miércoles, 16 de julio de 2014

OBSERVATORIO TAURINO: Manzanares da explicaciones

ÁLVARO RODRÍGUEZ DEL MORAL

Dejamos a un lado los triunfos y los fracasos de San Fermín. Ya saben que Perera reafirmó su papel de caudillo de la campaña; que El Juli desempolvó sus galones y que Pepe Moral reivindicó su condición de gran torero en ciernes. Pero las recientes declaraciones de José María Manzanares en relación con el conflicto sevillano merecen un punto y aparte. El diestro alicantino se dejó poco en el tintero después de demasiado tiempo de silencio taurino. Lo hizo en el programa La Divisa, que dirige el veterano compañero Pedro Javier Cáceres. El podcast está disponible en su web y aporta nuevos datos para dibujar un horizonte que podría cambiar mucho cuando se guarden los turrones. Y cuando entró en el ídem, Manzanares no se tapó al reconocer el fracaso de la inoperante rebelión de primavera: “tenemos que intentar revocar esta situación como sea; ha sido una pena, sobre todo la asistencia de gente a la Feria”. En esa misma línea, el alicantino reconocía el mal clima que se vive en los patios de caballos clamando por una “paz” que él considera urgente y necesaria. Ya sabíamos que había renunciado a varios contratos ventajosos en coincidencia con esos festejos sevillanos que vivió a distancia y con “sentimiento de amargura”.

La ruptura de una alianza

“Lo que he aprendido es que cada torero tiene su carrera y cada uno tiene que defender y luchar por lo suyo”. La frase es la sentencia de muerte de la breve alianza que defenestró la pasada Feria de Sevilla pero encierra otras derivadas, como esa evidente ruptura con El Juli de la que ya hablamos la semana pasada, materializada en la mutua aversión a verse en el mismo cartel. Que sepamos, de aquí a lo que queda de temporada sólo están anunciados juntos el 14 de agosto en Beziers junto a Castella, que es el dueño de la casa. Y no es casual. Tampoco lo es que el propio matador aluda al “ambiente raro” que se vive en los patios de cuadrillas. Manzanares sí coincide con El Juli al señalar que “no ha habido comunicación”. Eso sí, matiza que esa falta de diálogo también ha faltado en el seno del propio grupo de matadores, entre ellos mismos: “No se ha sabido transmitir lo que se estaba llevando a cabo, lo que se perseguía…”. Pero hay que agarrarse, que vienen curvas. El diestro alicantino habla con meridiana claridad al explicar que “se han podido tomar decisiones precipitadas que no se piensan cuando cada uno está metido en su propia preparación, en su temporada en América y a lo mejor llegamos a esas decisiones de las que nos arrepentimos”. No hay que añadir demasiado al dato.

Otras perlas sin desperdicio

Pero hay que seguir el hilo de la larga disertación de Manzanares, que parecía tener ganas acumuladas de desahogarse. El torero volvía a incidir en la necesidad de volver a retomar el control de sus propias decisiones: “cada uno debe defender su carrera y cuando haya causas colectivas debe existir la comunicación y la transparencia para remar todos en la misma dirección”. En ese sentido añadió que “con el diálogo se va mucho más allá que con las decisiones más tajantes”. Pero no se vayan todavía que aún hay más: “todas las partes hemos cometido errores pero no estamos aquí para seguir peleando; estamos para llegar a un acuerdo y sobre todo para que la relación sea buena”. En esa misma línea, bajando al pie de esa calle que no ha entendido los términos de la rebelión añadió que “tenemos que recapacitar todos; saber entender a la gente y ser comprensivos con muchas de las actitudes. Se puede pedir perdón, dar marcha atrás y olvidar”. Manzanares tampoco ocultó sus ganas por volver a torear en la plaza de la Maestranza aunque mantuvo una línea argumental de respeto a los toreros del G-5. “Si pudiera torear en Sevilla, toreaba ya pero no voy a traicionar a mis compañeros aunque quiero que se solucione de una manera pacífica lo antes posible”, señaló el matador recordando que el problema con la empresa Pagés -no sabemos si insalvable- residía en el “trato personal” que habían recibido algunos de sus compañeros alzados. El diestro alicantino volvió sobre sus pasos al reiterar que “es posible que hayamos tomado decisiones erróneas y hay que recapacitar” y reconoció que el conflicto podría haber tenido un recorrido más corto y “a lo mejor se habría arreglado hablando directamente con la empresa”. Llegados a este punto, podemos comenzar a especular con el necesario acercamiento de posturas que no puede ni debe tardar. El daño hecho a la plaza de Sevilla rebota directamente en las carreras de los toreros que dieron la puntilla a un abono que necesitaba cariñitos desde hace demasiado tiempo.

Y nos vamos: se ha hablado mucho del rechazo del premio Joaquín Vidal por parte de José Tomás. En este caso habría que analizar un poco más que hay detrás de la abrupta decisión del madrileño y, además, es mejor dejar de aceptar un galardón que plantar al personal cuando toca recogerlo. Una cosa más: la transcripción de las declaraciones completas de José María Manzanares las tienen en este mismo blog. Justo aquí debajo.

