El torero Enrique Ponce estará un mes apartado de los ruedos
a causa de una lesión en un abductor de la cadera que se produjo entrando a
matar al segundo toro de la corrida de ayer en Nimes (sur de Francia), una
dolencia muscular que requiere fisioterapia inmediata y varias semanas de
recuperación.
Ponce se ha puesto esta mañana en las manos del doctor Ángel
Villamor, quien, después de las pruebas realizadas, le ha diagnosticado
"rotura muscular con desgarro fibrilar de un abductor de la cadera, así
como la ocupación de hematoma en la zona muscular", recoge el parte médico
al que ha tenido acceso EFE.
Por este motivo se le ha practicado "infiltración de
plasma rico en factores de crecimiento extraídos de la propia sangre del
paciente, en la zona de rotura con control ecográfico", añade el parte.
El periodo de recuperación de este tipo de lesión oscila en
torno a un mes, y requiere "fisioterapia inmediata para drenar el hematoma
y dirigir y estimular la cicatrización correcta de las fibras musculares",
concluye el parte médico.
Debido a este contratiempo Ponce ha tenido que cancelar sus
actuaciones en Logroño, Vera (Almería), Úbeda (Jaén) y Zaragoza, quedando en el
aire su presencia en la feria de San Lucas de Jaén, tierra con la que posee un
vínculo especial, y en la que se especulaba que podría encerrarse este año con
seis toros en solitario. / EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario