domingo, 8 de mayo de 2011

ÚLTIMA CORRIDA DE LA FERIA DE SAN MARCOS EN AGUASCALIENTES: Faenas de Barrera y Cornada a "El Cuate"

Los tres cortaron orejas en la San Marcos
Ignacio Garibay toco “pelo” en la ultima corrida de la Feria de San Marcos de Aguascalientes 2011, en tarde donde sus compañeros hicieron lo mismo. Foto: EFE
HORACIO SOTO CASTRO

AGUASCALIENTES, Ags.- En esta última corrida de la feria de San Marcos, los tres alternantes cortaron orejas, pero con un valor distinto y Alberto Espinosa "El Cuate" resultó con una cornada grande en el escroto dejando al descubierto el testículo izquierdo con posible penetración de vientre, pero al parecer no es tan grave porque el diestro entró a la enfermería por su propio pie para ser intervenido en el sanatorio Guadalupe, donde quedará internado.

Esta corrida resultó muy interesante como se calculaba y la plaza Monumental registró con poco más de media entrada, mejor de lo que se esperaba.

Fue Alberto Espinosa "El Cuate" el que logró entusiasmar a la clientela que hasta la famosa Pelea de Gallos atronó en el espacio. Ratificó el personal estilo el que ha venido haciendo alarde y ayer estuvo muy valiente y torero haciendo que los asistentes tuvieran el Jesús en la boca.

El percance se registró en el toro que cerró el festejo de nombre Revenido, como aquel famoso toro que lidió admirablemente don Rodolfo Gaona. El toro de ayer fue delantero y astifino al que Alberto lo toreó a la verónica bajando mucho los brazos y en quites hizo lo mismo al ejecutar las chicuelinas que remató con media. Inició su labor por ayudados, pues la embestida era clara y se pasó la pañosa a la izquierda, pero por ese lado se le ceñía y al intentar un natural lo prendió y lo trajo colgando del pitón un tiempo hasta que lo soltó. Alberto se levantó y volvió a la cara del toro y nuevamente se vio en apuros, pero nada de cuidado. Fue cuando atronó la Pelea de Gallos entre el entusiasmo de la gente. Dejó media que no hizo efecto y siguió con manoletinas para borrar la falla y nuevamente otra ración igual para que doblara la res. Petición de oreja que se otorga y de matarlo a la primera le conceden los dos apéndices y dio la vuelta después de que lo volvieran a vendar entre grandes aclamaciones.

En su primero escuchó las dianas que se desgranaron en su honor por unas bellas verónicas cargando la suerte en forma artística. Pases sueltos por la izquierda de calidad y se dio a torear por la derecha en tandas de ayudados que le corearon. Alberto se vio muy tranquilo, relajado, dejando ver el sitio que tiene y lo bien que está haciendo el toreo. Dejó media para saludar en el tercio.

El matador español Antonio Barrera se sacó la espina y se superó con mucho respecto a su presentación anterior. Realizó dos faenas inteligentes con muletazos limpios y templados bajo el reconocimiento del público cortando la primera oreja de la tarde y perdió cuando menos otra por fallar con la espada.

En su primero estuvo muy lucido a la verónica y revolera a pies firmes. En quites, gaoneras muy ajustadas y con sabor y con la muleta faena sobre la derecha principalmente, pero tuvo que tratar al toro con pinzas por su poca fuerza, temiendo que rodara. Le dio su tiempo y reposo y hasta dos dosantinas le ejecutó y muletazos en redondo. Estocada para oreja y vuelta.

En el otro anduvo por el mismo tenor, pues además de poca fuerza se quedaba corto y aún así hilvanó muletazos de calidad. Por el izquierdo se quedaba corto. Tres pinchazos y descabello, perdiendo trofeos al retirarse, pero fue aplaudido.

El primer astado de Ignacio Garibay fue el lunar del encierro, pero el diestro lo toreó bien a la verónica y por chicuelinas. El toro se quedaba corto y terminaba con la cabeza arriba y tirando cornadas. Lo hicieron salir al tercio.

A su segundo, un toro con poca fuerza y sin repetir le dio muchos muletazos, pero no tenía eco en los tendidos que se dieron a hacer la ola futbolera. Mató pronto y con una rara petición de oreja, el juez la soltó alegremente que se la protestaron ruidosamente y se la entregó a su cuadrilla para dar la vuelta. Para retirarse en el centro del ruedo tuvo división de opiniones.

El encierro de Carranco, de doña Laura Villasante y Vicente, estuvo muy bien presentado con edad y kilos. Acudieron a los caballos y unos pelearon más que otros y en general se dejaron torear más que bien, menos el corrido en tercer lugar y el sexto que tuvo sus problemillas. Sin mucha fuerza el primero y cuarto.

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