jueves, 14 de junio de 2018

Addiel Bolio y su imborrable huella en el periodismo

A 10 años de su partida. *** Ejerció la profesión de forma incansable hasta el 3 de mayo de 2008 en la Feria de su amado Aguascalientes.

ADIEL ARMANDO BOLIO
Especial para VUELTA AL RUEDO

Aun duele y dolerá siempre recordar que un 14 de junio de 2008, en su amadísimo Aguascalientes, alrededor de las 06:00 horas, en el Hospital General de Zona 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social, a los 73 años de vida cumplidos y 51 de ser un ejemplar periodista, el afamado Cronista Taurino Internacional (CTI), Addiel Bolio, haya perdido la batalla contra una serie de insuficiencias físicas.

Sin embargo, a una década de su partida, quiero rememorar su inmarcesible imagen como ser humano, padre, abuelo, bisabuelo, amigo y, sobre todo, como un periodista que de manera constante luchó por alcanzar un prestigio importante y aun así seguir salvando escoyos para mantener el sitio hasta el último suspiro.

Si viviera, a quien su familia materna yucateca le llamara cariñosamente como “Popón”, en este mes de junio estaría, primero, celebrado que un 2 de junio de 1957 se retiró de los ruedos y que, semanas después, en el mismo mes y año iniciara su brillante carrera en el ejercicio del periodismo, es decir, que estaría cumpliendo 61 años de su adiós torero y la misma cantidad de años como profesional de la comunicación televisiva, radiofónica y escrita, todo ello iniciado en Ciudad Juárez, Chihuahua.

Adiel Alfonso de Jesús Bolio y Solís, su verdadero nombre, comenzó su trayectoria periodística, gracias al impulso que le dio el inolvidable subalterno, empresario y apoderado don Francisco Gómez “El Zángano”, trasmitiendo por radio los festejos taurinos en el coso Monumental “Alberto Balderas”, al tiempo de hacer una revista taurina, tanto en inglés como en español de nombre “Eco Taurino” en suelo juarense y estadounidense, concretamente en El Paso, Texas, así como fundar peñas y grupos taurinos en la misma ciudad fronteriza, donde igualmente conducía por televisión el noticiero Excélsior a nivel local pues en la capital del país lo hacía don Ignacio Martínez Carpinteiro, además de ser corresponsal para el diario Ovaciones de circulación nacional.

Fue entonces que debido a un consejo del matador de toros Luis Procuna, don Addiel viajó en 1964 con esposa e hijos al Distrito Federal para iniciar una nueva lucha, partiendo de cero, pues tuvo que poderles a figuras como Paco Malgesto y Pepe Alameda para hacerse de un nombre. Para ello tuvo que pasar muchas penurias, trabajar aquí y allá, pero fuera del toro.

Y cuando logró colarse al ambiente periodístico al ser fundador en 1968 de Canal 8, de Televisión Independiente de México (TIM), hubo de cubrir todas las fuentes de información para al final de cuentas meterse a lo suyo, a los deportes y los toros en noticieros especializados, hasta que vino la fusión de TIM con Telesistema Mexicano, dando origen a Televisa en 1973 y entonces hacerse jefe de información deportiva, ligando de esta manera su entrada fuerte en el periodismo taurino, donde dejó un legado de suma relevancia hasta ser reconocido a nivel continental y, después, en el ámbito internacional.

Vaya pues este recuerdo a don Addiel Bolio, mi adorado padre, en su X aniversario luctuoso y reviviendo su frase: “El Toreo es el Grito de Angustia, Ahogado por el Suspiro del Arte”.

51 años llegó a cumplir el reconocido CTI Addiel Bolio en el ejercicio del periodismo.

1964 fue el año en que Addiel Bolio decidió fortalecer su ambición periodística en el Distrito Federal.

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