Para
este domingo en “Las Fuentes
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| Jorge Esparza llega a esta novillada fontanera con 17 paseíllos cumplidos / Cortesía Emilio Méndez |
El
espada acalitense dentro de su preparación ha hecho tentaderos en Torrecilla y
Puerta Grande, además de que matará un astado a puerta cerrada
ADIEL
ARMANDO BOLIO
Especial para
VUELTA AL RUEDO
De cara a la novillada patria que la empresa del
matador de toros aguascalentense Manuel Gutiérrez ha montado para el próximo
domingo 3 de octubre de 2021 en el Cortijo “Las Fuentes” de Valladolid (Jesús
María), Aguascalientes, a partir de las 16:00 horas, platicamos con uno de los
protagonistas de la función y nos habló de su sentir y expectativas en este
compromiso, nos referimos al experimentado espada aquicalidense Jorge
Esparza.
De entrada, nos dijo: “Me siento más que contento,
capaz y lleno de ilusión porque, aunque no se ha toreado mucho por lo de la
pandemia, esta del domingo será mi segunda en 2021, recordando que la anterior
fue el domingo 15 de agosto en el mismo Cortijo ‘Las Fuentes’, donde a un
ejemplar de San Judas Tadeo le corté las orejas y salí en hombros, pero para
llegar a ella tuvo que pasar poco más un año”.
- ¿Cómo
llegas entonces al compromiso de este domingo?
“Bien, la verdad es que estoy preparado, no he
dejado de estar a punto, pues he podido hacer tentaderos en las ganaderías de
Torrecilla y Puerta Grande, además de que este jueves mataré un astado a puerta
cerrada. Por ello, este domingo saldré entregado a ligar mi segundo triunfo en
dicho cortijo”.
Hasta ahora, Jorge Esparza, quien está cerca de
cumplir 22 años de edad, debutó sin caballos en Ojuelos, Jalisco, el 13 de
noviembre de 2013. Con picadores suma ya 17 novilladas, siendo su debut formal
en el coso “Jorge ‘Ranchero’ Aguilar” de la ciudad de Tlaxcala el 14 de julio
de 2018, con ejemplares de Núñez del Olmo y, su presentación en la plaza “San
Marcos” de Aguascalientes ocurrió el domingo 10 de marzo de 2019, con el astado
llamado “Luciano” de la dehesa de El Garambullo.
Dentro de su trayectoria taurina, Esparza ha
logrado actuar en plazas de importancia como la Monumental “Nuevo Progreso” de
Guadalajara, la Monumental “Lorenzo Garza” de Monterrey y en “Cinco Villas” de
Santiago Cuautlalpan.
Por lo pronto, Jorge Esparza se siente plenamente
alistado para dar la cara este domingo en el jesusmariense Cortijo “Las Fuentes”
y curiosamente alternando con tres de los toreros de su aparición anterior en
agosto, así que recordamos el cartel en turno con el chihuahuense Carlos Gómez
Pezuela, el anfitrión Jorge Esparza, los celayenses José Andrés Origel y
Enrique de Ayala, el regiomontano Pepe León Arroyo, el acalitense Fernando
Vázquez y el aspirante a novillero, también local, Jorge Calvillo, quienes
pasaportarán un encierro de la ganadería jalisciense de Puerta Grande.
DATO
Cuatro nombres se repiten de la anterior novillada en el
Cortijo “Las Fuentes”, Carlos Gómez Pezuela, Jorge Esparza, Pepe León Arroyo y
Jorge Calvillo
Por el ganadero
de La Joya: Arreguín, correspondido en el campo bravo
Don
José Antonio González Esnaurrizar dispuso de un astado del encaste español de
Parladé, vía Las Ramblas, para que el torero ensayara su toreo
Desde el municipio tlaxcalteca de Atlangatepec,
nuestro colega y amigo Luis Miguel Martínez informa que el propietario de la
ganadería de La Joya, con divisa en turquesa, amarillo y blanco, don José
Antonio González Esnaurrizar, correspondió al brindis que le hiciera de un
astado de Real de Saltillo el novillero poblano José Arreguín, quien por cierto
tenía cuatro años de no vestirse de luces, en el festejo realizado en el Club
Hípico Poliforum “Nueva Escocia” de Puebla el pasado sábado 3 de julio, por lo
que para ello dispuso de un eral del encaste español de Parladé, vía Las
Ramblas, para que el joven torero ensayara su tauromaquia.
Así que, tras varias semanas de no asistir al
campo bravo, el espada angelopolitano dio rienda suelta a su creatividad,
entrega y disposición, aprovechando las condiciones del ejemplar para disfrutar
tanto con el capote como con la muleta en pasajes que le permitieron expresar
su concepto del toreo con clase.
El astado colorado de pelaje, ojo de perdiz y
rebarbo, resultó ser de mucha transmisión, emotivo, claro y pronto a los
toques, por lo que el chaval poblano lo llevó templado en los vuelos de la
muleta para que la faena tuviera ritmo, cadencia y buen trazo.
Al final de la lidia, en una mañana donde el clima
permitió las labores camperas, José Arreguín agradeció las atenciones del
ganadero y su familia, por lo que de esta manera se reporta listo para cuando
se le solicite en próximos festejos y así seguir creciendo como torero.
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