Diego Urdiales |
GUILLERMO LEAL
El mexicano Fermín Rivera cortó una merecida oreja en la
cuarta corrida de la temporada en la Monumental Plaza México y su paisano
Fermín Espinosa "Armillita IV" se fue de vacío, en tanto que el
español Diego Urdiales cayó de pie, enseñó lo buen torero que es, sobrio y
elegante, y por fallos con el acero se esfumaron los trofeos, tras haber
sustituido esa tarde a Enrique Ponce, lesionado de una rodilla.
Con un cuarto de entrada y alrededor de diez mil personas se
lidió un toro, magnífico para rejones de Fernando de la Mora y seis de Bernaldo
de Quiróz, muy bien presentados. Estuvieron muy definidos y algunos demostraron
mucha clase, como el primero de la lidia ordinaria y el quinto. Los otros se
dejaron lidiar, con mejor suerte unos que otros.
El rejoneador Alejandro Zendeja, que logró un billete de la
lotería, dejó ir la oportunidad. A pesar de que le tocó el toro de Fernando de
la Mora, con clase, bravo y con templanza, no estuvo a la altura, pues no tuvo
puntería y lo mató de un feo rejón de muerte. Se silenció su labor.
Urdiales, que confirmó la alternativa, dejó una grata
impresión de sus cualidades. Al astado de la confirmación, lo toreó con nota,
ya que su trasteo reunió elegancia, sobriedad y toreó sin chabacanerías, con la
gente entregada. Pero fue una pena, ya que mató de media estocada desprendida y
descabello en cuatro ocasiones. Pese a ello, la gente le ovacionó con fuerza y
le hizo dar una vuelta al ruedo.
Con el cuarto toro, que se vino a menos y se rajó al final,
siguió en el mismo plan, con destellos de indudable calidad para ser
ovacionado. Buen torero.
Rivera, con el segundo, al que le faltó castigo, llegó
áspero, a pesar de que se mostró con deseos, aunque sin llegarle a la gente.
Mató de estocada y cinco descabellos con aviso, silencio.
Se superó en el quinto, al que le elaboró una faena con la
buena clase que reúne hasta convencer a la gente. Dio un pinchazo y estocada y
recibió una oreja, que le valió algunas protestas que fueron acalladas. Este
torero camina.
"Armillita IV", sin suerte, dejó la impresión que
pudo haber hecho más a su lote, integrado por el tercero y el sexto. En ambas
lidias tuvo destellos, pues tiene técnica y no mala clase. Sin embargo le falta
rodaje y un poco de experiencia. No convenció al público que el pitó en ambos
ejemplares, en el primero con un aviso. De los toreros de plata se lució en
banderillas Héctor García en el tercero de la lidia ordinaria. / EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario