Juan Bautista |
JAVIER LÓPEZ
los tres toreros que hicieron el paseíllo
hoy en Las Ventas, y cuyas seis faenas fueron silenciadas, abandonaban la plaza
visiblemente decepcionados por el poco juego que ofrecieron los toros de la
ganadería de Baltasar Ibán.
El primer espada, Diego Urdiales, confesaba que salía "derrotado" por "el
esfuerzo en balde" que realizó con sus dos toros. "Esto es increíble. No me
embiste un toro en Madrid ni a la de tres, pero bueno, esto es así, por mi
parte no me he guardado nada, y eso, al menos, me deja la conciencia
tranquila", añadió el riojano.
Al francés Juan Bautista también se le veía contrariado por "las pocas oportunidades" de
lucimiento que tuvo. "No ha podido ser. Ni uno ni otro toro
han servido para lucir el toreo que llevo dentro. Es una pena",
reconoció brevemente el francés.
El tercero espada, David Mora, coincidía también al considerar que "la
firmeza y el esfuerzo no sirven de nada cuando los toros no transmiten.
Así
es el toreo -continuó- otras veces salen embistiendo, pero en el caso de hoy
creo que se ha visto que era imposible. Mi primero era un toro muy mentiroso,
que a la mínima que se le apretaba se desentendía y era imposible ligarle los
muletazos; y el sexto tenía un 'peligro sordo' del que sólo te das cuenta
cuando te pones delante". / EFE
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