Los
doctores Val-Carreres, Mulet, Fuentes, Masegosa, Carbonell... participan en la
última jornada del postgrado.
Redacción
APLAUSOS
Este lunes ha tenido lugar la jornada de clausura
del curso de posgrado “Asistencia Médico-Quirúrgica Integral a los Heridos por
Asta de Toro” en la Facultad de Medicina de la Universidad de Valencia.
La mañana arrancó con la biomecánica lesional
según la morfología del asta del toro y el tratamiento en la enfermería de las
heridas de partes blandas con exploración de las trayectorias de la herida a
cargo del Dr. Fernando Carbonell, codirector del curso.
A continuación, el profesor Juan Martínez-León,
catedrático de Cirugía, presentó las actitudes a tomar ante cornadas vasculares
dentro y fuera del ruedo; especial mención se ha prestado a lo largo del curso
a las heridas en los festejos populares, un aspecto importantísimo debido a que
tanto o más mortales que las heridas producidas en el interior del ruedo pueden
ser las producidas en los festejos taurinos populares.
Posteriormente el Dr. Carlos Val-Carreres ha
presentado los traumatismos de cara y cuello. El profesor Val-Carreres ha
estado recientemente en boca de los aficionados por su extraordinaria actuación
en la cogida de Mariano de la Viña, pero nadie olvida aún su magnífica mano
salvadora también en otros casos terribles como las cogidas de Padilla o Juan
Ramos o tantos otros en relación a graves traumatismos faciales o cervicales.
El trauma abdominal ha sido el tema tratado en la
siguiente conferencia por el Dr. Octavio Mulet, jefe de la plaza de la
enfermería de la plaza de toros de la Maestranza de Sevilla. En su conferencia
ha hecho especial hincapié en el abordaje del abdomen en el contexto del
tratamiento del paciente con politraumatismo, como deben ser considerados todos
los heridos por asta de toro. Asimismo, ha planteado la utilización de los
medios más modernos en el abordaje de este tipo de heridas como es el papel de
la laparoscopia o la ecografía FAST.
Muy relacionada con la anterior ha sido la
conferencia del profesor Vicente Plá de la Universidad de Valencia y de la
Unidad de Coloproctología del Hospital Clínico de Valencia, sobre las heridas
perineales. Aspectos muy relevantes de su conferencia y que han animado a un
interesante debate han sido la necesidad o no y el momento oportuno en el que
debiera hacerse, tanto de la derivación intestinal como de la reconstrucción
del aparato esfinteriano.
La mañana concluyó con la presentación y discusión
de numerosos casos clínicos a cargo de los profesores Dr. González-Masegosa,
jefe de la enfermería de la plaza de toros de Albacete, el Dr. Rafael Fuentes,
jefe de la enfermería de la plaza de toros de Jaén y Úbeda, el Dr. José Eduardo
Pérez Folques, jefe de la enfermería de la plaza de toros de Algemesí, y el Dr.
Jesús Cuesta, anestesiólogo de la plaza de toros de Albacete.
PONCE Y BENLLOCH EN LA CLAUSURA
La tarde se inició con la conferencia de nuestro
director, José Luis Benlloch, pronunciando una conferencia sobre la relación
entre la prensa y los cirujanos taurinos, y, seguidamente, el maestro Enrique
Ponce ha disertado sobre la visión del torero ante los cirujanos taurinos,
adentrándose en la relación que ha existido desde los inicios de la tauromaquia
entre médicos y toreros, hasta la actualidad y su experiencia personal. Un
aspecto muy relevante y muy original de su conferencia ha sido la influencia
que haya podido tener la evolución y modernización de la cirugía sobre el arte
de torear.
La tarde y, por tanto, el curso, ha concluido con
la entrega de diplomas por parte del maestro Enrique Ponce, tras unas palabras
finales por los codirectores del curso, doctores Luis Sabater y Fernando
Carbonell, el presidente de la Sociedad Española de Cirugía Taurina, Dr.
Pascual González Masegosa, el director académico de títulos propios de la
Universidad de Valencia, Pedro Morillo, y el secretario de la Facultad de
Medicina de Valencia, profesor Luis Aparicio.
