Balance artístico con grandes éxitos
Rafael Orellana, al lado del empresario taurino y paisano tovareño, José Antonio Montilla, ambos con protagonismo marcado en la Feria de La Chinita. Foto: Aníbal García Soteldo |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Nuevamente el espigado diestro tovareño Rafael Orellana
estará en actividad por ruedos del Perú, este martes, la que sería su 12ª actuación
en el curso de su temporada por este 2015, en la mayoría de estas con éxitos
incontestables.
En tal sentido, cartel mixto el que estará encabezando, pues
compartirá cartel con el novillero Kuntur Alfaro, en la lidia de reses del
ganadero Rene Calderón Oblitas en la localidad de Puno (Distrito de Taraco,
Provincia de Huancané).
Supone este un parón temporal, pues en la agenda del
torero está el regresar a suelo venezolano y mentalizarse en el campo bravo de
cara a los compromisos que su representante en arenas nacionales, el crítico
taurino, Freddy Ramírez “Garapullo” le tiene firmado, como es su presencia en
el abono de la Feria de la Chinita, en la tarde de cierre, o posiblemente su
regreso a la Plaza de Toros de Valencia, de la que se baraja cartel con toros
de Tierra Blanca al lado del veterano espada Erick Cortés y Marcos Peña “El
Pino”, así como un posible festejo aún por concretar en la calurosa población
de Guanare.
En la interesante campaña que ha venido realizando Rafa
Orellana está el hecho de haber sumado 11 orejas y un rabo, y haber recorrido
aproximadamente 22 mil kilómetros de empinados caminos, camellones y montañas
de la abrupta geografía inca.
HOY SE CONMEMORA 44 AÑOS DE LA MUERTE DE CESAR GIRÓN
La fatídica noche de un 19 de octubre de 1971, a la altura
del km 73 de la autopista regional del centro tuvo como protagonista al torero
más grande que ha parido esta tierra. Era César Girón, quien moría víctima de
un accidente de tránsito, mientras conducía un Volkswagen Carmanggia, tras
colisionar con la plataforma trasera de un camión Ford que venía accidentado,
conducido por el chofer tachirense Parménides
Chacón Colmenares.
Nacía a partir de allí la leyenda de un torero inigualable
que aún espera quien le supere.
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