En
Las Ventas de Madrid
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| José María Luévano confirmando en Madrid de manos de Fernando Cepeda / ADARBO |
El
que fuera estupendo diestro aquicalidense fue apadrinado por el sevillano
Fernando Cepeda dentro de las afamadas Fiestas de la Paloma
ADIEL
ARMANDO BOLIO
Especial
para VUELTA AL RUEDO
El hecho entonces fue en ese escenario venteño, el
15 de agosto de 2004, cuando el espada sevillano Fernando Cepeda, ante la
presencia del albaceteño Sergio Martínez, le cedió a José María el toro llamado
“Ribereño” de la dehesa de El Pizarral, de Albacete y con divisa en azul y
blanco, dejando aquella tarde una más que buena impresión.
José María Luévano Delgado nació en la ciudad de
Aguascalientes el 12 de diciembre de 1973.
Debutó como novillero en la Monumental Plaza
México el 16 de agosto de 1992, van a ser ya 28 años de ello, con el astado
“Comino” de Manuel Martínez y alternando con Arturo Manzur y Alfredo Ríos “El
Conde” durante la décima segunda función del serial menor veraniego.
Tomó la alternativa en el coso Monumental “La Luz”
de León, Guanajuato, el 20 de enero 1995, siendo su padrino Miguel Espinosa
“Armillita Chico” y el testigo Manolo Mejía, con el toro “Don Juan” de
Begoña.
La confirmó en la Monumental Plaza México, en la
undécima corrida de la Temporada Grande de Oro, el 14 de enero de 1996,
llevando como padrino de nueva cuenta a “Armillita Chico” y ante la presencia
del valenciano Enrique Ponce, con el toro “Payaso” de Carranco para salir al
tercio, lo mismo que en su segundo, “Gladiador”.
Ganó en dos ocasiones el trofeo “Oreja de Oro”,
una en el coso Monumental de Aguascalientes, el 21 de abril de 2002, lidiando
toros de Xajay al lado de Antonio Urrutia, Paco González, Alfredo Gutiérrez,
Jerónimo e Ignacio Garibay. Y la otra en la Monumental Plaza México, el 16 de
marzo de 2003, por su faena al toro “Cervecero” de De Santiago, al que le cortó
una oreja y yendo en el cartel con “Armillita Chico”, Jorge Gutiérrez, Eulalio
López “Zotoluco”, Rafael Ortega, Ignacio Garibay y Fermín Spínola, además del
rejoneador Rodrigo Santos, con toros de varias dehesas.
Por desgracia, José María Luévano perdió la vida
en un accidente de carretera el 24 de enero de 2011.
DATO
José María dos veces se hizo del trofeo “Oreja de Oro”, uno
en la Feria de Aguascalientes en 2002 y el otro en la Monumental Plaza México en
2003
Tauromaquia
Mexicana en contra: Quieren prohibir la entrada a menores a las plazas
No
existe evidencia que demuestre que acudir a una corrida de toros sea generador
de violencia en los menores de edad
Desde la ciudad de Pachuca, Hidalgo, se informa
que el grupo Tauromaquia Mexicana se suma a todas las voces que han expresado
su rechazo al intento de impedir el acceso a menores de edad a las plazas de
toros y expresa su preocupación por este intento de poner nuevamente en riesgo
una actividad de carácter cultural e histórico que genera, además, una importante
derrama económica para el estado de Hidalgo y su ciudad capital. Es por ello
que al respecto se expidió el siguiente comunicado:
“Toreros, ganaderos, empresarios, subalternos,
monosabios y aficionados en general reiteramos que el acceso de las niñas,
niños y adolescentes a los espectáculos taurinos forma parte de su derecho a la
cultura y a su identidad, cuando así lo deciden y bajo el cuidado de sus padres
o tutores.
Cabe recordar que la Tauromaquia es parte del
Patrimonio Cultural Inmaterial de nuestro país y de la identidad de las
personas, grupos y comunidades de quienes gustan de las corridas de toros.
No existe evidencia científica ni estudios que
demuestren que acudir a una corrida de toros o participar en una escuela
taurina provoque algún trastorno de ansiedad o sea generador de violencia en
los menores de edad.
Expertos en el tema han hecho una profunda
búsqueda de estudios sobre la materia. Tras esa indagatoria se puede concluir
que, ni de manera empírica ni mucho menos científica, existen pruebas que
acrediten que presenciar o participar en corridas de toros genere
comportamientos violentos o algún otro trastorno de la personalidad.
Por ello, Juan Alberto Cárdenas Medina, reconocido
psiquiatra y paidopsiquiatra mexicano, realizó un detallado estudio para
analizar si existe impacto emocional y conductual al presenciar las corridas de
toros en menores de edad, sin encontrarse ningún impacto a nivel emocional o
conductual.
Es importante señalar que una eventual prohibición
al acceso a las plazas de toros destinada a las niñas, niños y adolescentes
podría significar la violación a una serie de derechos fundamentales
reconocidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los
tratados internacionales de los que nuestro país es Estado Parte y de la
legislación mexicana.
Podrían verse vulneradas garantías fundamentales
como el derecho al acceso a la cultura, el derecho a la libertad de manera
general y, en particular, el derecho al libre desarrollo de la personalidad, el
derecho a la libertad y el derecho a la libre expresión.
Tauromaquia Mexicana expresa su preocupación por
los intentos que pretenden desestabilizar a la Fiesta Brava, una actividad que,
de acuerdo con datos corroborados por instituciones como la Secretaría de
Agricultura, en 2019 fue generadora, a nivel nacional, de un flujo económico de
seis mil, 900 millones de pesos, creó más de 80 mil empleos directos y 146 mil
indirectos y representó más de 800 millones de pesos en materia de impuestos.
En esta organización consideramos que los
diferentes sectores de la actividad económica del estado de Hidalgo se verán
altamente afectados por la pandemia del Covid-19, a lo que la Fiesta Brava y
todas las familias que de ella dependen no escaparán. Pretender atentar en
contra de esta industria en estos momentos de suma dificultad para el país no
tiene el más mínimo sentido.
Es por ello que, a nombre de quienes hacen posible
este espectáculo, hacemos un llamado a las autoridades de Pachuca para frenar
cualquier intento de afectar esta tradición, inscrita en la cultura de nuestro
país desde hace casi 500 años”. Hasta aquí el documento.
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