jueves, 22 de septiembre de 2011

EL CIERRE DE LA MONUMENTAL DE BARCELONA: Y después de Cataluña... ¿qué?

Los antitaurinos fijan Galicia como próximo objetivo. *** La crisis hace más mella en los festejos que las protestas. *** Algunos espectáculos populares, en el ojo del huracán.

JOSÉ LUIS VADILLO / Diario El Mundo de España

Cataluña pone este domingo punto (¿final?) a las corridas de toros tras la aprobación en el Parlament de la Iniciativa Legislativa Popular. Los ojos de los movimientos antitaurinos y los temores de los taurinos se dirigen ahora a otras comunidades menos sensibles con la fiesta taurina.

Aunque los animalistas ya han advertido de que su objetivo próximo es la prohibición a nivel estatal, los taurinos pueden decir aquello de "más cornás da la crisis". Hasta el mes de agosto el número de festejos se redujo un 31,6% respecto a 2010, que ya fue un mal año. Los datos más preocupantes son en plazas de tercera (con una caída del 46,5%) y en las novilladas (-41,4%), donde más peso tienen los ayuntamientos como organizadores. La pérdida de espectáculos es dramática si se compara con el año previo a la crisis: el descenso hasta el 31 de agosto es del 240%, según expansion.com.

Así está la situación en el resto de España.

Canarias, en el limbo

De hecho, las islas son territorio sin toros desde hace más de dos décadas. Sin embargo, no existe una ley que prohíba explícitamente las corridas de toros. Los abolicionistas dan por válida la de 1991 de protección de animales. Sin embargo, esta ley afirma que su objeto es exclusivamente "la salvaguarda de los animales domésticos". Otra paradoja: permite las peleas de gallos, una tradición muy arraigada en Canarias. En cualquier caso, es más que dudoso que vuelvan a celebrarse corridas en las Islas.

Baleares, con pocos festejos

El otro archipiélago tampoco es territorio de acogida para los toreros. La administración autonómica está especialmente vigilante con las irregularidades y ha impuesto varias sanciones por faltas como permitir la entrada de menores de 16 años al coso, como ha ocurrido este verano en Inca.

Galicia, ¿próximo objetivo?

La comunidad gallega está en el punto de mira de los antitaurinos. Estos cuentan a su favor con un amplio respaldo social, movimientos nacionalistas (BNG) y ecologistas con gran calado y una fuerte identificación de las corridas como Fiesta Nacional española, lo que provoca rechazo en los sectores nacionalistas, como ocurre en Cataluña. La feria gallega más importante, la de Pontevedra, ha sufrido severos recortes este año, pero se mantiene con buen pulso.

El País Vasco, inmune a los independentistas

En Euskadi la tradición pesa más que la política. La fiesta, considerada «españolista» por los partidos independentistas, ha calado hondo en amplios sectores del nacionalismo, como en el PNV, que apoya sin problemas la celebración de corridas. Las tres capitales vascas tienen ferias de renombre en verano, a las que hay que sumar Azpeitia. También cuenta con un torero destacado en el escalafón, Iván Fandiño, natural de Orduña (Vizcaya), en cuya plaza debutó.

Asturias, otro eslabón débil en el norte

Gijón es la única plaza asturiana que aguanta el tirón. Si bien no existe una fuerte contestación a las corridas en esta comunidad, la indiferencia ha ido menguando los espectáculos. En Cantabria aguanta con fuerza Santander como emblema, mientras que en Navarra además de Pamplona y sus sanfermines están los cosos de Tudela y Estella, con una gran tradición también en festejos populares. En La Rioja, Logroño acoge la Feria de San Mateo en septiembre en su renovada plaza y destaca la feria de novilladas de Arnedo.

Zona centro: los taurinos replican

Varias comunidades autónomas, como la de Madrid y Extremadura y numerosos ayuntamientos han aprobado leyes o se han pronunciado a favor de la fiesta de los toros como bien cultural. Precisamente, Extremadura y Castilla y León tienen intereses más allá de los estéticos: son dos de los enclaves tradicionales de las ganaderías y la cría de toros de lidia tiene un peso importante en sus economías. En cuanto a la celebración de festejos, Castilla y León fue en 2010 la más destacada, con 354, seguida de cerca por Castilla-La Mancha (335). Madrid, pese a su menor tamaño, organizó 280 espectáculos, según los datos del anuario del Ministerio del Interior.

Andalucía, reserva espiritual

Tanto por celebración de festejos como por número de ganaderías, el sur de España continúa a la vanguardia taurina. Los ganaderos han comenzado a buscar otras formas de explotación de su negocio y en Cádiz ya han puesto en marcha visitas turísticas a las fincas. Su televisión autonómica es líder en información taurina. El lunar negro, de nuevo la crisis.

Levante, muy fuerte

Las ferias de Valencia, Castellón, Alicante, Murcia hacen del Mediterráneo uno de los refugios de los toreros. Muchas corridas y novilladas y de calidad. Además, los espectáculos populares tienen un gran seguimiento. De esta tierra son los 'bous' en la calle, los recortes y saltos de toros.

El toro de la Vega, 'Ratón' y otros festejos

El frente antitaurino también mantiene duras batallas en el terreno de los festejos populares. Tras el fin del toro de Coria, en el que el animal era aseteado por los espectadores y participantes, el próximo objetivo a eliminar es la fiesta del toro de la Vega (Tordesillas, Valladolid), en el que el toro debe ser matado de una lanzada. 'Ratón' ha sido el otro protagonista del verano. Este toro de capea ha matado a tres participantes en festejos populares de la Comunidad Valenciana. El peculiar Reglamento Taurino valenciano, muy respetuoso con las tradiciones, permite la participación de los toros en varios festejos y no impone límites de edad, lo que hace cada vez más peligrosos a los morlacos.

Twitter: @jlvadillo

No hay comentarios:

Publicar un comentario