martes, 7 de febrero de 2012

TOMAS CAMPUZANO: “Creo que los públicos actualmente son más apagados, viven menos la fiesta…”

Su solo paso por ruedos de Venezuela marcó una época, protagonista de numerosas gestas, a Tomas Campuzano la afición venezolana le recuerda con mucho cariño, y en este caso su regreso, en lides de asesor del matador Erick Cortés, ha valido para reverdecer el recuerdo de su legado.
RUBÉN DARÍO VILLAFRAZ

SAN CRISTÓBAL (Ven.).- «La verdad que los años que estuve como torero por estas plazas fueron muy bonitos, de mucho esplendor para el toreo en Venezuela, y sobre todo, desde aquella tarde de los famosos indultos en este ruedo, con los toros de Torrestrella en 1982 fue una antes y después para mi carrera. Esa tarde, la de los indultos, sirvió para que Venezuela resucitara y el público se metiera otra vez en las plazas y hablara de toros. Hasta los presidentes de gobierno acudían a las corridas a verlas, lo que le daba colorido y emotividad. Tuve la suerte de todo eso vivirlo, de ser triunfador de casi todas las ferias nacionales que se resume en 5 Rosarios de Oro de la Virgen de La Chiquinquirá en Maracaibo, la Pluma de Oro de la Corrida de la Prensa, 4 Tabacos de Oro de la Feria de San José en Maracay, el Sol Oro en la Feria del Sol en la ciudad de Mérida, la Municipalidad de Valencia, la verdad numerosísimos trofeos, pero sobre todo el reconocimiento de todos los aficionados y publico, de ganaderos, de toreros, sin duda lo más bonito que se lleva uno», es a primeras leguas el resumen de la hoja de vida en primera persona del diestro de Gerena, Tomas Campuzano.

Y no solo fue Tomas un “consentido” de los públicos venezolano, su hermano José Antonio, con menor recorrido por nuestras arenas dejó huella indeleble a su paso a mediados de los `70 y bien adentrados los `80. «Tanto mi hermano como yo nos vaciábamos en la plaza todas las tardes, con el bueno, con el malo, con el regular, con todos le intentábamos hacer faena y claro eso a la larga tiene premio y eso fue el reconocimiento de todo el mundo taurino venezolano».

Como persona que ha vivido de cerca la transición de lo que ha implicado el toreo en estos últimos tres decenios, Tomas no se queda corto en analizar diversos factores, pero en especial uno en particular: «Hombre, se le ha perdido o falta un poquito más de emoción. Creo que los públicos actualmente son más apagados, vive menos la fiesta, lo que es un elemento fundamental pues el toreo siempre ha sido emoción e improvisación. El toro tiene que moverse mucho para que el torero tenga la capacidad para improvisar delante de él durante la lidia y faena para que el conecte con lo que se esta haciendo en el ruedo. Creo que en aquellos años, no sé si transmitían más o sentían más lo que estaban haciendo y transmitían más a los públicos, lo que se traducían en que disfrutaran más. No sé si en aquella época los toreros torearan peor que ahora, porque ahora se puede decir que se torea perfecto, y quizás esa percepción tan perfecta le quite cierta emoción, y el toreo como he dicho es emoción».

Ya retirado de los ruedos, Tomas no se alejado del toro, y en este caso ha desempeñado múltiples actividades siempre relacionadas con el medio que le dio grandeza. «Pues lo que hago es disfrutar, pero ahora como apoderado, sigo como veedor de toros para algunas empresas, y en lides apoderacionales a un novillero llamado Emilio Huerta, y en este momento, pues Erick Cortés estuvo por Sevilla entrenando y matando algunos toros, me ha pedido que le ayudase para un compromiso de la responsabilidad que implica estar en San Cristóbal, lo que yo he aceptado encantado, sobre todo acompañándole porque es amigo de toda la vida, y representarle un poco como apoderado e intentarle corregirle y darle moral, porque es un torero de mucha calidad y considero que aún es recuperable de seguir en las ferias e intentarle meter en España».

No hay comentarios:

Publicar un comentario