domingo, 27 de agosto de 2017

FERIA DE SAN JULIÁN - TRIPLE PUERTA GRANDE: Pleno de Garrido al lado de las figuras

El pacense corta cuatro orejas y sale a hombros junto a El Juli y Perera que lidiaron una noble corrida de Zalduendo.
 
GONZALO I. BIENVENIDA
@GonIzdoBienve 
Cuenca

Rompió a llover en Cuenca a primera hora de la tarde para acompañar la pena de la despedida a Dámaso. Con más de tres cuartos de plaza la corrida se tuvo que retrasar unos minutos, los operarios de la plaza espacian el serrín que absorbía el agua del albero comandados por Maximino, el propio empresario, que también curraba para echar el festejo hacia delante.

El anovillado primero de Zalduendo no se empleó en los primeros tercios. El Juli le pudo por abajo desde el principio obligándole a embestir. Con la muleta el zalduendo se venía por dentro. El toque por fuera y el mando de los vuelos por abajo extrajo lo mejor del precioso torete que siempre buscó excusas.

Salió el padre de todos los zalduendos lidiados, un sobrero de José Vázquez con un astifino pitón derecho tras devolverse el torpón cuarto. Importante envergadura y cara ofensiva pero de contado poder. El Juli ordenó que el tercio de varas quedase en un simulacro para después dosificar las fuerzas del toro. Poco a poco fue metiéndolo en el canasto y, también, cogiéndole el pulso a la embestida. Las dos últimas tandas resultaron magistrales; El Juli en su versión más relajada.

Miguel Ángel Perera recibió muy templado al segundo de la tarde. El castaño de Zalduendo se mostró esquivo pero Perera estructuró una faena de menos a más. La muleta siempre puesta por delante hizo el resto. El viento amenazaba con traer de nuevo la tormenta. MAP se fajó en todo momento por ambos pitones.

El quinto embistió con clase en la primera mitad de la faena de Perera. Una vez podido se rajó y empezó a derrotar con la cara por alto. Aun así Perera le armó un alboroto con un arrimón cerca de las tablas.

El diluvio se desató en el tercero justo después de la media de rodillas con la que José Garrido abrochó un ramillete de verónicas que desembocaron en la boca de riego. Garrido se presentaba en Cuenca sustituyendo a Morante. El trasteo arrancó con unos ayudados por alto muy toreros y el vendaval se volvió a hacer presente. Garrido confió en la obediencia del toro gustándose. El viento volvió a molestar en las bernadinas finales pero Garrido no se inmutó, la muleta ondeaba tras su cuerpo, la emoción terminó de convencer a los tendidos que le premiaron con dos orejas.

El sexto mostró una clase excepcional desde que salió por chiqueros. Garrido lo cuajó con el capote. Sin embargo, en la muleta le faltó continuidad para emocionar. El pacense apretó los dientes para formarle un lío en el final de faena a base de circulares, Cuenca respondió entregada: dos orejas.

ZALDUENDO | El Juli, Miguel Ángel Perera y José Garrido
Toros de Zalduendo, correctos de presentación a excepción del anovillado primero y de noble juego en general. Se lidió un imponente sobrero de José Vázquez (4º bis) de contado poder.
El Juli, de azul añil y oro. Estocada trasera (oreja). En el cuarto, estocada (oreja).
Miguel Ángel Perera, de verde botella y oro. Estocada traserísima. Aviso (oreja) . En el quinto, estocada trasera (oreja).
José Garrido, de azul celeste y plata. Estocada (dos orejas). En el sexto, pinchazo y estocada (dos orejas).
Plaza de toros de Cuenca. Domingo, 27 de agosto de 2017. Segunda de feria. Más de tres cuartos de entrada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario