Por
encima de los astados. *** Paco
Ureña, Arturo Saldívar y Leo Valadez estuvieron más que esforzados.
Paco Ureña |
ADIEL
ARMANDO BOLIO
Especial
para VUELTA AL RUEDO
Fotos: EFE
La segunda corrida de toros de la CXC Feria
Nacional de San Marcos 2018, celebrada este viernes 20 de abril en el coso
Monumental de la ciudad de Aguascalientes, ante menos de media entrada en tarde
calurosa, tuvo como común denominador el pundonor y la evidente voluntad por
agradar de la terna torera que se encargó de pasaportar un complicado encierro
de la dehesa queretana de Xajay, aunque cuando menos por fallas con la espada
se perdieron orejas.
Y es que dice el refrán acomodado a la Fiesta de
los Toros: “El torero pone, Dios dispone, viene el toro y todo lo descompone”,
ello viene a colación porque los diestros puestos en el cartel, el de Lorca
(Murcia), España, Paco Ureña y los anfitriones Arturo Saldívar y Leo Valadez
pusieron todo su esfuerzo y conforme se fueron dando cuenta de las
interrogantes que sus respectivos lotes, incluyendo el astado regalo, les
fueron presentando y que fueron resolviendo en buena medida y en algunos casos
hasta cuajar faenas que no existían.
El juego del ganado, sin duda, fue el factor para
que el segundo festejo de la tradicional verbena abrileña se viniera abajo,
pues los siete astados de la ganadería de la divisa en verde y rojo resultaron
ser sosos y con muchos problemas, siendo si acaso, el de obsequió, el menos complicado,
vamos, el más toreable, pero de que los ejemplares lajeños dejaron mucho que
desear, eso ni hablar, además de que hubo un ejemplar, el quinto, que fue
protestado por falta de presencia.
En orden de aparición, el murciano Paco Ureña ha
desarrollado en el ruedo del coso Monumental una tauromaquia, la suya, plena de
solvencia, oficio y técnica para poderle a dos ejemplares que no se la pusieron
nada fácil, destacando lo que hizo en su segundo, al que, de nada, le hizo una
faena de mucho mérito por ambos lados, logrando muletazos de enorme valor. Sin
embargo, sus yerros con la espada le impidieron cortar una oreja que ya tenía
más que bien ganada, teniendo que conformarse con una ovacionada salida al
tercio, la única de la tarde, por cierto.
Por lo que toca a Arturo Saldívar, a pesar de su
antipatía en el ruedo, no se le deja de reconocer el sitio y el valor que tiene
para irle al toro. Los dos bureles de su lote de igual manera no se prestaron
para el lucimiento, pero el torero siempre tuvo el recurso oportuno y torero
para resolver las incógnitas que se le presentaban. Con el de regalo, todo
parecía indicar que Saldívar podría “tocar pelo” tras una labor variada y
torera al astado que más se dejó torear, pero no atinó a la hora buena.
Y Leo Valadez de igual manera tuvo la capacidad
para poder con el compromiso pues había interés por verlo y la verdad sea dicha
es que siempre estuvo tratando de agradar al público, pero sus intenciones se
estrellaron en el muro de la sosería de sus antagonistas.
FICHA DEL FESTEJO
Toros de Xajay, que evidenciaron sosería y muchas complicaciones.
Paco
Ureña: Palmas y al tercio.
Arturo
Saldívar: Palmas, silencio y
palmas en el de regalo.
Leo
Valadez: Palmas y palmas.
Aguascalientes, Aguascalientes. Segunda
corrida de la CXC Feria Nacional de San Marcos. Monumental San Marcos. Menos de
media en tarde calurosa.
“Retratos
Deteniendo el Tiempo: Óskar Ruizesparza presentó su obra
El patio principal del Museo Regional de Historia
de Aguascalientes fue el escenario la mañana de este viernes 20 de abril para
la presentación del libro “Retratos Deteniendo el Tiempo”, de la autoría del
reconocido fotógrafo Óskar Ruizesparza.
Ante la presencia de autoridades municipales, de
Juan Pablo Corona Rivera, representante de Fomento Cultural Tauromaquia
Hispanoamericana; del colega Juan Antonio de Labra y el diestro murciano Paco
Ureña, Ruizesparza a 50 años de haberse iniciado en la fotografía, destacó las
virtudes y anécdotas de su obra, con 25 años de antigüedad, además de señalar
que ello forma parte de la defensa de la Fiesta de los Toros a nivel mundial.
El libro en cuestión contiene láminas de 67 matadores en color y blanco y
negro.
Como parte del
homenaje a “Armillita Chico” en la Monumental
Amena e interesante exposición realizó el
historiador Adrián Sánchez sobre “Miguel Espinosa ‘Armillita Chico’, Puente
entre Siglos”, en el marco del ciclo que como homenaje realiza la empresa
Espectáculos Taurinos de México al matador de toros recientemente fallecido.
Apuntes hemerográficos, fotografías y videos,
salpicados de infinidad de anécdotas y datos, formaron parte de esta
presentación que inició con la etimología de la palabra “Armilla”, para seguir
con el momento en que don Fermín Espinosa Orozco pasó a ser de “Campanero” a
“Armilla” y de ahí a la trascendencia generacional, llegando a Miguel Espinosa
“Armillita Chico”, el hijo menor del maestro Fermín Espinosa Saucedo.
El legado de su padre se vio exponencial y
artísticamente desarrollado por el matador Miguel, a quien sorprendió la muerte
unos días antes de cumplir los 40 años de su alternativa celebrada en la “Santa
María” de Querétaro, teniendo como padrino a Manolo Martínez y de testigos a
Eloy Cavazos y José Mari Manzanares.
Estos y otros datos ornamentaron la didáctica
plática del profesor Adrián Sánchez, en la que fue segunda presentación en
homenaje póstumo al maestro Miguel Espinosa “Armillita Chico”. ¡Enhorabuena!
(MARY PAZ GONZÁLEZ)
Leo Valadez |
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