SAN
SEBASTIÁN.- Las corridas de toros podrían desaparecer
en San Sebastián por decisión del gobierno municipal de Bildu (la coalición
nacionalista radical), que no renovará el convenio para ceder la plaza -de
titularidad local- a la empresa taurina que organiza los festejos.
Los gestores de esta empresa aseguran que los
toros han generado un impacto económico de 117 millones de euros (144 millones
de dólares) en 14 temporadas taurinas en la ciudad vasca. La feria, que tiene
lugar con motivo de las fiestas de Semana Grande -en la segunda semana de
agosto-, podría no celebrarse el próximo año, ya que el Ayuntamiento ha
decidido no sacar a concurso la concesión del coso, ahora en manos de la casa Chopera.
El alcalde, Juan Karlos Izagirre, que hasta ahora no se había pronunciado
claramente, ha asegurado hoy que no firmará ningún convenio para la explotación
taurina de la plaza de San Sebastián, ciudad en la que el pasado mes de julio
un grupo de aficionados e industriales guipuzcoanos presentó la plataforma "Toros
en Donosti, Sí".
El regidor donostiarra ha asegurado que "comparte
al cien por cien el discurso antitaurino", según el cual "el
sufrimiento animal no debe convertirse en espectáculo público". En
el lado opuesto, Francisco Tuduri,
portavoz de la plataforma y presidente de la plaza de Illumbe, ha defendido, en
declaraciones a Efe, la pervivencia de los toros porque, entre otros motivos,
suponen un importante motor económico para la ciudad, según se desprende de un
estudio elaborado con datos de la empresa concesionaria.
Según dicho informe, la actividad taurina
desarrollada en Illumbe ha generado un impacto económico de 117 millones en 14
temporadas, a los que habría que sumar los 8 millones (9,87 millones de
dólares) ingresados por las arcas públicas en concepto de impuesto del valor
añadido (IVA), precisa. También estima que a lo largo de este período, es decir
desde 1998 hasta 2011, cerca de 890.000 personas han acudido a algún festejo
taurino en esta plaza, por la que, en sus quince años de historia, han pasado
las principales figuras del toreo.
Los detractores de las corridas de toros en
San Sebastián alegan la baja entrada registrada este año en las gradas de Illumbe,
aunque sus defensores recalcan que, en todo caso, ése es un problema que
concierne sólo a la empresa adjudicataria, que no tiene ningún tipo de
subvención pública, tampoco del Ayuntamiento.
Tuduri reconoce que hay menos espectadores en la plaza donostiarra, lo que,
según dice, ocurre en toda España, aunque insiste en que eso es algo que afecta
únicamente al empresario. "En el momento en el que no sea viable
económicamente no se seguirá dando, pero nadie tiene por qué entrar en ese tipo
de disquisiciones", denuncia Francisco
Tuduri.
"No entiendo por qué el alcalde -Juan Karlos
Izagirre (Bildu)- tiene que preocuparse tanto de que haya menos gente en los
toros" cuando a San Sebastián "no
le cuesta nada" su organización y, en cambio, sí le reporta "mucho",
añade.
El presidente de Illumbe teme que la intención
del Ayuntamiento de potenciar el próximo año el uso deportivo de Illumbe implique
el desmantelamiento de toda la estructura taurina. "Ésa es la forma de quitar,
por la vía de los hechos, los toros en San Sebastián", denuncia Tuduri, quien recuerda que desde hace
cinco años en Illumbe ya hay más actividad deportiva que taurina y ha quedado
demostrado que ambas son "compatibles".
La posibilidad de que los festejos taurinos
desaparezcan en San Sebastián ha estado muy presente en la feria de este año,
que finalizó el viernes con una ovación unánime y muy sentida del público y en
la que destacaron algunos gestos como el de Antonio Barrera, quien toreó con una ikurriña -la bandera vasca-
como muleta. / EFE
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