Las
novilladas se convirtieron hace demasiado tiempo en un espectáculo deficitario
y lo sigue siendo a pesar de los esfuerzos de la UNPBE: ¿qué empresa soporta
unas pérdidas de 35.000 euros antes de que salga el toro?
ZABALA DE
LA SERNA
@zabaladelaserna
Diario EL
MUNDO de Madrid
La Unión de Toreros y la Unión Nacional de
Picadores Banderilleros y Mozos (UNPBE), presididas por José Pedro Prados El
Fundi y su hermano David Prados, respectivamente, han emitido un comunicado a
propósito de la polémica desatada en torno a las novilladas de Villaseca de la
Sagra con vetar a quienes actúen en su certamen del Alfarero de Oro: "Ante
las circunstancias que nos ocupan, y la necesidad de seguir defendiendo a
quienes respetan su profesión y la dignifican, comunicar que no se va a admitir
que, en los festejos y circuitos especiales [de la Fundación Toro de Lidia] que
se llevan a cabo gracias al apoyo y sacrificio de los profesionales
comprometidos, participen aquellas empresas, matadores, novilleros, rejoneadores,
picadores, banderilleros y mozos de espadas que incumplen el Convenio Colectivo
Nacional Taurino". El escrito también viene firmado por la Asociación de
Mozos de Espada.Tanto Fundi como su hermano, miembros del Comité
de Crisis de la FTL, se acercaron este domingo a Villaseca en el inicio del
certamen -del que se cayeron Alejandro Mora y Manuel Diosleguarde- para
presionar e intentar negociar con el alcalde Jesús Hijosa, que ha establecido
un modelo extra estatutario que rebaja un 35% de los salarios de las cuadrillas
e impone un pago individualizado a los profesionales además del pago de los
derechos de imagen a los novilleros, una decisión hasta ahora insólita en el
mundo empresarial. Los novilleros no suelen ver un euro de derechos de imagen.
La UNPBE esgrime que los profesionales que la
integran se han rebajado ya un 25% para afrontar los duros tiempos de pandemia.
La Gira de Reconstrucción de la Fundación salió adelante, entre otras cosas,
por la renuncia de esta asociación sindical mayoritaria, que suele cobrar en
bloque los derechos de imagen de las cuadrillas. Algo que siempre ha denunciado
la otra asociación, minoritaria, de banderilleros (ASPROT) que preside Luis
Miguel Calvo, los llamados o descalificados como esquiroles o tuneleros (que
van por debajo de las condiciones estipuladas en el Convenio Nacional Taurino o
por libre, en otra lectura). ASPROT, por cierto, lleva tiempo peleando por el
cobro independiente de sus afiliados de los derechos de imagen. Y no es que
ASPROT sea de una ejemplaridad impecable, pero ahí les asiste la razón.
Pero antes de entrar en cuitas intersindicales
habría que hacer un histórico de la situación de las novilladas, en franco
retroceso desde hace demasiados años. Su presencia en las grandes ferias ha ido
desapareciendo. También en el tejido de ciclos menores, donde han sido
sustituidas por espectáculos populares de menor coste. De ahí el modo en que en
las estadísticas anuales de festejos se han disparado las cifras de este otro
tipo de festejo que no fomenta la cantera.
¿Y qué grava el coste de la organización de las
novilladas más allá de permisos, veterinarios, SS, sanidad e impuestos? Desde
luego, no lo que cobran los novilleros -si les queda para un capote en el mejor
de los casos ya es un éxito- ni el precio del ganado, en caída libre. El
público le dio la espalda hace ya muchos años a las novilladas, convertidas en
un espectáculo deficitario por definición asumido por todo el sector, incluida
la impasible patronal de ANOET. Como si fuera asunto inabordable emprender la
reforma.
Un ejemplo: a pesar de todos los esfuerzos de la
UNPBE -la rebaja del 25%-, cada novillada de los llamados circuitos especiales
de la Fundación Toro de Lidia genera un balance negativo de 35.000 euros, según
reconoce en voz baja, para no molestar, la propia FTL. ¿Quién puede sostener
una perdidas por novillada de 35.000 euros? En el caso de la Liga Nacional de
Novilladas el fondo generado por la Gira de Reconstrucción, que se construyó
sobre la renuncia de los derechos de imagen las cuadrillas. ¿Y en el mundo real
quién asume un mínimo de perdidas antes de que salga del toro de 35.000 euros?
Las novilladas se encontraban en vías de extinción
antes de que apareciese la FTL con sus ligas, tratando de alcanzar donde el
sector no alcanza y convirtiéndose, de paso, en sector. Por eso mismo, antes de
la pandemia el Ministerio de Cultura, en 2019, otorgó el Premio Nacional de
Tauromaquia al Foro de Promoción de Novilladas que preside el alcalde de
Villaseca.
¿Quién llevaba el peso de la organización de
novilladas antes de la pandemia? El Foro de Villaseca de la Sagra, Arganda,
Arnedo, Algemesí, Calasparra... "A día de hoy, nadie quiere hacer
novilladas porque son una auténtica ruina y el descenso de este tipo de
festejos así lo demuestran, porque desde 2007 hasta esta temporada se han dado
400 novilladas menos", declaraba Jesús Hijosa entonces.
Durante algunos años, Hijosa escuchó el interés
del canal de la plataforma de Movistar Plus, Canal Toros, pero siempre encontró
el mismo escollo: el modus operandi de la UNPBE que planteaba el cobro en
bloque de los derechos de imagen por adelantado, según fuentes consultadas.
Como también sucedió en Arnedo.
De los derechos de imagen de los novilleros, que
son el asunto final para el que se organiza una feria de novilladas, nadie ha
hablado nunca. Como si no existieran. Quizá porque no existen. Hasta que el JH
ha puesto el dedo en la llaga. Asumimos como "normal" que el objeto
final de la promoción pueda salir con una mano delante y otra detrás.
A la UNPBE, que ha hecho un esfuerzo en estos
tiempos durísimos, y a la Unión de Toreros, tan maltratadas y ninguneadas por
el Gobierno, quizá les falte perspectiva y autorreflexión para reconocer por
qué la novillería ha llegado hasta aquí y para darse cuenta de que no es el
alcalde de Villaseca -que no debe caer tampoco en posturas absolutistas de
pequeño caudillo- el enemigo a batir. Salvo que la puerta que abre genere tal
miedo a perder los derechos adquiridos -o el poder establecido- que la reacción
sea la de echar a la Fundación por delante para vetar a quien se contrate para
el Alfarero.
Tiendan puentes de diálogo de un lado a otro de
nuevo entre todos. No sólo por Villaseca, sino por el futuro. Igual les sale un
modelo más flexible, asumible, extrapolable y real. Los circuitos
subvencionados y autofinanciados de la FTL no son espejo de la realidad, sino
de sus carencias.
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