Torero
y ganadero
El
espada potosino gusta de saber lo que deja en la memoria del aficionado y de
las empresas para ir a más
ADIEL
ARMANDO BOLIO
Especial para
VUELTA AL RUEDO
Luego de que el matador de toros potosino Fermín
Rivera abriera su campaña en 2020 toreando el 1 de enero en Apizaco el ganado
de La Antigua, en plática que sostuvimos con él, nos habló de entrada del
balance que tuvo en 2019.
“Fue un año importante para mí, siempre hay que
ver el presente que uno tiene y renovar yendo hacia más y lo disfrute mucho,
tarde a tarde sentí que iba creciendo como torero, en número de festejos fue
bueno, a pesar de que la actualidad en la Fiesta de los Toros es complicada y
aun así toreé 15 corridas y seis festivales, estuve como siempre muy metido en
el campo y al final se cerró con buenas apariciones en la Plaza México”,
comentó el torero.
Llegar al final de una campaña con más corridas
que los demás, no quiere decir que se sea el mejor, pues lo que importa es el
contenido y la trascendencia.
“Estoy de acuerdo con ello, obviamente uno es
profesional y lo que se quiere es
torear, esto es una profesión, pero también existe ese punto de búsqueda de la
calidad en las actuaciones y que sean referentes, siempre es complicado jugarte
la vida tantos días y que tienes que estar a un nivel importante y de algunos
años para acá los compromisos la ubicación en el escalafón ya no es tan
relevante como antes. Yo no me fijo mucho en la estadística, me gusta saber lo
que dejo en la memoria del aficionado y de las empresas para ir a más,
esperando por ello que 2020 sea mejor todavía”.
Fermín Rivera es torero y ganadero ¿Cómo mediar
entre ambas actividades?
“Las compagino. El torero debe vivir cerca del
toro y cuando no estoy en el rancho estoy en otras ganaderías, conviviendo con
ganaderos y con compañeros de profesión, de quienes se aprende en los
tentaderos. Yo tengo la oportunidad de tener una dehesa familiar y estar al
frente de ella ha sido una formación para mí como torero. Ser ganadero no es
fácil, tiene mucho mérito”.
Finalmente, Fermín nos confesó que aún tiene una
asignatura pendiente, hacer campaña europea y confirmar en Madrid. Cada año lo
busca y espera que ahora se pueda.
DATO
Afirma Fermín Rivera que estar al frente de una dehesa ha
sido una formación para él como torero, pues ser ganadero no es fácil, tiene
mucho mérito
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