José Mata
@PERIODISTAURINO
Coincidimos en la primera corrida de la temporada española,
allá en la población de Ajalvir, sí dentro de la Comunidad de Madrid, con mi
dilecto amigo, el abogado Williams Cárdenas, flamante presidente de la
Asociación Internacional Taurina, y
justo ahí le convidé a reunirnos para hablar de toros, y sobre estos desatinos
que ocurren por parte de supuestos animalistas.
Hasta Aljalvir, había llegado el gran Williams recordando
viejas glorias como artista del toreo, las que le han mantenido firme y dentro
de este mágico arte, ahora como luchador incansable que le obligar a no ceder
hasta conseguir una meta que se propuso desde 2002… que la UNESCO otorgue al
arte del toreo, el Patrimonio Cultural Inmaterial, lo que con todo fundamento
debe ser concedido.
Días después nos reunimos, y en agradabilísima plática -y
como periodista que es uno-, se transformó aquello en entrevista, no pudimos
dejar de comentar que habíamos leído sobre algunos cuestionamientos contra la
Tauromaquia por ser Patrimonio Cultural Inmaterial del pueblo español, a lo que
de inmediato el sagaz abogado, manifestó:
“El que la Tauromaquia en España sea hoy Patrimonio Cultural
Inmaterial (PCI) del pueblo español, es el resultado del trabajo de mucha gente
durante mucho tiempo, todos ellos buenos aficionados que han actuado en defensa
de la Fiesta de los Toros, que debe ser apoyado o cuando menos respetado por
todos, especialmente por quienes han asistido como espectadores o simples
observadores de esta gesta!
“No obstante, recientemente hemos visto como nuevos
paladines, obsesionados por la búsqueda de titulares en los medios
tradicionales o en las redes sociales, lanzan argumentos, tan equívocos como
extemporáneos, contrarios a lo hasta ahora alcanzado, que hacen un flaco
servicio a nuestra lucha colectiva, pues sólo crean confusión a la par de
otorgar argumentos al anti taurinismo.
- Evidentemente habrá
personas que tendrá intereses fuera del mismo marco legal, y por supuesto
taurino, que inventen este tipo de intrigas.
“Llama poderosamente la atención que parte de los ataques
contra el reconocimiento, tanto por el Parlamento como por órganos
jurisdiccionales, de la Tauromaquia como Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI)
de los españoles, provenga de algunas personas que se dicen aficionados y con
acreditados conocimientos jurídicos, a quienes les puede el afán de notoriedad,
sin importarles el perjuicio que causan a la Tauromaquia en una situación tan
difícil.
“Suelen narrar con entusiasmo los logros que en el mismo
sentido se han obtenido en otros lugares, pero se ensañan contra lo conseguido
en España en esta materia, con enconados ataques contenidos en entrevistas y
artículos de opinión".
- ¿Qué es lo que ha
logrado la Tauromaquia española para su protección?
“Resulta que lo alcanzado en este país es lo más importante
que ha ocurrido a favor de la Tauromaquia no sólo en España si no en todo el
mundo taurino: Nada más ni nada menos que tres leyes nacionales que reconocen y
protegen la Tauromaquia como PCI del pueblo español, avaladas por el criterio
jurisprudencial de los más altos órganos judiciales, el Tribunal Constitucional
y el Tribunal Supremo!".
“Que ahora corresponde a todos actuar, pero sobre todo a los
estamentos profesionales, por supuesto que sí! Esta guerra a favor de la Fiesta
de los Toros lleva años, nosotros la iniciamos a principio de los años 2000,
sólo que antes no teníamos armas legales con que defendernos y ahora contamos
con un Sistema de Protección Jurídica (SPJ) que nos ampara. Para ganarla hace
falta mucho temple, y estamos seguros que en nuestro mundo saben a lo que nos
referimos.
“¿Queda mucho por hacer? ¡Claro que si!, pero nada justifica
el ataque fratricida, menos aún por parte de quienes, instalados por ahora en
‘la contra’, están llamados a cumplir otros roles en esta lucha, en la que
podrán exhibir sus extraordinarios conocimientos y capacidades intelectuales al
servicio de la causa común, en lugar de persistir en colocar palos en las
ruedas al trabajo de muchos".
- ¿La AIT tiene algún
mensaje para estos ‘versos sueltos’?
“La Asociación Internacional de Tauromaquia (AIT), invita de
nuevo, a todo el sector, incluidos quienes atacan el resultado del trabajo
silencioso de miles, a leer y releer el texto de las leyes, así como las
sentencias, la del Tribunal Constitucional que anuló la prohibición de los
Toros del Parlamento Catalán y la del Tribunal Supremo que la avala.
“Nosotros seguimos adelante sin perder nuestro objetivo
principal, que no es otro que el reconocimiento de la Tauromaquia como PCI y su
inclusión en la Lista Representativa de la UNESCO”.
Hasta aquí queda lo expuesto por el gran Williams Cárdenas,
ex torero, gran abogado y tremendo luchador en favor del arte del toreo.
No obstante, querido lector, por supuesto que teniendo a un
hombre como Williams que cuenta con pleno conocimiento de dos ramas, el toreo y
lo jurídico, le pedimos, dado que es colaborador de este portal, que nos
hiciera favor de escribir un artículo debidamente fundamentado, con relación
a...
...a, que los supuestos
‘animalistas’, mal llamados ‘antitaurinos’, son auténticos torturadores de los
animales irracionales.
Baso este comentario en tres situaciones fundamentales.
1. Obligar a un ser irracional a humanizarse, cosa por demás
imposible, porque no son los muñequitos de Walt Disney.
2. El secuestro permanente del que son objeto millones de
mascotas en todo el mundo, a los que se les ha sacado de su hábitat natural, se
les ha quitado su libertad, para estar confinados en la casa hechas, contruidas
exprofeso para seres humanos, en donde mal viven de acuerdo a las órdenes
imperiales de sus ‘amos’, llegando hacer hasta sus necesidades primarias en el
momento que lo desee su supuesto ‘protector’.
3. Estos supuestos 'animalistas', para esconder sus
verdaderas intenciones, exigen un derecho animal, pero salvo mejor opinión, a
todo derecho corresponde necesariaamente una obligación.
- ¿Cuales serían las
obligaciones animales?
Hasta donde este criticón conoce, no existe ningún documento
oficial debidamente avalado por un notario o instrumento legal, que certifique
que todas las mal llamadas mascotas están felices y aceptaron gustosas, así
como voluntariamente vivir confinadas en esa especie de secuestro, en donde
todo lo que ocurra a su alrededor lo decide su 'amo', porque no tienen
capacidad de decisión al ser irracionales.
Espere programas, querido lector amigo, que Williams
Cárdenas, nos dará puntual fundamento jurídico.
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