BORJA ILIÁN
El rejoneador español Andy Cartagena
cortó este lunes tres orejas y salió por la puerta grande de la Plaza
Monumental de Tecolotlán, occidental estado mexicano de Jalisco, en un festejo
en el cual los mexicanos Ernesto Javier Calita y Gerardo Adame cortaron un
apéndice cada uno.
La corrida previa al carnaval
convocó más de tres cuartos de entrada. Se lidiaron reses de Pablo Moreno que
resultaron de desigual juego y presentación, sobresaliendo el cuarto, que le
tocó en suerte a Cartagena y al que cortó dos orejas.
El pueblo, situado en la serranía de
Jalisco, oeste de México, celebró engalanado para la ocasión con caballos de
monturas relucientes, jinetes impecablemente vestidos y gallos en el palenque
frente a la plaza, en sus jaulas, pesados y agrupados para la pelea.
A las 17.00 horas (22.00 GMT)
arrancó el festejo bajo un sol abrasador que no evitó los primeros vítores para
Cartagena por las demostraciones de doma con la que toda la tarde conquistó al
público.
El toro de Pablo Moreno que abrió
plaza, de muy seria presentación, resultó encastado y de gran juego para el
rejoneo pues remataba cada embestida. Cartagena lo fue probando, cuando creyó
encontrar el punto de lidia para llevarlo ceñido a la grupa, el toro se rajó
por el intenso calor. El español entonces tuvo que arriesgar para provocar las
embestidas del animal. Con el toro parado, Cartagena se adornó en la doma para
mantener el interés del público. Un pinchazo, una estocada y un certero
descabello le valieron su primera oreja.
Cumplidor fue el toro que rejoneó en
segundo lugar el español, una gran res brava del hierro de Pablo Moreno, que
brilló por su fijeza. Cartagena le administró un gran rejón de castigo que
enceló al animal durante el resto de la lidia. Especialmente vibrantes fueron
los quiebros con giros completos mientras el toro perseguía ceñido el caballo a
pintas de Andy Cartagena. Dos vueltas al ruedo completas con el animal soplando
con su aliento la grupa del equino. También destacaron unas banderillas
recibiendo, envolviendo al burel para reunir la banderilla y después salir sin
perder la cara del toro.
Tras dejar a su sobresaliente
lucirse al capote por chicuelinas, Cartagena dejó una estocada profunda pero
trasera que, de nuevo, necesitó de descabello. Eficaz con el hierro en cruz, el
caballero logró dos orejas más y pudo abrir la puerta de la Plaza Monumental.
Calita se equivocó mandando dar una
leve puya a su manso primero, que quedó sin fijeza y crudo. El toro superó a
Calita y a su cuadrilla que acabaron entre los pitos del público.
Con el quinto de la tarde el torero
de Naucalpan sí aprovechó la poca embestida de otro manso, que tenía menos
fuerza que su anterior toro. No tuvo suerte el matador con sus rivales, pues
fueron los peores de la tarde. Con una lidia muy inteligente y a media altura,
el de Pablo Moreno se caía al bajarle la mano, logró ligar Calita en tandas de
tres pases, algunas de mucho mérito por su profundidad y fijeza. Mató de una
buena estocada y logró un apéndice.
Adame anduvo desasosegado con su
buen primer toro, al que mató de una estocada canónica en todo lo alto. Cortó
un apéndice.
El toro que cerró plaza era un manso
muy peligroso que le arrolló cuando lo toreaba con el capote por
"zapopinas" y lo volvió a prender sin llegar a cornear cuando toreaba
de muleta. Se retiró Adame entre aplausos mientras Cartagena era llevado a
hombros a las calles para la celebración de Tecolotlán. / EFE
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