ADDIEL ARMANDO BOLIO
Fotos: EFE
De esta manera, ante una regular entrada en tarde fresca y
algo de viento se lidiaron seis ejemplares de la dehesa mexiquense de Arroyo
Zarco de discreta presencia, siendo muy bueno el cuarto que mereció el arrastre
lento. Regulares fueron el primero y el segundo en tanto que los demás
presentaron complicaciones.
El diestro distritense IGNACIO GARIBAY en el toro que abrió
plaza lanceó bien a la verónica, con suavidad y clase para luego llevarlo al
caballo por chicuelinas caminándole y quitar vistosa y toreramente por navarras
en el centro del ruedo. Con la muleta empezó doblándose con mimo para luego
darse a ligar tersas tandas por el lado derecho a pesar de la noble embestida
del astado pero falto de raza y evidenciando postrera sosería. Por el izquierdo
se dejó muy torero y dispuesto pero finalmente sucedió que con la mano diestra
ha estado mejor y por ahí es por donde siguió engarzando muletazos templados,
mandones y provocando los embates del “socio” pisándole los terrenos. Con
determinación se le ha podido ver a este más que rescatable matador. Mató de
estocada ligeramente caída y efectiva para ser llamado a dar la vuelta al
ruedo.
A su segundo, de nombre “Ilusión”, lo veroniqueó con
solvencia, sin hostigar al toro. Su quehacer muleteril lo prologó con pases
vaciando por alto para después bajarle la mano y correrla con temple y
estupendo trazo y dimensión derechista. Por el izquierdo también hizo el toreo
rítmico y cadencioso. Continuó Ignacio por el pitón diestro haciéndolo todo con
emoción y desbordante sentimiento, gustándose y gustándole al público. Lo
volvió a intentar por naturales despaciosos, plenos de calidad. Y epilogó su
trasteo con adornos toreros como el cambiado por la espalda y así ligar la
capetillina, además de una tanda más de derechazos que rubricó con el
trincherazo y un estético y artístico ayudado por bajo entre gritos de ¡torero!
Acabó de certera estocada entera para que le fueran concedidas las orejas y al
buen astado dársele el premio del arrastre lento a sus despojos, aunque el buen
desarrollo del toro se debió más a la atinada lidia que le dio Garibay. Con
justeza el destino le deparó una salida en hombros por la Puerta Grande de El
Encierro.
Al primer astado que le tocó en suerte, el espada salmantino
PEDRO GUTIÉRREZ LORENZO “EL CAPEA” lo recibió de rodillas en la zona de los medios
con una larga cambiada y otra más al hilo de las tablas para luego veroniquear
flexionando una pierna y de pie hacerlo con voluntad. En el tercio de varas el
picador Rodolfo Acosta sufrió un peligroso tumbo sin consecuencias. Quitó
entonces “El Capea” por chicuelinas en los medios y ya con la sarga en mano
inició de hinojos por alto y ya incorporado le ha puesto evidente y plausible
determinación en su toreo con ambas manos, sobre todo por el lado natural
cuajando series más que empeñosas no obstante la sosería y falta de casta de su
antagonista. Ya en la parte final del trasteo alcanzó a dar derechazos
meritorios y en redondo. Mató de media estocada atinada para ser aplaudido.
En su segundo poco pudo hacer con el capote en tanto que su
labor de muleta ha sido de evidente empeño y torerismo por los dos perfiles,
destacando lo que ejecutó con la mano derecha pero la verdad es que el toro no
ofrecía facilidades para el lucimiento. Sin embargo si se tiene que ponderar la
buena disposición de “El Capea”, quien inclusive en su afán por agradar al
público acortó distancias pero sin los resultados que él esperaba. Acabó de
pinchazo y estocada para recibir palmas.
El matador aquicalidense MARIO AGUILAR en el primer ejemplar
de su lote jugó bien los brazos en lances a la verónica y ceñidas chicuelinas,
además de quitar de manera breve por verónicas. Con la franela comenzó con
pases de la firma y de trinchera yendo de las tablas al tercio. El toro de muy
poca fuerza y dando medias embestidas, quedándose corto, le impedía estructurar
la faena pero a base de insistir prácticamente le “robó” meritorios derechazos.
Por naturales ni un pase se “tragó” pero por derechazos le porfió para sacarle
otros muletazos de valor. Luego quiso combinar el toreo efectista al pasarse al
burel por la espalda aprovechando para endilgarle la regiomontana pero sin el
favor de la concurrencia. Concluyó de estocada honda, trasera, contraria y
atravesada, y otra casi entera y desprendida para escuchar palmas tras un
aviso.
Y en el burel que cerró el festejo ligó verónicas abriendo
el compás y a pies juntos. Con la muleta inició su labor con pases ayudados por
alto en la zona de tablas de manera estatuaria para luego templar con ciertos
apuros por el lado derecho pero ante la poca colaboración del astado nada había
que hacer. Por el izquierdo todavía fue más difícil buscar algún lucimiento.
Por ello Aguilar le puso mayor empeño con la mano diestra hasta lograr
meritorios muletazos sueltos. Finiquitó de estocada entera y desprendida,
además de descabello para retirarse en silencio.
FICHA DEL FESTEJO
Décima segunda corrida de la Temporada Grande Internacional 2015-2016.
Monumental Plaza México.
Entrada: Regular en tarde fresca y con algo de viento.
Toros de Arroyo Zarco, de
discreta presencia, siendo muy bueno el cuarto que mereció el arrastre lento.
Regulares fueron el primero y el segundo y, los demás, resultaron complicados.
Ignacio Garibay: Vuelta al ruedo y dos orejas, con salida
en hombros por la Puerta Grande de El Encierro. El salmantino Pedro Gutiérrez Lorenzo “El Capea”:
Palmas y palmas. Mario Aguilar:
Palmas tras un aviso y silencio.
INCIDENCIAS: El picador Rodolfo Acosta fue desmontado por el segundo toro de la tarde.
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