El cirujano Máximo García Padrós
habla de la evolución del novillero García Navarrete, que sufrió dos cornadas
en Las Ventas.
ABC.ES
Un milagro. Así lo describe el cirujano jefe de Las Ventas,
Máximo García-Padrós. Increíble que las dos graves cornadas que sufrió Daniel
García Navarrete este domingo en la Monumental no fueran aún de mayor calibre,
especialmente la del cuello, después de que el novillo de La Quinta se ensañara
con tremendos derrotes en el debutante en una zona delicadísima. «Que entre un
pitón por el cuello y no rompa nada es prácticamente un milagro», dice García-
Padrós.
Daniel García Navarrete fue operado en la enfermería de la
plaza de «dos cornadas, una en la región cervical derecha, con dos
trayectorias, una hacia arriba de 15 centímetros que bordea la glándula
parótida, alcanzando ángulo de la mandíbula, y otra de 10 centímetros que
alcanza suelo de la boca y base de la lengua. Otra cornada en el tercio distal
del muslo derecho con trayectoria hacia atrás, que rodea la cara interna del
fémur, alcanzando región poplítea y que contusiona el paquete vásculo nervioso
y el nervio ciático, produciendo destrozos en el músculo vasto interno. Sufre
también una fractura en el tercio medio de la clavícula derecha. Erosiones y
contusiones múltiples. Pronóstico grave. Es trasladado al Hospital San Francisco
de Asís».
El ángel de los toreros explicó al departamento de
comunicación de Las Ventas que «hay que esperar una serie de horas y comprobar
los drenaje. Como contusionó la carótida, puede hacer un fístula y por ello el
torero debe estar vigilado». Pese a la gravedad, el cirujano venteño comenta
que la evolución es positiva: «Su estado es normal. Ha tenido febrícula, cosa
lógica por las heridas tan extensas. Ahora estamos pendientes de que le vean
los traumátologos para ver si hay que operar». Recordemos que además de las dos
cornadas, el novillero sufrió fractura de clavícula.
Respecto a la herida en el muslo derecho, García-Padrós
comentó: «Secciona el vasto intero, un músculo importante para andar; y deja la
arteria y la vena poplíteas disecadas. Y el ciático también. Pero es muy
importantes que el pitón no los haya roto».
En cuanto al tiempo de convalecencia, estima que el joven
espada estará al menos un mes y medio inactivo y tendrá que permanecer en el
hospital al menos hasta el viernes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario