Los hombres del conocido picador
le dejaron solo en el ruedo, en la lidia de sus dos astados, en retaliación con
el empresario del festejo.
Sin duda alguna que la fiesta brava venezolana vive momentos penosos, tanto dentro como fuera de sus filas, tras los hechos recientes acaecidos en Seboruco y Tovar. Foto: José León |
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ
@rubenvillafraz
Una verdadera vergüenza al traje de luces, a la
caballerosidad que implica quien lo porta, y mucho más el gesto dantesco de
sucederse en el propio ruedo, así se puede calificar la acción
tomada el pasado domingo por parte de la cuadrilla de picadores y subalternos que representa el varilarguero José Benítez “Maraco” en el curso
de la II corrida de la feria en honor a Santa Rosa de Lima, en la tachirense
población de Seboruco.
Tal y como relata en nota de prensa que hace llegar el
propio torero tovareño Rafael Orellana a esta redacción, el hecho ocurrió en el ruedo de la
portátil Plaza de Toros La Venezolana, cuando de manera censurable el
mencionado grupo de “toreros de plata” se plantaron en anexo del patio de cuadrillas,
tras impase surgidos entre estos y la empresa organizadora, además del diestro
César Vanegas, quien sabiendo la situación ya había llevado su propia
cuadrilla. En este caso cabe la pregunta para el diestro Orellana, ¿se
justifica entonces que haya salido a torear sin cuadrilla por culpa de
terceros?
Es el propio Orellana quien aclara no tener ningún impase o
roce con cuadrilla o banderillero en particular en sus más de dos lustros de
carrera como torero, abogando más bien por mantener buena relación y
camaradería con estos, como compañeros en el ruedo y de profesión.
Deja en el aire el matador en mención la pregunta a los
empresarios de la venidera Feria de Tovar a dar inicio este jueves por la
noche, con la presencia de esta misma cuadrilla de picadores y banderilleros si
esta ¿tomará la misma actitud para con las personas de confianza de Orellana
este viernes, cuando esté actuando en el marco de la primera corrida de abono?
De ser así, hacerlo saber con anterioridad Sr. José Benítez, y no aprovechar el
vergonzoso y respetable trance previo al paseíllo para tomar medidas poco
honorables con el traje de torero que portan.
CITAN ANTE AUTORIDADES MUNICIPALES NOVILLERO CAMILO CEPEDA Y SU
REPRESENTANTE ANTE HECHOS DEL PASADO SÁBADO
No cesan en atacar la fiesta brava personeros adscritos a la
Defensoría del Pueblo y al Consejo Municipal de Protección de Niños, Niñas y
Adolescentes del Municipio Tovar tras los hechos que el pasado sábado tuvo
lugar en el callejón del Coliseo El Llano. En el mismo se encontraba el
novillero merideño Camilo Cepeda, junto a su señora madre, observando el
festival organizado por COREALSA, ente cuya accionista mayoritario es la Gobernación
del Estado Mérida, cuando de manera intempestiva personal de los entes
señalados líneas atrás irrumpieron en plena lidia del tercer novillo proceder desalojar
por la fuerza al joven de dichas dependencias, lo que ya raya en el absurdo más
infame que se pueda recordar en la historia del toreo en nuestro estado.
Ante la respuesta desaprobatoria de aficionados presentes en
el callejón y en el tendido, y verse en el más completo ridículo, el que estos
mismos cesaran en sus intenciones, no obstante han emitido boleta de citación
tanto a la Sra. Nelliana Rodríguez de Cepeda –madre del novillero- para que
expliquen, cual delito tipificado, su presencia por ser menor de edad e incluso
actuación en el señalado festival, tras invitación en el saludo de capa que
hizo el matador de turno, Leonardo Rivera.
Será este jueves a las 10:00 am cuando arropados por la nutrida
presencia de aficionados y alumnos de las escuelas taurinas de Mérida y la
propia Tovar, cuando dé lugar la señalada cita, ante lo que representa la
prohibición de todo menor de 18 años de edad de presenciar cualquier festejo
taurino, acción esta ilegal desde todo punto de vista, que requiere la unión
más que nunca de todos los estamentos que hacen vida taurina, por lo inconstitucional
y anacrónica, que una vez más servirá de termómetro para de una vez por todas
tomen consciencia estas supuestas autoridades que la fiesta brava más que nunca
está viva en el sentir de quienes gustamos de ella, bajo los parámetros, leyes
y ordenanzas propias que la rigen, sin imposiciones ni mucho menos caprichos
del todo ya conocidos y con qué propósitos.
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