Para la Feria del Sol 2016
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| Vale la pena que Tomás Martínez, integre la plantilla de toreros venezolanos a estar presente en la Feria del Sol 2016. Foto: Aníbal García Soteldo |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
En el mar de dificultades y contratiempos por las que navega
el toreo en Venezuela, no es menos cierto señalar que el formarse y soñar con
hacerse torero es precisamente eso, un sueño, donde para llegar al máximo grado
en tauromaquia es un quinario de obstáculos a vencer. Siempre lo ha sido, mucho
más ahora.
Uno de esos toreros que ha destinado un sueño y que se
destaca entre los jóvenes espadas a tomar en cuenta es el diestro Tomás Martínez,
quien de lo más noveles matadores de toros el que más amexicanado concepto
tiene, fruto de su vasta y rica formación como novillero en suelo azteca, donde
pisó con la fuerza que impone la ambición del éxito cosos como Guadalajara,
Monterrey, Aguascalientes, la Plaza México, sin dejar a un lado pasantía por
arenas peruanas y nacionales.
Doctorado el año pasado en su segunda tierra como es Tovar,
de manos del español Sánchez Vara y el testimonio del valenciano Eduardo
Valenzuela, ante toros de La Cruz de Hierro, esa tarde apuntó lo que ha venido
in crescendo demostrando, una evolución ante el toro que merece el mejor de lo
elogios y reconocimientos, como bien se le pudo observar en su último paseíllo,
en la ciudad de Barinas, en festejo, donde si no es por la espada, corona un
triunfo de clamor.
Es por ello que ante la cercanía de anuncio de carteles para
la Feria del Sol 2016 (4 al 9 de febrero) que su nombre, por méritos propios
sea tomado en cuenta, primero por ser novedad como matador, pues aún no ha
debutado desde que asumió la responsabilidad de ser envestirse el traje en oro;
luego su reconocimiento como cantera del toreo merideño, y más importante aún,
que no dudamos que salga a dejarse nada delante del toro, que es y quien
debería ser el que tomara la palabra.
Por los momentos, mucho campo en ganaderías nacionales, así
como un entrenamiento metódico y consecuente, el que tiene en agenda un joven,
que así mismo tiene miras volver a México en el 2016 y abrirse paso. Última
palabra señoras y señores, la tiene la empresa de turno…
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