Radicado desde hace par de años en suelo
español
Bien de salud, y en especial con muchas expectativas de cara al 2021, así se muestra el matador de toros en el retiro, “El Tovareño”. |
RUBÉN DARÍO
VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Desde hace poco más de dos años el matador de
toros en retiro, Nerio Ramírez “El Tovareño” se encuentra en suelo madrileño,
donde de alguna u otra manera ha tenido contacto permanente tras su señora esposa,
Doña Filomena Orellana, ser española. En todo este tiempo el veterano matador
extraña su tierra, ese terruño tovareño donde ha hecho familia, y que tiene
repartida en varios frentes, en España su esposa, hija y su nieto, además de su
hijo mayor, el subalterno Fabián, y en suelo peruano el matador Rafael, quien
ha hecho de esta su segunda patria.
De todo esto tenemos que este miércoles, en horas
de la mañana, recibimos a través del whapsatt la videollamada del espada en mención,
emotiva por demás, pues teníamos largo rato que no entablábamos conversación. «Estamos
bien, con mucho frio, en una localidad próxima a la capital madrileña como es Navalcarnero,
a poco menos de 30 min de la ciudad. Extrañando Venezuela, pero con la firma
esperanza que la situación por allá cambie», deja entrever el señalado
coleta.
Caminando rumbo a buscar del colegio a su nieto,
Nerio Ramírez hace balance y repaso de varios de los paisanos que han estado
por allá. «Don Ricardo Ramírez –tío del polémico empresario y ganadero merideño-
se encuentra muy bien de salud, más rebajado y en especial, con muchas ganas de
irse por allá, ya tienen más de un año largo por acá, producto de su cuadro delicado
de salud, que oportunamente fue atendido acá, cuando se encontraba de
vacaciones en el marco de la Feria de San Isidro. Voy a despedirle pues tienen
pautado regreso a Venezuela para estos días… de los demás, todo bien por acá, cuidándonos
mucho del COVID-19, que lamentablemente nos tiene a todos acá parados, y sobre
todo en el ámbito taurino, con una incertidumbre terrible. Miles los toros y
vacas bravas que todos los días están mandando al matadero, una crisis jamás
vista».
En relación con la carrera de su hijo, el matador Rafael
Orellana, en Perú tiene para estos días varias actuaciones programadas, del
cual es muy celoso en mencionarlas, pues allá también la situación está muy
delicada en cuanto a la pandemia. «Torea el 25 de diciembre y el 1º de enero
en una plaza portátil de la periferia de Lima, pero hasta el momento no se ha
develado por ellos nada, para evitar posible achaques de parte de las
autoridades sanitarias peruanas. Por lo demás fue poco lo toreado con relación a
otros años».
Interesante el hecho que el propio espada señale
que no haya dejado olvidada su rutina para mantenerse a punto física y
mentalmente, como profesional del toro que siempre ha sido. «Yo acá
hago mi trotecito de 5 o 6 kilómetros dos veces por semana, para mantenerse,
pues si se descuida uno por acá, tarde o temprano lo vez a uno con un
bastoncito como a los demás. Trato de ejercitarme como siempre lo hecho, y eso
le hace a uno sentirse bien».
Mientras tanto, el recordado diestro de la Sultana
del Mocotíes no olvida a quienes de alguna u otra manera han sido parte
importante de su trajinar… «Sigo permanentemente por internet y por el móvil
a través de los grupos en los que estoy, en especial VUELTA AL RUEDO, todas las
noticias que depara la actualidad taurina venezolana, que es poca. Escucho por
internet los programas taurinos de Rodrigo y tuyo así como el de Garapullo,
todos los domingos. Lo están haciendo muy bien, pues muchos acá desde la
distancia le seguimos la pista a todo lo que por allá va haciéndose en materia
taurina».
Se despide con un halo de nostalgia y quebrándosele
la voz, esa misma que se resguarda de poco más de 2 ºC en la que se encontraba
al momento de mantener esta conversación. «Saludos a todos por allá, que tengan una
feliz navidad y próspero año 2021, que se cuiden mucho, en especial a Luis Alfonso
Segura, Leonardo Salas, Carlos “El banderólogo” Briceño Vera, a tu papa
Marcialito, a Freddy Ramírez, el cual siempre mantengo contacto, y en especial
a toda esa afición merideña y tovareña en especial, que está a la expectativa
de que esta situación cambie en el país. Dios quiera, más pronto que tarde al
suceder ello, cuenten que seremos los primeros que estaremos por allá».
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