DERRUMBE DEL PÚBLICO Y EL ABONO

“En Sevilla debemos remar todos en una dirección para intentar revocar esta situación como sea. Ha sido una pena, sobre todo la asistencia de gente de esta feria. No he ido pero por lo que me han comentado ha bajado mucho. Entre todos deberíamos de hablar y llegar a un aclaramiento. Al final, hay que hacer las paces”.

NOSTALGIA DE LA PLAZA DE LA MAESTRANZA

“La paz en el mundo del toro es necesaria para el empresario, para el ganadero, para el torero… porque el espectáculo que se le ofrece al aficionado es lo que nos mantiene”.

“Sevilla me lo ha dado todo en mi carrera. Soy de ella; sólo le debo cosas buenas. Lo pasé muy mal durante la Feria de Abril al ver que no estaba toreando y de hecho tomé la decisión de no torear en ninguna otra plaza”.

“Para mí Sevilla es irreemplazable; no quise torear en Málaga ni Aguascalientes para quitarme ese sentimiento de amargura que tenía por no torear en Sevilla. Por eso quiero que esta situación se soluciones lo antes posible”.

“Lo que he aprendido es que cada torero tiene su carrera y cada uno tiene que defender y luchar por lo suyo”.

“Hay muchas cosas que arreglar en el mundo del toro pero no sólo en la parte empresarial, también por parte de nosotros, los toreros. Hay muchas cosas que mejorar y podríamos luchar juntos para ello”.

SOBRE EL G-5: UN AMBIENTE ENRARECIDO

“El problema es que no ha habido comunicación ni entre nosotros. No se ha sabido transmitir lo que se estaba llevando a cabo, lo que se quería… Ha habido mucha desinformación y no se ha sabido remar en la misma dirección y cualquier cosa que pasaba era un encontronazo”.

“El ambiente es raro en los patios de cuadrillas. Siempre ha habido rivalidad pero el ambiente era bueno, de respeto. Estos dos últimos años se ha enrarecido mucho el ambiente con todo lo que ha ido pasando”.

“Cada uno debe defender su carrera y cuando haya causas colectivas debe existir comunicación y transparencia para remar todos en una misma dirección. Con el diálogo se va mucho más allá que con las decisiones más tajantes. Eso es lo que realmente he aprendido en estos años”.

ASUNCIÓN DE ERRORES

“Todas las partes hemos cometido errores pero no estamos aquí para seguir peleando. Estamos para llegar a un acuerdo y sobre todo para que la relación sea buena. Ganaría la profesión”.

“Mi personalidad es así. No me gusta llevarme mal con nadie. A lo mejor vivo un poco al margen del mundo del toro porque me gusta tener mi propio espacio”.

“Todo el mundo debería, al margen de sus propios intereses, elegir un camino para llegar a un acuerdo por el bien de la fiesta, que está sufriendo muchos ataques”.

NEGATIVA A TOREAR EN SEVILLA: CAUSAS Y CONSECUENCIAS

“Fue una decisión que tomamos una serie de compañeros y yo soy fiel a ellos; lo que sí puedo decir es que nosotros vamos a intentar lo posible porque este tema se soluciones. Al menos por mi parte”.

“No puedo dejar que este tema afecte a una plaza tan especial como Sevilla, a su afición, sus abonados…”.

“Tenemos que recapacitar todos, saber entender a la gente, ser comprensivos con muchas de las actitudes. Se puede pedir perdón. Dar marcha atrás y olvidarse”.

“En esta vida hay que saber perdonar, saber recapacitar y realmente es muy fácil. Hay que tener un acercamiento; que todo esto se hable y se solucione y ya está: olvidar lo que ha pasado y punto”.

DESEOS DE VOLVER A TOREAR EN SEVILLA

“Si pudiera torear en Sevilla toreaba ya. Lo que pasa es que yo no voy a traicionar a mis compañeros. Quiero que se solucione para todos de una manera pacífica. Voy a luchar porque se solucione lo antes posible y todo el mundo pueda estar feliz. Dios quiera que todo vaya bien y podamos estar en Sevilla”.

¿UNA DECISIÓN PRECIPITADA?

“Se toman decisiones precipitadas que no se piensan cuando cada uno está metido en su preparación, en la temporada de América. A lo mejor llegamos a tomar decisiones de las que nos arrepentimos y que no se pueden llevar a cabo”.

EL TRATO CON LA EMPRESA PAGÉS

“Lo que más echábamos en falta era el trato que recibíamos aunque ya he dicho que yo sí había recibido un trato bueno pero también soy consciente de que a otros compañeros no es así, no sólo en la negociación sino en el trato más personal”.

“Hay decisiones que a lo mejor se han tomado erróneas y hay que recapacitar. A lo mejor se habría arreglado hablando directamente con la empresa”.

“Se pueden sacar conclusiones de muchos tipos ahora que ha pasado todo pero para eso estamos aquí: para intentar arreglarlo, que se solucione de la manera más pacífica posible y olvidarlo cuanto antes”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario