El torero extremeño sufre una
cornada de 25 centímetros en muslo derecho por el quinto de después de dejar
los mejores pasajes ante el segundo de la tarde.
GONZALO I. BIENVENIDA
Diario ELMUNDO de Madrid
Fue una verdadera lástima que Luis Manuel Terrón, el chaval
que mejor impresión estaba causando, cayese herido de gravedad por el quinto de
Fernando Peña, que se quedó sin picar. Hasta tres derrotes violentos sufrieron
las extremidades del debutante Terrón. Su temple había sido el remedio idóneo
para combatir las asperezas del segundo, que quiso humillar pero le faltó el
pasito de más tan buscado por los ganaderos.
A Luis Manuel Terrón le tocó tragar con las complicaciones,
pero a base de firmeza consiguió estar muy por encima del fuerte enemigo. La
merecida vuelta al ruedo se quedó en conato, una ovación saludada, por culpa de
algunos incomprensibles reproches.
Un buen novillo de Fernando Peña desperezó el veranazo
padecido por los presentes una nueva tarde de julio. El brindis al cielo por
Víctor Barrio de Mario Alcalde motivó la más sincera ovación que escucharía a
lo largo de la tarde. Los mejores momentos del madrileño llegaron ante el
ensabanado cuarto al que cuando se le hicieron las cosas bien respondió con
transmisión. Una ovación abrochó la séptima oportunidad para Mario Alcalde como
novillero en Madrid.
El entipado tercero tuvo desde salida buen son. Alejandro
Conquero pudo mostrar su personalidad en las verónicas de recibo que remató con
dos medias con gusto. Ese gusto se diluyó en una faena demasiado ligera para la
buena condición del novillo.
Ante el desclasado sexto porfió sin eco el onubense. Una
tarde más el calor recordó la importancia de un horario atractivo para los
festejos de promoción.
Parte facultativo: Luis Manuel Terrón fue operado de una
cornada de «25 centímetros en el muslo derecho que provoca desgarros en
músculos isquiotibiales y contusiona ciático. Pronóstico grave».
FERNANDO PEÑA / Mario Alcalde, Luis Manuel Terrón y Conquero
Monumental de las Ventas. Domingo, 17 de julio de 2016. Unas 5.000
personas.
Novillos de Fernando Peña,
bien presentados, con buena intención el 1º; con poco recorrido el grandón 2º;
de buena condición el entipado 3º; con sus teclas el interesante 4º; el 5º
geniudo; y un 6º desclasado.
Mario Alcalde, de blanco y oro. Dos pinchazos y estocada
baja (silencio). En el cuarto, estocada caída (ovación). En el que estoqueó por
Terrón, cuatro pinchazos y media estocada (silencio).
Luis Manuel Terrón, de corinto y oro. Estocada trasera
(saludos).
Alejandro Conquero, de celeste y oro. Estocada baja casi
entera (silencio). En el sexto, estocada defectuosa (silencio).
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