Primera crónica taurina publica en el
Diario Frontera
RUBÉN DARÍO
VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Hace 25 años, tal día como hoy, publicaba el que
sería la primeras de mis notas taurinas en el que para entonces era el primer
diario de circulación regional en Mérida, como lo fue el Diario Frontera. Lo
fue en el marco de lo que fue aquella ocasión la Feria de Tovar 1994, que para
aquel entonces fue organizada por el inquieto matador en retiro Jesús Colombo
padre, y donde destacamos como elementos resaltantes los apoteósicos triunfos
de los matadores Nelson Segura y Nerio Ramírez “El Tovareño” ante un bravísimo encierro
de la ganadería de La Carbonera. Fue el último año que el Coliseo El Llano se
le vio sin el techo que la recubre actualmente, pues en la edición de
reencuentro del ’95 se estrenaría finalmente dicho elemento que hace esta plaza
única y original entre todas.
No ha sido un camino fácil este el de escribir de
toros. Es un oficio donde se destaca más la pasión por destacar (lo bueno y lo
malo de una corrida o la actualidad taurina) que otra cosa, donde más de una
circunstancia se presta para condicionarte. Seria numerosas colocarlas en
vitrina en esta nota, pero sí destacamos que hoy día más que nunca, es el hecho
que el toreo en Venezuela y en especial en Mérida ha entrado desde hace dos
lustros a la fecha en una especie de manía por hacer que todo quien tenga la
obligada decisión de escribir o hablar de toros, entrar en lo que he llamado lo “políticamente
correcto” para los múltiples intereses que se mueven en el lio del
toro, que nos ha llevado a lo que actualmente tenemos de fiesta brava: muy poco
y lo que hay languideciendo.
Es difícil ordenar ideas y caminar a lo largo de
estos cinco lustros todo lo que ha sucedido. Hemos sido testigos de grandes
momentos y otros no muy agradables. Y para ellos siempre hemos tenido la visión
y el rasero de la objetividad, que muchas veces molesta o “mosquea” algunos. He
visto como los intereses personales muchas veces han sido vencido con la
tenacidad y personalidad que debe de tenerse en un oficio no del todo retribuido,
pero reconfortante cuando ese aficionado que sabes que entiende y discierne el
oro del oropel lee tu crónica y se siente informado primero, y ya luego te dará
o no la razón. Cada quien en este mundo, que es el del toro, tiene su verdad, con
sus distintos matices.
En fin, me siento satisfecho que haya pasado de
aquella primera vez 25 años, que se dicen rápido… y también con la satisfacción
de haber crecido personal y profesionalmente a la par de ello. No olvido la
primera vez de haber visto impreso en un papel, ante el juicio de una amplia
tribuna tus ideas, y más con la edad de 13 años. Pocos se lo creían. Y en el
camino, aprendiendo de grandes personas como el legado de grandes del
periodismo taurino nacional como “El Vito”, Pepe Cabello, Antonio Aragón (con
sus revistas Venezuela Taurina), sin dejar las lujosas ediciones de Mérida Deportiva que por epoca ferial trabajaba el fallecido Luis Alberto Colls, el cual conservo casi todas ellas, y ya a nivel internacional un Zabala de la
Serna (el cual así mismo cumplió por estos días 25 años de ejercicio
profesional), Joaquín Vidal, José Carlos Arévalo, así como las añoradas
retrasmisiones radiales de la feria de Cali por la Cadena Caracol, en la voz de
Iván Parra “Parrita”, Manolo Molés, el maestro Antoñete, o actualmente con la intervención
puntual del maestro César Rincón. A todos estos se les tiene como referencia, con
sus defectos y virtudes, en aras de mejorar ante usted que me lee en este
momento.
Ojalá y Dios me de la fuerza, el ánimo y espíritu
en lo que se pueda estar al lado de una labor que no solo se enfoca en el día
de la corrida y la crónica del festejo. Detrás de ello está la continuidad, la
perseverancia e ilusión en ver cada tarde la faena que haga expresar a través de
las letras los mejores sentimientos.
¡¡¡DÍGASE
LA VERDAD, AUNQUE SEA MOTIVO DE ESCANDALO!!!
Felicitaciones amigo y hermano por tan loable labor, que la pluma taurina te siga llenando de exitos y bendiciones.
ResponderEliminar