GONZALO I.
BIENVENIDA
@GonIzdoBienve
Diario EL
MUNDO de Madrid
La lluvia retrasó 24 horas la cuarta corrida de la
Gira de Reconstrucción de la Fundación Toro de Lidia. Sebastián Castella con su
retirada dejó un hueco en la corrida de Zalduendo en Antequera el 9 de octubre
que será ocupado, aunque parezca increíble, por Finito de Córdoba. El criterio
seguido ha sido seguir el escalafón de 2019, según parece.
La única oreja del festejo la cortó Jorge Isiegas
en el segundo toro de la tarde tras una gran estocada. Lo recibió con mucha
voluntad ganando terreno hacia delante hasta rematar con una media. El toro
resultó bronco, sin ritmo, aunque con la única virtud de la humillación. El
joven torero estuvo muy dispuesto y se fue como una vela tras la espada. De
nuevo fue todo voluntad ante el cuarto, un toro noble pero sin fondo real para
romper hacia delante (palmas tras aviso). Esa última faena de la tarde fue
brindada al empresario automovilístico y apoderado Nemesio Matías.
Paco Ureña saludó al tercero de Daniel Ruiz con
suma serenidad por delantales. Llamó la atención en el quite por gaoneras. La
cara bizca del negro toro planeó en la revolera final generando esperanza.
Brindó a Pablo y a Luis Manuel Lozano como representantes de esa gran
universidad del toreo que es la Casa Lozano. El estático por estatuarios y un
pase de la firma con gusto. Después llegó la mejor tanda de la tarde, varios
naturales de buena expresión que hicieron seguir confiando en el toro. Sin
embargo, se vino abajo demasiado pronto. Terminó defendiéndose llegando a
derrotar en la pierna de Ureña. Con la espada volvió a estar desafortunado
(saludos).
Paco Ureña hizo un esfuerzo con el primero de la
tarde. Un toro de Daniel Ruiz sin cuello ni buena condición. Óscar Bernal trató
de ahormarlo en el caballo con un puyazo en el sitio. Ureña lo trató como si
fuera bueno. No paraba de escarbar, embestía a taponazos. Muy decidido se
mostró el murciano con la franela extrayendo naturales de mucho mérito ante el
geniudo oponente. No dio la misma imagen con la espada con la que estuvo muy
desconfiado (silencio tras dos avisos).
Capítulo aparte merecen los banderilleros que
rayaron a un gran nivel toda la tarde. Sergio Aguilar bregó a la perfección con
el cuarto. Jesús Montes, Curro Vivas y Azuquita se tuvieron que desmonterar por
dejar grandes pares de banderillas. Jesús Arruga mostró su solvencia habitual.
La siguiente parada de la gira será en Antequera
el jueves 8 de octubre con El Fandi y López Simón con toros de García Jiménez.
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