CARLOS RUIZ
VILLASUSO
@CRuizVillasuso
Redacción
APLAUSOS
Dice el Derecho que el apoderado es la persona con
capacidad jurídica para actuar en nombre por cuenta de otro/a. Y dice que para
lo segundo hay que firmar un “poder” ante notario. En el toreo existía una
figura llamada apoderado que no necesitaba pasar por notario para serlo. No se
sabe si Camará y Manolete pasaron a la firma notarial. O que El Pipo y El
Cordobés garabatearon fidelidad en un papel. Lo que sí sé es que Camará, gesto
de mármol, gafas de sol negras, rimaba con Manolete. Y que El Pipo, que siempre
buscó a otro Manolete, encontró en Benítez el hombre para hacer el nombre. La
“marca” El Cordobés, tiene mucho de este hombre del pueblo dedicado a los
langostinos. ¿Ahora? Pues a lo mejor hay más papeles firmados que apoderados.
Llega la pandemia, cuyo miedo aumenta aún día a
día, y se mencionan a todos los del toreo. A todos y para todos se pide, se
llora (en justicia). Pero, pasando lista, nos falta uno: el apoderado. No se
sabe si se nos olvidó nombrarlo, si es que están todos ricos y no necesitan ser
nombrados o, sencillamente, resulta que, pasando lista, nadie levanta la mano:
no existen. Con una particular paradoja única en el mundo de la representación
artística: que todo torero, hasta novillero, tiene apoderado. Y sin embargo, es
como si no existieran.
Camará fue apoderado y basta. Jamás ejerció de
empresario. Estaba al otro lado midiendo desde sus gafas oscuras. El Pipo se
meneó con muchos toreros cuando le “quitaron” a El Cordobés y comenzó eso de
las exclusivas. Pero en los tiempos actuales, los toreros figuras pueden ser
apoderados por la misma persona, añadiendo a otros no tan figuras, las empresas
apoderan a toreros, ganaderos apoderan a toreros, empresarios que tienen
ganadería apoderan a toreros y así en variaciones semánticas aleatorias.
Un apoderado para un torero, en la paridad de uno
a uno, es un animal en vías de extinción. Escasos. Los hay, pero escasean, con
la perspectiva de dejar de escasear. Un apoderado para un torero es un
documental del National Geographic. De esos que hacen de los animales raros que
desaparecen. Una cosa es desaparecer y otra es faltar al respeto. Al orden
tradicional a la hora de acceder a un torero. Hoy ejerce más de dique de
contención un jefe de prensa que un apoderado. Saltarse a un apoderado o que
desaparezca del faz de la tierra da igual.
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