Tras cambio de cartel a última hora
Vanegas, el único que “tocó pelo” este domingo en El Vigía. Foto: José León |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Un parte médico “misterioso” anunciaba por la mañana de este
domingo la caída del cartel del espada tovareño Rafael Orellana de la corrida extraordinaria
de El Vigía. La Empresa Taurina del conocido aficionado Mario Valero, ni
siquiera se dignó a colocar en taquillas el motivo ni los sustitutos del
espigado coleta, a lo que muchos se extrañarían ver el paseíllo con los nombres
de los diestros venezolanos César Vanegas, Eduardo Valenzuela y el francés debutante
Jonathan Veyrunes, el único titular del cartel.
El fuerte sismo de la tarde, ahuyento tal vez los
aficionados que bajaban desde Mérida, y más si para tal efecto cerrarían los túneles,
para lo que sería poco menos de media plaza de aforo en tarde caluroso, para
ver al trio de coletas, en la lidia de ejemplares del hierro de Campolargo,
justos de presencia, como acostumbran nuestros ganaderos para las citas con las
portátiles.
Cartel raro y un despropósito que para dicho festejo unos matadores
despachen dos toros y otros, uno. No debe ser así la cosa, por más que sea una
plaza de tercera, donde las exigencias son mínimas se puede decir.
Veyrunes abrió plaza, en labor por momentos de interés. Al final
recibiría palmas, mientras que en el cerró función, poco destellos tuvo su
labor, por la que se le silencio tras aviso.
Los espadas nacionales Vanegas y Valenzuela mejor disposición
y más compacta fue su labor. El robusto espada de Seboruco cortaría una oreja –la
única de la función- tras una labor variada contando para ello con el ejemplar
más potable del envío. Por su parte el valenciano Valenzuela, perdió los
trofeos por fallar con la espada, trasteo que caló en los tendidos no del todo
cincelado con el acero.
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