El
novillero pacense debutó con picadores cortando tres orejas; una oreja logró
Tomás Rufo mientras que San Román se estrelló con el peor lote.
Manuel Perera debutó con picadores en el inicio de
la Feria de Olivenza causando una gran impresión y cortando tres orejas. El
diestro jerezano, Juan José Padilla, se estrenó a su vez como apoderado tras un
invierno muy ilusionante junto al joven torero pacense. El novillo del debut,
que le brindó al Ciclón de Jerez, fue de la ganadería de El Juli -El Freixo-,
de nombre 'Alcohólico', al que le cortó una oreja tras una faena de gran
mérito.
Otras dos orejas logró Perera del que cerró la tarde, de Vistalegre, al
que saludó con verónicas de rodillas. Recibió una dura voltereta en el inicio
de la faena, también de rodillas, se repuso con firmeza. Concluyó su actuación
en cercanías. La puerta grande fue el colofón a la tarde de su debut.
Una oreja cortó Tomás Rufo al segundo de la tarde,
de la ganadería de Antonio Ferrera -La Peregrina- que resultó noble. Destacó el
gusto y el temple del toledano. Los aceros no funcionaron con la misma
precisión en el que completó su lote, de Talavante, con el que mostró sus
grandes cualidades (saludos).
Diego San Román se topo con el lote de menos
opciones, uno de Juan Albarrán y otro de José Luis Iniesta (saludos en ambos).
/ Diario EL MUNDO de Madrid
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