martes, 22 de noviembre de 2016

Victorino Martín, Premio Nacional de Tauromaquia 2016

En 2013 se le concedió la Medalla de Oro de las Bellas Artes

El Premio Nacional de Tauromaquia 2016  ha sido concedido al ganadero Victorino Martín Andrés. En su decisión, el Jurado ha valorado “la excepcional temporada desarrollada” en el año 2016, consiguiendo tres indultos, “la incomparable trayectoria de dicha ganadería, cuyo nombre ha quedado asociado a valores como la emoción, la bravura o la protección del valiosísimo patrimonio ecológico que encierra la Tauromaquia”.

“La concesión del Premio a Victorino Martín Andrés, ganadero con más de medio siglo de ejercicio a sus espaldas, representa en definitiva un premio al conjunto de ganaderos de reses bravas de España”, según afirma la nota e prensa distribuida por el ministerio de Educación, Cultura y Deportes.

Con este Premio Victorino Martín ya posee las dos grandes distinciones oficiales en el campo de la Tauromaquia. Si ahora  ha sido el Nacional de Tauromaquia, en 2013 fue la medalla de oro de las Bellas Artes. Se da la circunstancia que el ganadero de Galapagar es la única personalidad taurina que ha obtenido ambos galardones.

El Premio Nacional de Tauromaquia está destinado a reconocer la labor meritoria de una persona, entidad o institución durante la temporada española de 2016 en el ejercicio de las diferentes actividades y manifestaciones de la Tauromaquia. En casos excepcionales, debidamente motivados, también podrá otorgarse como reconocimiento a una trayectoria profesional. Está dotado con 30.000 euros.

En las tres ediciones anteriores este Premio había sido concedido al matador de toros Paco Ojeda; a Francisco Cano “Canito”, un artistas de la imagen; y a la Escuela Taurina de Madrid.

Victorino Martín Andrés

Nacido en Galapagar (Madrid) el seis de marzo de 1929. Estudia en el colegio de los Hermanos Maristas de la calle Fuencarral de Madrid y posteriormente en el colegio Alfonso XIII de los Agustinos en El Escorial, abandonando los estudios en 1942 para dedicarse de lleno a ayudar en los negocios familiares.

Algunas de sus fechas destacadas como ganadero tienen lugar en 1961, cuando lidia su primer festejo como ganadero en Zaragoza. El 29 de junio de 1967 se lidia la primera corrida a nombre de Victorino Martín en Castro Urdiales (Cantabria). El 18 de agosto de 1969 debuta su ganadería en la Plaza de las Ventas. Y, el 11 de mayo de 1975, el toro Jaquetón se convierte en el primer toro de la ganadería galardonado como el más bravo de la Feria de San Isidro.

A lo largo de los años ha ido acumulando importantes éxitos, como por ejemplo salir a hombros por la Puerta Grande de Las Ventas junto a los diestros actuantes en la conocida como “corrida del siglo”, el 1 de junio de 1982.

En sus casi 50 años de existencia, la ganadería de D. Victorino Martín Andrés ha obtenido 12 indultos, destacando el del toro “Belador” el 19 de julio de 1982, único indulto hasta hoy en la historia de Las Ventas.

Jurado

El jurado ha estado presidido José Canal, subsecretario de Educación, Cultura y Deporte, y han actuado como vocales Javier López-Galiacho, en representación del mundo de las artes y la cultura; Fernando Galindo, secretario general de la Unión de Picadores y Banderilleros Españoles; Beatriz Badorrey, representante del mundo académico; Ignacio Lloret, representante con experiencia acreditada en la explotación pública o privada de plaza de toros de primera categoría; María del Mar Mayoral, representante del mundo ganadero taurino de acreditada experiencia; Antonio Lorca, representante del periodismo o la crítica taurina de acreditada experiencia; Williams Cárdenas, en representación de asociaciones destinadas a la proyección y protección cultural exterior de la tauromaquia; Demetrio Pérez Carretero, director general de Interior, Emergencias y Protección Civil, de la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía; y José Luis Bote, representante de la entidad premiada en la anterior convocatoria, Escuela de Tauromaquia de Madrid.
Victorino Martín Andrés ha sido distinguido con el Premio Nacional de Tauromaquia 2016, el cuarto que se concede desde la institución de esta distinción. En el acta del Jurado se destaca la excepcional temporada que ha ofrecido en 2016 y la "incomparable trayectoria" de su ganadería. Se da la circunstancia de que el ganadero de Galapagar es la única personalidad de la Tauromaquia que ha sido distinguido con los dos máximos galardones que se conceden en España: la Medalla de Oro de las Bellas Artes, que recibió en 2013, y ahora el Premio Nacional.

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