martes, 24 de marzo de 2020

CRISIS DEL CORONAVIRUS - Los ganaderos, asfixiados: «De un toro lidiado viven otros quince en el campo»

La crisis del coronavirus ha cancelado el primer tramo de la temporada taurina y eso dejará a muchas ganaderías sin lidiar.
 
Sin festejos taurinos, no hay bolsillo que soporte la manutención de una ganadería brava. No son animales vacunos que en menos de un año estén engordados en un cebadero, listos para ir al matadero. Los cinco años de vida de un toro tiene un coste medio de 5.000 euros. Ese precio únicamente lo puede sustentar un espectáculo público.

Esta situación tan anómala que estamos atravesando está abocando a la ruina a la gran mayoría de ganaderos de toro de lidia de este país. El propietario de La Palmosilla, Javier Núñez, señala que por cada toro que se lidia consiguen subsistir otros quince en la dehesa.

Cuando hace tres semanas el sector agrícola y ganadero decidió ponerse en la calle aún no era consciente de que su situación aún iba a ser más compleja. Núñez tiene un total de 1.140 cabezas de ganado en sus dos fincas. De ahí se lidian únicamente en torno a setenta durante la temporada. Si estos animales no llegan a ser lidiados, las cuentas no saldrán.


Muy activo en las redes sociales, el ganadero no tiene reparos en debatir con aquellos que se alegran del mal que está sufriendo la patronal durante esta crisis. Esta circunstancia ha colocado a las ganaderías de bravo ante la mayor de sus crisis tras la Guerra Civil y ha dejado en las dehesas a más de mil toros que tendrán dificultades para ser lidiados, según han mantenido en reiteradas ocasiones los presidentes de la Fundación Toro de Lidia, Victorino Martín, o el de la Unión de Criadores de Toros de Lidia, Carlos Núñez.

Un sector que vive de los ingresos de la taquilla está inmerso en estos días en la perplejidad de tenerse que financiar sin ingresos y lo tienen que hacer actividades tan diversas como empresarios, ganaderos, toreros, los actores principales de la Fiesta, y otros como cuadras de caballos, sastres, talabarteros y hasta taxidermistas, entre otros muchos.

Y en el campo en el que quedan los toros que comen todos los días y que, según los ganaderos, tienen un coste de cinco mil euros por cabeza antes de ser embarcados para su lidia, que se incrementarán si se quedan y que quedarán casi en saco roto si el animal va al matadero.

A cargo del toro, en explotaciones que combinan la cría del toro con la actividad agrícola, están mayorales, caballistas y una larga nómina de trabajadores que, en esencia, viven de la cría de reses bravas para ser lidiadas, que es el único destino de este animal.

Por ello, La Palmosilla ha explicado de forma muy didáctica la gravísima situación en la que queda el sector con las suspensiones y la incertidumbre que se ha cernido sobre las ganaderías de bravo, que según datos de la UCTL suman casi mil explotaciones en España con un censo de 213.457 animales inscritos en el Libro Genealógico de la Raza Bovina de Lidia.

En estas explotaciones, según señala La Palmosilla, el 6,3 por ciento de toros, que han vivido libremente cuatro años, mantiene al resto y si se incluye también como fuentes de ingresos, «aunque poco significativas», la lidia de novillos y las vacas de desecho en el matadero, «el numero de animales sacrificados para mantener al resto es de 11,6 por ciento».

«Si esos animales no se pueden lidiar en plazas de toros significaría que tendríamos que reducir la población de cabezas de forma drástica. Eso supone una pérdida de genética tan grande que lleva a la extinción de la ganadería a medio plazo», se afirma en la cuenta de esta vacada que pasta en Tarifa (Cádiz).

Esa circunstancia obligaría, según La Palmosilla, a buscar alternativas agrícolas a la ganadería, lo que «supondría una pérdida irreparable en biodiversidad», en las 250.000 hectáreas de dehesa, definidas por la Unión Europea como Sistemas de Alto Valor Natural.

«Ya no serían necesarios los 22 caballos, los 17 bueyes, los 14 perros y los gatos que viven gracias a la lidia de los toros. ¡Todo desaparece si no hay corridas de toros, todo! ¿En serio os llamáis amigos de los animales? ¿Os atrevéis a decir que os importan los animales? Si alguno contesta que sí, que pase por caja por favor», concluye La Palmosilla en su defensa del toreo y el toro. / Diario ABC de Madrid

No hay comentarios:

Publicar un comentario