PONCE, A LOS MÉDICOS TAURINOS: “Gracias por
poner su talento, ciencia y entusiasmo al servicio de la tauromaquia”
El Salón de Grados de la Facultad de Medicina de
Valencia ha acogido este lunes por la tarde el acto de clausura del curso de
postgrado sobre “Asistencia Médico-Quirúrgica Integral a los Heridos por Asta
de Toro”, celebrado con gran éxito de participación los cuatro últimos lunes,
21 y 28 de octubre y 4 y 11 de noviembre. Al evento ha acudido como invitado de
honor el diestro Enrique Ponce, quien ha mostrado su gratitud a los médicos
taurinos “por poner su talento, ciencia y entusiasmo al servicio de la
tauromaquia”, añadiendo en su intervención: “Gracias por ayudarnos a superar
los miedos cuando caemos en sus manos, que es algo que siempre, más tarde o más
temprano, acaba sucediendo. Gracias por su tarea nunca bien remunerada”; y,
llegado a ese punto, subrayó convencido: “Aprovecho para reivindicar desde aquí
su mejor remuneración. Es justo y necesario”.
Ponce resaltó también la trascendencia del curso
organizado: “Es la primera vez que la tauromaquia entra en la Universidad
pública. La cultura de los pueblos no se debe ignorar en las universidades. Más
de 3.000.000 de personas en España vieron este año corridas de toros. El toreo
es el arte entre las artes. Por eso es importante que se prediquen sus valores
en universidades públicas, es decir, de todos”.
El maestro, que recordó que este último octubre
“ha confirmado la cruda realidad de un rito en el que todo lo que sucede es muy
de verdad”, admitió: “No entro igual a una enfermería cuando conozco a los
doctores que cuando no. Conocerles te aporta una tranquilidad tremenda. Por
eso, desde mi experiencia, estrechar lazos entre los toreros y los médicos es
importante. Desde aquí animo a que en próximas citas de este curso departamos
juntos toreros y cirujanos. Igualmente es importante que los toreros y los médicos
nos preocupemos por las dotaciones de las enfermerías, por los trayectos más
cortos para llegar a ellas, por la formación de quienes nos transportan cuando
nos desbarata un toro, por habilitar camillas especiales, por instruir al
personal sobre cuándo hacer torniquetes y cuándo no… todo eso, en definitiva,
tranquiliza y convence al torero. Sin todo eso no deberían darse festejos
taurinos, pero todos sabemos que, sin embargo, se dan. Para algunos compañeros
es un tema tabú, pero no entiendo por qué: ¡es nuestra vida la que está en
juego!”.
Ponce concluyó resaltando que el toreo “evoluciona
gracias a que los toreros se juegan la vida, pero avanza igualmente gracias a
que los médicos taurinos velan como nadie por nuestras vidas. ¡Muchas gracias
de nuevo!”, exclamó en medio de una sonora ovación.
PERIODISMO Y TOROS
Asimismo, nuestro director, el periodista José
Luis Benlloch, habló de la relación entre los médicos y los periodistas
taurinos. “Las noticias que disparan los marcadores de visitas, las que concentran
mayor atención no solo de los medios de comunicación taurinos sino de los
generalistas, son aquellas que manan de las enfermerías de las plazas de toros.
Eso obliga a los periodistas a dar una información calibrada, mesurada, exacta
y respetuosa con la intimidad de los afectados, pero puntual, rápida y clara,
por el bien de todos”.
“El periodismo taurino, que en algún momento ha
podido tener mala prensa entre la prensa -añadió Benlloch-, es un periodismo
honorable, especialmente honorable si se compara con el de otros ámbitos
periodísticos. Lo que ocurre es que, afortunadamente, la objetividad en la
crítica taurina no existe. No puede existir en un arte vivo y dinámico como el
toreo. Que cada crítico tenga su propia visión del espectáculo es una suerte;
al final es el criterio de los lectores el que anima a los aficionados a leer a
unos u otros”.
NUMEROSOS MÉDICOS TAURINOS
No han faltado al epílogo del curso el doctor
Pascual González Masegosa -presidente de la Sociedad Española de Cirugía Taurina,
que resaltó la brillantez del curso celebrado y su trascendencia de cara al
futuro- ni sus colegas Carlos Val-Carreres -Zaragoza-, Octavio Mulet -Sevilla-,
Rafael Fuentes -Úbeda-, Ana Cristina Utrillas -Teruel- o Amador y Elsa Jiménez
-Cuenca-, entre otros. Tampoco lo han hecho los organizadores del curso, los
doctores Fernando Carbonell -Valencia- y Luis Sabater, junto al secretario de
la Facultad, el doctor Luis Aparicio.
También se vio en la sala a matadores de toros
como Santiago López o Rubén Pinar, a numerosos aficionados y, cómo no, a los
veinticinco alumnos matriculados en el curso, que recogieron como colofón del
acto los diplomas que acreditan su participación en el mismo. / Ángel Berlanga – Redacción APLAUSOS
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