jueves, 15 de agosto de 2013

CORRIDA DE LA GUARDIA NACIONAL: Puerta Grande compartida sin muchas estridencias

Anovillado lote de ejemplares las que se pasaportaron en el marco de la Corrida de Toros Homenaje al LXXVI aniversario de la Guardia Nacional Bolivariana, donde los pasajes de mayor interés estuvo en las manos del diestro local Rafael Orellana.
Dos orejas tras los momentos de mayor interés, las que ha cortado Rafael Orellana este domingo en Tovar. Foto: Leonardo León-Archivo
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz

TOVAR (Enviado Especial).- La salida en hombros del cavaleiro José Luis Rodríguez y del matador Rafael Orellana enmarca el balance artístico de lo que fue la tarde de toros de este pasado domingo en el ruedo del Coliseo El Llano de Tovar. Astados del hierro yaracuyano Campolargo, discretísimo en trapío, con evidencias palpables de severa manipulación de los «diamantes» de los pitones, así como al momento de anunciar los supuestos que estos presentaron en la romana de la plaza, en parte han quitado seriedad a la buena voluntad de parte del contingente militar –en la persona del Coronel Sergio Negrín, comandante del destacamento GNB N° 18- que ha tomado en cuenta la fiesta brava para conmemorar un aniversario más de nuestra ilustre y gloriosa Guardia Nacional Bolivariana.

Y es que sí en parte somos conscientes de la difícil crisis que vive el toreo en Venezuela en todos los ámbitos, incluyendo lo exigua de nuestra cabaña brava, también es cierto que se debe de tener un poquito de respeto a quienes pagamos por ver un espectáculo con cierto sentido de pureza y verdad, elementos fundamentales para lo que es el mérito de exponer el físico ante un animal como es el toro de lidia.

Abrió plaza el rejoneador –para no herir sentimientos a su señor padre- José Luis Rodríguez, quien ha cortado oreja en cada uno de sus bureles que corrió. Mansurrón, aquerenciado, embistiendo por arreones fue «Ribatejo», el cual solo permitió algunos pasajes de mérito del mencionado jinete en banderillas a dos manos, pues en la mayoría de las farpas y hierros de castigo colocadas anteriormente se hizo clavando a la grupa. El rejón de muerte colocado trasero y caído hizo que el toro rodara sin puntilla y diera pie a la tímida pañolada para la concesión de una oreja.

Mismo premio fue el que cercenó de su segundo, más seriecito de estampa el astado, permitiendo en esta oportunidad mucho más ortodoxa y de méritos, pues hubo de necesitar el señalado rejoneador recursos y exposición de sus caballos para clavar en lo alto, al cuarteo y de frente ante lo parado del recorrido de cornúpeta. Ofreció la misma dosis toricida con la hoja de peral, para nuevamente la tímida pañolada diera pie a cortar la oreja que le abría la opción de salir en hombros.

Orellana llegaba a su tierra aún con el polvo de los caminos transitados por suelo peruano, y vaya que la madurez, el reposo y naturalidad con la que se desenvolvió ante el sobrero que sustituyó al titular castaño que se había inutilizado tras estrellarse debajo del peto, partiéndose la pata derecha lo ha dejado manifiesto. Con «Cocorote» se ha visto a un Rafael Orellana que ha lucido con autoridad sobre la embestida, en especial por la mano diestra, pitón donde el burel ofreció resquicio de nobleza y largo recorrido a los toques sutiles y firmeza de pies del espigado coleta tovareño. Breve fue su intervención por naturales, donde el toro no ofrecía mismas condiciones, no entrando mucho en detalles Orellana, rematando labor de certero estocada al encuentro entera, trasera y ligeramente caída, para cortar las dos orejas, la segunda de esta concedida cuando ya el toro estaba a disposición de las mulillas.

El que cerró plaza no le ha dejado estar a gusto en la mayoría de las ocasiones, atropellándole la muleta, por lo que el elemento temple fue factor pendiente donde quedaron en la retina el torero inicio por doblones en el tercio que hicieron presagiar otro trasteo que se no fue, diluyéndose entre el recitar de pinchazos y descabellos con la que remataba actuación.

FICHA DEL FESTEJO
Plaza de Toros Coliseo El Llano de Tovar
Domingo 4 de agosto de 2013.
Corrida de Toros Extraordinaria en el marco del LXXVI aniversario de la Guardia Nacional Bolivariana
Con poco más de 1700 personas aproximadamente en los tendidos, en tarde soleada, y fresca, se han lidiado cuatro reses del hierro de CAMPOLARGO (Juan Campolargo) en su conjunto anovillados excesiva y malamente afeitados, maquillados intencionalmente en la tablilla, que en su conjunto fueron mansurrones, descastados y limitados de fuerzas. Por lesionarse en el ruedo fue lidiado un 2º bis, del mismo hierro, sin salirse del guion de sus  hermanos de camada.
Pesos: 428, 427, 425 y 425 kilos

JOSÉ LUIS RODRÍGUEZ
(Vestido a la usanza portuguesa, azul prusia)
Oreja y oreja

RAFAEL ORELLANA
(Caña y plata con remates en negro)
Dos orejas y silencio tras aviso

INCIDENCIAS: Inicio de festejo retardado por espacio de 25 min a lo estipulado. *** Debutó en la presidencia de la CTM de Tovar la Dra. Vanessa Contreras. *** Destacó entre los subalternos la brega de Javier Fuentes, los demás lucieron atropellados, tanto en banderillas como en distintos pasajes. *** Salida en hombros de los espadas actuantes por la Puerta Grande Cristo Rey, cuando para tal efecto tal honor se limita aquellos espadas que hayan cortado mínimo tres orejas. *** Vergonzoso el hecho que en las puertas de acceso funcionarios de la supuesta Defensoría del Pueblo se apostaran impidiendo el ingreso de menores de 18 años, algo inaudito y que toma visos claros de una persecución intencional por parte de este ente.

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