Los diestros españoles David Fandila "El
Fandi" y Antonio Ferrera salieron hoy a hombros por la puerta grande de la
plaza de San Isidro Labrador, en el cierre de la feria de la ciudad de
Latacunga, en el centro de los Andes de Ecuador. "El Fandi" alcanzó
un indulto y Ferrera tres orejas en un cierre de feria apoteósico en el que se
lidiaron toros de las dehesas de Huagrahuasi, Triana y Ortuño.
Ferrera encaró al primero de la tarde desde los
medios e invitó a "El Fandi" al tercio de banderillas, para proseguir
con muleta por doblones y de trinchera, con muletazos soberbios y de gran
técnica por ambos pitones, con un toreo lento y clásico para concluir de
estocada certera y ligeramente trasera de efecto rápido. Dos orejas.
"El Fandi" saludó al segundo, de
Huagrahuasi, con verónicas ceñidas y de gran factura, pero en el tercio de
muleta el toro presentó problemas en una pata lo que obligó al diestro a
abreviar con el estoque.
El francés Sebastián Castella recibió al tercero
de la tarde con verónicas a pies juntos, remate de revolera y al quite por
chicuelinas rematadas con media verónica, mientras que con la muleta por alto,
tandas con la derecha, pase de pecho y molinetes, pero el toro se rajó y fue
despachado con una estocada caída y fulminante. Una oreja
El cuarto fue recibido por Ferrera con verónicas y
tras las varas al quite por chicuelinas y remate en revolera, para seguir con
la muleta con doblones y obligar al toro a humillar, tanda de derechazos en los
medios y con la izquierda muletazos largos y de transmisión adornados con
molinete, tandas bien ligadas para finalizar con un pinchazo y estocada certera
aunque caída. Una oreja y palmas al toro en el arrastre.
David Fandila recibió al quinto con una larga
cambiada y luego por verónicas de hinojos, cubrió el tercio de banderillas de
manera espectacular y con la muleta con pases por alto, derechazos, pase en
redondo y el de pecho, se adornó con molinetes de rodillas y a pie que remató
en martinete.
Una fuerte petición de indulto desde las gradas
causaron que el diestro siguiera con la faena con tandas por ambas mano y el
adorno en manoletinas que causaron fervor y motivaron a la autoridad a otorgar
el indulto. Orejas y rabo simbólicos.
El ultimo de la tarde fue para Castella, quien
hizo el saludo con verónicas y ya con la muleta en los medios tandas de derecha
ante gran recorrido del toro, naturales profundos y el cambiado por la espalda,
sello de fábrica del torero. Eso fue lo mejor de la faena ante un toro precioso
de hechuras pero carente de fuerza. Siete pinchazos y un aviso antes de la
estocada final. Palmas. / EFE
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