El mexicano Juan Pablo Sánchez protagonizó en la
Plaza México dos faenas de gran pureza, en las que consiguió llevar en todo
momento al toro prendido en el engaño, con un trazo limpio y sin que los
astados tocaran la tela. No tuvo, sin embargo, fortuna con el acero, pinchó a
ambos y todo quedó en ovación y una salida al tercio.
Uno de sus alternantes, su compatriota Arturo
Saldívar, tuvo una magnífica actuación, mientras que el español Ginés Marín
estuvo por arriba de sus toros.
Se lidiaron cinco toros de Fernando de la Mora,
definidos pero faltos de raza y fuerza, el sexto protestado por chico,
sustituido por uno de Montecristo que fue muy malo y otro de Xajay incluido en
el sorteo, también con problemas.
Sánchez, con un temple y una limpieza en su trazo
fuera de serie, cuajó dos faenas sin que sus enemigos, primero y cuarto, le
tocaran el engaño. La pena fue que pinchó a los dos, pero pudo haber cortado
tres orejas y ponerse como candidato a triunfador de la temporada. Ovación y
una salida al tercio.
Saldivar, con el segundo, que fue el de menos
trapío, mató de pinchazo y estocada, por lo que fue ovacionado y con el quinto,
un toro que dejó sin picar y con problemas, concluyó de estocada y obtuvo
ovación.
Marín, con el tercero fue a más y concluyó con
pinchazo y estocada con salida al tercio.
En el sustituto del sexto sufrió una fea cogida,
aunque sin consecuencias. Y también cogió a su apoderado Jorge Cutiño que sufre
una herida en un glúteo. / EFE
Jorge Cutiño, cornada de dos trayectorias
tras hacer el quite a Ginés Marín
El
sobrero de Montecristo le prendió en la misma tronera del burladero, lanzándolo
de nuevo al ruedo provocándole una herida en el glúteo.
Jorge Cutiño, hijo de José Cutiño, apoderado de
Ginés Marín, resultó herido por el sexto toro del festejo celebrado este
domingo en la Monumental Plaza México. El animal, un duro y difícil sobrero
cinqueño del hierro de Montecristo, prendió de espectacular manera a Ginés
Marín al término de su actuación.
Cutiño, que presenciaba de paisano el festejo
desde el callejón, saltó al ruedo para hacer el quite y, cuando trataba de
refugiarse en el burladero tras haber pasado los instantes de peligro vividos
por su poderdante, el toro le alcanzó en la misma tronera del burladero,
sacándolo limpiamente del engañador y lanzándolo por los aires de nuevo al
ruedo. Cutiño se levantó por su propio pie pero pasó a la enfermería para ser
atendido por el doctor Vázquez Bayod y su equipo.
El parte remitido por la enfermería es el
siguiente: “Cornada grave sobre costado derecho de dos trayectorias, una hacia
arriba y atrás de 15 cm. y otra hacia abajo de 10 cm. que lesionan piel y
tejido celular subcutáneo, aponeurosis y músculos de la región. Fue operado en
la enfermería de la plaza en donde se efectuó exhaustivo lavado quirúrgico,
amplia debridación y reparación de piel y tejidos lesionados. No ameritó
internamiento hospitalario y será valorado el día de mañana para revisión y
retiro de drenajes para que de ser posible pueda viajar mañana por la noche a
España”. / Redacción APLAUSOS
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