A pesar de no contar con
genero propio para el lucimiento en la
primera de la FISS
Pablo Hermoso de Mendoza en su debut en Venezuela a hombros, tras cortar las únicas orejas de la tarde de ayer en Pueblo Nuevo. |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Fotos: Fernando Zambrano
SAN CRISTÓBAL (Enviado Especial).- El titulo puede ser un poco sarcástico. Pero
no queda duda que se puede resumir así. Y eso que lamentablemente Hermoso de
Mendoza no ha contado con toros propios para total lucimiento. Es un antes y
después para el toreo a caballo en un país con ansias de ver a plenitud la
belleza del toreo ecuestre. Solo Pablo pudo colocar nombre propio a una tarde
donde por momentos el palco presidencial se pasó de cicatera al momento de la
concesión de trofeos. Pero al final ha quedado la impronta de satisfacción de
los asistentes.
Los toros colombianos
de Juan
Bernardo Caicedo no se prodigaron de muchas opciones para el
lucimiento. Cortos de recorrido y a menos en el tercio final, han lucido una
percha inmaculada de presencia, lo que ha hecho que los espadas hayan tenido
que sacar recursos extras para sacarles provecho. Talavante en su maneras
estáticas e impávidas, El Pino en su voluntad y deseos de
agradar y el mencionado Pablo Hermoso
capítulo aparte en esta historia.
Marcos Peña ha dejado una tarde de contraste. Su primero un serio dije, ha lucido
por momentos ambicioso y decidido, pero no así correcto en la lidia de un toro el
cual necesitó de mayor firmeza de pies y planteamiento acorde a su condición de
mansurrón. Las tandas por la diestra fueron lo mejor de su labor donde las
intermitencias de estas además de su actuación por la zurda dejaron en ascuas
una actuación con altibajos. El espadazo en todo lo alto fulminante despertó la
pañolada del público el cual objetó la presidencia.
El Pino ha estado con altibajos a lo largo de la tarde, a pesar de haber contado con materia de lucimiento para “tocar pelo”. |
En su segundo de nuevo
El
Pino ha contado con genero para “tocar
pelo”. El noble y bravo ejemplar de Rancho Grande ha dejado momentos de
clara disposición con las telas el cual el mencionado torero de San Cristóbal
atiborró de pases atropellados. Las ganas por agradar se encontraron por encima
de la razón de una lidia basada en la ausencia de acople a la embestida del
toro, en especial por la zurda, lado por donde más franco se desplazada el
pupilo de Hugo Domingo Molina. El
infame golletazo dejo en silencio una actuación sin mucho eco en el tendido.
Alejandro Talavante ha pasaportado dos toros de parada condición,
que no fueron impedimento para que el espada extremeño hiciera gala de impávido
y estático valor. En su primero del lote con el capote se le vieron los
momentos más lúcidos, en especial el quite por chicuelinas, de mano baja, para
posteriormente en la muleta su prólogo, con pases por alto aderezado con un
cambio por la espalda hicieron presagiar fiesta. Pero el bello jabonero dijo
nones con la pañosa, “agarrándose al
piso” dejando solo la voluntad y toreo de cercanías de Talavante como
bálsamo a tal condicionante.
Alejandro Talavante en las cercanías de pitones ante el parado jabonero que pecho en suerte. |
El quinto de la
corrida desde su misma salida de toriles no hizo pensar muchas opciones. Y a
las pocas que había se aferró Talavante
en trasteo largo, de mucha exposición en las cercanías de pitones, pero que
ante un público desangelado toda la tarde, poca trascendencia tuvo. La estocada
tendida y el golpe de descabello dejaron en tímidas palmas su actuación.
Le decíamos que Pablo Hermoso ha marcado un antes y
después para el toreo a caballo en Pueblo Nuevo. Afortunados los que asistimos
la tarde de ayer para presenciar el dominio, técnica, exposición y conocimiento
supremo de terrenos por parte de un jinete que ha impuesto como norma la pureza
en el rejoneo.
Con el tercero de la
corrida ha armado espectáculo sobre «Viriato» bello equino el cual enceló con
sus grupas las embestidas de toro en un palmo de terreno clavando dos rejones,
donde su primero lo erró. Pero con banderillas se vino arriba Pablo Hermoso sobre «Disparate» con banderillas clavando al
estribo, rematando dichas farpas con recortes sobre las grupas. Una gozada que se prolongó con «Churrumay» en farpas cortas en un palmo
de terreno para luego rematar labor de rejonazo contrario y caído, cortando dos
orejas.
En el que cerró plaza,
la tónica de su labor no cambiaría matiz, pues el serio jabonero corto de
recorrido, no se dejó de florituras, las mismas que tuvo que extraer a cuenta
gotas Hermoso de Mendoza exponiendo cabalgaduras
en las cercanías nuevamente ante su ejército de caballos toreros. Una pena que
el rejón caído, además de la frialdad del público dejara en leves palmas su
labor, donde el triunfo ya estaba asegurado, y por supuesto la Puerta Grande.
FICHA DEL FESTEJO
Con poco más de dos tercios de
plaza, en tarde calurosa y ventosa, se han lidiado cinco toros colombianos de
JUAN BERNARDO CAICEDO, en su conjunto bien presentados, sosos y a menos en el último
tercio, el cual se dejaron hacer fiesta. Se lidió en 4º lugar un toro de RANCHO GRANDE (Hugo Domingo Molina),
bravo y noble, no del todo aprovechado.
Pesos: 505, 472, 440, 450 y 440.
MARCOS PEÑA “EL PINO” (Palo de rosa y plata), palmas tras petición y
silencio.
ALEJANDRO TALAVANTE (Nazareno y oro), palmas en ambos.
PABLO HERMOSO DE MENDOZA (Vestido a la usanza rondeña)
INCIDENCIAS: En las banderillas destacó Eduardo Graterol y
José Antequera en el 2º y de nuevo Antequera en el 5º. *** Se guardó posterior
al paseíllo un minuto de aplausos en la memoria de varios personajes de la
fiesta brava venezolana, entre los cuales tenemos a “Veneno”, Rigoberto Bolívar
y Ángel Luis Omaña. *** Pablo Hermoso de Mendoza debutó en Venezuela con
«Aredelco» N° 316 de 440 kilos de Juan Bernardo Caicedo.
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