total los 29 rejoneadores invierten $116, 000 al año. También los
rejoneadores utilizan un fundón para guardar los estoques, el cual tiene un
precio promedio de $4, 000. Dicho fundón se adquiere cada dos años, por lo que
en total la erogación anual es de $58, 000. Dado lo anterior, por concepto de
talabartería, los rejoneadores invierten $3, 074, 000 al año.
h) Empleo.
El equipo de trabajo de los rejoneadores consta de mozo de espadas, de
veterinarios en racho, y requieren de un apoderado que los represente. En el
caso de los mozos de espadas, el pago global de parte de los rejoneadores
asciende a $2, 304, 000 anuales, y en el caso de los apoderados, estos reciben
un estimado de $5, 400, 000 por concepto de comisiones. Por su parte, el
servicio veterinario en rancho se cotiza en $10, 000 mensuales, por lo que por
este concepto los rejoneadores pagan en salarios $3, 480, 000 al año. Dado lo
anterior, los rejoneadores pagan al año un total de $11, 184, 000 por pagos a
personal.
3.1.7 Novilleros.
Si bien los novilleros se encuentran en un proceso formativo, estos demandan
bienes y servicios para llevar a cabo sus actuaciones, por lo que la demanda de
los novilleros genera también su propia derrama económica en la industria de la
tauromaquia. Entre los bienes y servicios que demandan los novilleros, se encuentran
capotes, espadas, muletas, indumentaria, transporte, servicios de hospedaje y
alimentación, y productos de talabartería, así como el empleo de personas;
mismos que se presentan a continuación.
a) Capotes.
Cada novillero adquiere, en promedio, 18. 33 capotes al año a un precio de $2,
700 cada uno. Dado que existen 190 novilleros, ello significa que, por capotes,
la derrama por estos actuantes es de $7, 918, 560 anuales.
b) Espadas. En promedio cada novillero adquiere 2. 3 espadas
al año, mismas que tienen un costo promedio de $11, 766, por lo que el gasto
total en espadas de parte de los novilleros alcanza $4, 329, 888 anuales.
c) Muletas.
Entre los insumos que requieren los matadores para su proceso formativo se
encuentran las muletas, las cuales tienen un precio promedio en el mercado de
$1, 091. Se estima que un novillero requiere de 31. 6 muletas en promedio al
año, lo que significa una erogación de $5, 516, 096 anuales por este concepto.
d) Indumentaria.
La indumentaria de los novilleros, a diferencia de la de los matadores, es más
modesta, por lo que se cotiza en promedio en $34, 000. Dado que cada novillero
requiere de tres trajes por año, el gasto total en este rubro es de $16, 320,
000 anuales.
e) Seguros.
No todos los novilleros reciben una compensación por su actuación, pues se
encuentran en su etapa de formación, siendo sólo el 10 por ciento de estos
actuantes quienes reciben un pago por sus actuaciones. Por lo tanto, en
términos de aseguramiento, es ese mismo porcentaje de novilleros el que se encuentra
en condiciones de adquirir un seguro de gastos médicos y vida. El costo de
dicho seguro es de $40, 000 pesos, lo que significa que al año los novilleros
erogan $640, 000 por este concepto.
f) Talabartería.
Los artículos de talabartería que requieren los novilleros consisten en la
espuerta y el fundón. La espuerta o baúl, en el cual guardan las muletas y
capotes, tiene un costo aproximado de $8, 000 en promedio. Cada novillero
adquiere un baúl cada dos años, lo que significa que se erogan aproximadamente
$640, 000 cada año. En cuanto al fundón, al igual que para los matadores, éste
se utiliza para guardar los estoques y cuesta en promedio $4, 000. Por lo
general, un novillero adquiere uno cada dos años, por lo que, dado el número de
novilleros existentes en México, el total de gasto anual por concepto de
fundones es de $320, 000. Lo anterior implica que los novilleros gastan al año
aproximadamente $960, 000 en talabartería.
g) Servicio de
hospedaje. Para su participación en los festejos taurinos, los novilleros
requieren de dos noches de hospedaje y dos habitaciones. Dado que en cada
novillada participan tres novilleros, se estima que por concepto de hospedaje
los novilleros desembolsan un total anual de $2, 484, 000.
h) Servicio de
restaurante. Por lo que a servicios de restaurante se refiere, el
consumo diario por novillero para éste y sus acompañantes es en promedio de
$750 diarios, por lo que se estima un consumo anual de $1, 242, 000 por este
concepto.
i) Empleo.
Si bien los novilleros son actuantes que se encuentran en proceso de formación,
estos generan empleo, ya que requieren de los servicios profesionales de
personas para llevar a cabo sus actuaciones. Por espectáculo se requieren tres
mozos de espadas (uno por actuante), seis picadores (dos por cada novillero) y
seis banderilleros (dos por novillero). La remuneración para los mozos de
espadas es, en promedio, de $1, 900 por evento, para los picadores de $1, 500 y
para los banderilleros de $1, 500.
Considerando que en 2015 se llevaron a cabo 138 novilladas y
90 festivales, los pagos anuales totales realizados por los novilleros se
distribuyen de la siguiente manera: Mozos de espadas $1, 299, 600. Picadores
$1, 098, 000. Banderilleros $1, 098, 000. Además, los novilleros requieren de
los servicios de un apoderado, cuyos honorarios equivalen al 15 por ciento del
pago que recibe el novillero al que representa. Por lo tanto, considerando que
la compensación promedio para un novillero por actuación es de $20, 000, y que
el 10 por ciento de los novilleros cobra por actuar, el pago total a los
apoderados representa $205, 200 al año, dado que el pago total a novilleros es
de $1, 368, 000 anual y se tuvieron 684 actuaciones de novilleros.
3.1.8 Subalternos.
Otro de los papeles esenciales en el desarrollo de un espectáculo taurino es el
de los subalternos, quienes requieren de indumentaria y capotes, lo cual forma
parte de la derrama económica que generan.
a) Indumentaria. El promedio anual de gasto por concepto de
indumentaria, lo que incluye traje, montera, medias, casaca, etc., es de $65,
250. Ello significa que en total los 150 subalternos tienen un gasto anual de
$9, 787, 500.
b) Capotes.
De los 150 subalternos, 65 son banderilleros y requieren el uso de un capote.
Anualmente cada uno requiere de dos capotes, mismos que tienen un precio
unitario de $5, 000 en promedio. Por lo tanto, el gasto en capotes por parte de
estos banderilleros es de $650, 000 anuales.
c) Cuotas.
Los subalternos pagan una cuota anual de $4, 000 a la Unión Mexicana de
Picadores y Banderilleros, que en total asciende a $600, 000 anualmente.
3.1.9 Cuadras de
picar y arrastre. Para el desarrollo de sus funciones en el espectáculo
taurino, las cuadras de picar y de arrastre demandan alimentos, fármacos y
herraduras para los equinos, entre otros bienes y servicios. En cuanto a los
requerimientos de alimentos para los caballos de las cuadras de picar, se
estima un valor de consumo de $420, 480 anual en alimentos balanceados, y de
$210, 240 para las cuadras de arrastre. Por su parte, el consumo anual en
forrajes para las cuadras de picar tiene un valor aproximado de $1, 051, 200 y
de $525, 600 para las cuadras de arrastre. Además de la alimentación, las
cuadras de picar y de arrastre invierten en el mantenimiento de la salud de los
caballos, el cual tiene en promedio un costo mensual de $1, 000 por animal.
Dado el número de équidos con los que se cuenta, al año se erogan $432, 000 por
parte de las cuadras de picar y $216, 000 por parte de las cuadras de arrastre,
haciendo un total de $648, 000 al año por concepto de fármacos. Por lo que al
empleo de herraduras se refiere, cada 90 días se realiza el servicio de
mantenimiento de herraduras en los caballos. Cada servicio tiene un costo
promedio de $500, por lo que la inversión por concepto de herraduras es de $72,
000 y $36, 000 anuales para las cuadras de picar y de arrastre,
respectivamente.
3.1.10 Hoteles
para actuantes. Tanto los matadores como los rejoneadores y novilleros,
requieren de servicios de hospedaje cuando se movilizan para prestar sus
servicios en los diferentes centros de espectáculo del país. En cada
espectáculo participan en promedio tres actuantes, quienes requieren al menos
de dos noches de hotel y de dos habitaciones. La noche de hospedaje se cotiza
en $1, 500 en promedio, por lo que el gasto en hotel realizado por los
matadores es de $6, 282, 000 al año; el correspondiente a los rejoneadores
asciende a $306, 000; y el de los novilleros es del orden de $2, 484, 000. En
total, por concepto de hospedaje de los actuantes se tiene una derrama anual de
$9, 072,000.
3.1.11
Restaurantes para actuantes. Al igual que el servicio de hospedaje, los
actuantes también demandan servicio de restaurante durante sus viajes para
participar en los festejos y festivales taurinos. Al respecto los actuantes y
sus acompañantes erogan por concepto de restaurantes un promedio de $750 por
día de estancia. Considerando que se requieren de al menos dos días de
estancia, el consumo total anual estimado en restaurantes es de $4, 536, 000.
3.1.12 Carnicerías.
Si bien el uso final del bovino bravo es el espectáculo taurino en el que
participa, al finalizar la faena la carne del animal es comercializada para su
consumo humano a mercados, restaurantes y puestos de comida. La carne es
valorada por su alta calidad, dada la alimentación recibida por el bovino
durante su crecimiento y desarrollo, y porque vive en un hábitat natural,
condiciones que permiten desarrollar su corpulencia y que la carne sea baja en
grasa. Tomando como base los datos registrados en 2015, en el sentido de que se
tuvieron 504 festejos taurinos en los cuales se lidiaron 773 novillos con un
peso promedio de 400 kilos, y 1, 952 toros con peso promedio de 500 kilos,
además de 405 novillos lidiados en festivales; se comercializaron 1, 444, 000
kilos de carne. El precio promedio de este producto es de $23 por kilos, por lo
que el valor total de la carne de toros y novillos bravos como subproducto del
espectáculo taurino se estima en $33, 212, 000 anuales. (Continuará)
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